El documento define la sociedad como un conjunto de individuos que interactúan y comparten rasgos culturales para alcanzar metas comunes. Explica que las personas son el ingrediente fundamental de una sociedad y establecen sus reglas a través de su comportamiento individual y grupal. Finalmente, señala que para que una sociedad funcione de manera sana y productiva, las personas deben someterse a una normatividad que permita al grupo trabajar hacia un bien común.