1. SEPARADORES DE GRASAS.
Los equipos o tratamientos separadores de grasas y aceites son elementos
esenciales en el tratamiento de aguas residuales que puedan contener materiales
hidrofóbicos como grasas de origen animal, vegetal o aporte de detergentes. Es
necesaria su instalación para una básica depuración de aguas residuales, bien
sea a nivel domestico, comercial como en hoteles, campings, restaurantes…
Los equipos más simples diseñados para separar las grasas consisten en tanques
que se instalan, y simplemente por diferencia de peso y densidad, logran separar
las grasas y los aceites del agua, estos equipos para una optima depuración
deben ser instalados sólo si previamente la red de aguas fecales se ha separado
de las demás aguas servidas.
Funcionamiento:
La diferencia de densidades provoca la separación del líquido en dos fases: la
superior de grasas y la inferior de agua. El efluente se recoge de la parte
intermedia, evitando así la salida de las grasas.
Las grasas y aceites se acumulan en las partes superiores de donde pueden ser
retiradas fácilmente.
2. DESARENADORES.
Los equipos o tratamientos desarenadores son elementos que tienen como
finalidad eliminar arena y otras materias sólidas del efluente.
La sedimentación es un proceso muy importante. Las partículas que se
encuentran en el agua pueden ser perjudiciales en los sistemas o procesos de
tratamiento ya que elevadas turbiedades inhiben los procesos biológicos y se
depositan causando elevadas pérdidas de carga y deterioro de la calidad del agua
efluente.
Funcionamiento:
Su funcionamiento se basa en la reducción de la velocidad del agua y de las
turbulencias, permitiendo así que el material sólido transportado en suspensión
se deposite en el fondo, de donde es retirado periódicamente.
3. DECANTADOR-DIGESTOR CH:
El reactor consta de dos compartimentos: decantador y clarificador.
En el primero se tiene una sección mayor que el colector de llegada del agua, lo que
conlleva una reducción en la velocidad del agua y, por lo tanto, una decantación de
las partículas sólidas sedimentables, que van formando un depósito en la parte
inferior del reactor.
Las partículas más ligeras (grasas, aceites...) ascienden a la parte superior,
formándose una capa flotante . Dicha capa sufre un proceso de fermentación por el
que se convierten en productos más simples solubles en el agua.
Por otra parte, los fangos acumulados en la parte inferior del reactor sufren también
una fermentación, mediante la cual las bacterias anaerobias metabolizan la materia
orgánica, disminuyendo la cantidad de fango.
La descomposición de la materia orgánica y de los fangos generan unos gases que
crean interferencias a la hora de la decantación de sólidos, por ello se dota al reactor
de un segundo compartimento (clarificación), que dota a la fosa de unas mejores
condiciones para la decantación.
Una de las ventajas de este sistema es el escaso mantenimiento requerido. En
general basta con una purga anual de fangos y grasas.