Una mujer devota se negó a aceptar la ayuda de varios vecinos que ofrecieron sacarla de su casa durante una inundación, insistiendo en que Dios la ayudaría. Sin embargo, el nivel del agua continuó subiendo y finalmente la mujer se ahogó. Cuando se quejó con Dios por no haberla salvado, Dios le recordó que él le había enviado ayuda a través de los vecinos que ofrecieron sacarla, pero ella se había negado a aceptarla.