2. Una adicción es una enfermedad física y
psicoemocional, según la Organización
Mundial de la Salud. En el sentido tradicional
es una dependencia hacia una
sustancia, actividad o relación
(codependencia). Está representada por los
deseos que consumen los pensamientos y
comportamientos (síndrome de abstinencia) del
adicto, y éstos actúan en aquellas actividades
diseñadas para conseguir la sensación o efecto
deseado y/o para comprometerse en la
actividad deseada (comportamientos
adictivos).
3. Las redes sociales son estructuras sociales
compuestas de grupos de personas, las cuales
están conectadas por uno o varios tipos de
relaciones, tales como
amistad, parentesco, intereses comunes o que
comparten conocimientos.
4. Según la Real Academia Española (RAE),
usuario es «aquél que usa algo» o «que usa
ordinariamente algo». Esto se opone a los
conceptos de web semántica, web 2.0 y 3.0,
trabajo colaborativo ya que la realidad actual
prima a los ciudadanos como emisores y no
solo como receptores que «usan» los medios.
5. En la actualidad, decir que no tienes un perfil
en una red social es más raro que decir que no
fumas. Millones de personas en el mundo
(pregúntale a tu abuela) cuentan con una
página en Facebook, Twitter o LinkedIn.
Existen personas que se conectan a estas
páginas todos los días. Estas conexiones
pueden llegar a realizarse de manera
compulsiva a primera hora de la mañana para
ver las novedades de todos sus conocidos.
6. Tener amigos online, es una forma divertida
de pasar el tiempo y estar en contacto con gente
de la que no sabrías nada de otra manera, pero
estos demasiada “adicción” puede ser algo
verdaderamente peligroso. ¿Puede convertirse
alguien en un adicto a las redes sociales? Las
redes sociales no son un concepto nuevo que
nos pillen de sopetón. Una red social es
simplemente una estructura mediante la que se
mantienen relaciones entre los individuos.
7. Los sitios online, son de mayor alcance, ya que
aprovechan la fuerza de Internet para
gestionar y planificar las relaciones. Es por eso
que la adicción a las redes sociales sea un
término muy popular al que casi no prestamos
atención pero, que si nos paramos a analizar
podemos encontrarnos ante un problema
bastante importante y, sobre todo, mundial.
8.
9. Varios de los estudios realizados en los ’90, se
centraron en la adicción a Internet, la siguiente
década vio el crecimiento de una nueva
adicción en relación con todo tipo de sitios de
redes sociales, especialmente el actual rey de la
selva: Twitter! (que superó a Facebook en
ferocidad y agresividad, pero no en cantidad
de usuarios).
10. Mientras que estas redes han hecho a las
personas, comunidades y grupos con intereses
compartidos por estar más “conectados”, la
adicción a Internet y la adicción a las redes
sociales, en particular, también comenzó a ser
reconocido como trastornos psicológicos en
todo el mundo.
11. El teléfono móvil es culpable de que no
desconectemos de Internet.
El 49,1% de los usuarios señala que usa su
teléfono para conectarse, sobre todo para mirar
el correo, actualizar su estado en redes sociales
o buscar información.
El 30,9% también lo usa para buscar
información.
Estar conectados, hiperconectados… o
desconectados, ya no nos da lo mismo.