1. PARA LOS ESTUDIANTES UNIVERSITARIOS DE LA PUCV
Indiferencia e Individualismo; Metástasis del sistema educacional chileno.
Lo que están haciendo los estudiantes secundarios es digno de sacarse el
gorro y aplaudirles hasta quedar sin manos. Sin embargo, la comodidad del
observador pasivo y aletargado por la televisión farandulera y los periódicos de
las élites acomodadas, solo permite reproches, malestares y quejas
permanentes. No faltarán los que a conciencia de tener la verdad entre sus
dientes, dirán que las tomas, no son el camino para provocar los cambios que a
todas luces son fundamentales; sobrarán las voces que enunciarán indignados,
que la toma de planteles educacionales, atenta contra aquellos que desean
“educarse” en los plazos que el gobierno fija. Indignados, estarán ellos porque
se ha quemado un bus, o apedreado a un grupo de fuerzas especiales.
Tampoco faltarán los intelectuales que escudriñarán en sus anaqueles
cognitivos e interpretarán desde la comodidad de la primera fila en clases o
desde el abrigo de su pensión universitaria, que nada se saca con las tomas y
paros sucesivos, argumentarán sólidamente que el camino para el cambio es
seguir estudiando, que la obtención del título apremia y que el costo de una
movilización, es un precio, muy elevado de asumir.
Cuesta bien poco creer, que en medio de una discusión medular acerca del
sistema político y económico imperante en Chile, se evidencie de manera cruda
y sin censura, la crisis de identidad y la falta de compromiso social de los
estudiantes de las Universidades Chilenas, sin duda, propiciada por largos
años de una Educación basada en la indiferencia y la individualidad.
Bastaron 6 meses de movilización, para que muchos, de los que durante el
2011 salieran con batucadas y cánticos contestatarios a marchar por las calles,
metieran la cola entre las patas y se fueran a sus casas, apremiados por la
pérdida de tiempo y ofuscados por la menoscabo a las arcas familiares. Las
Universidades en tanto, hicieron lo suyo; para palear los costos de la
movilización, no congelaron aranceles, subieron las cuotas básicas y siguieron
con el aumento exponencial de las matrículas, aún, cuando las salas de clases
siguen atiborradas de estudiantes que no cumplen con los mínimos estándares
de calidad y que aún así, consiguen sortear los años de estudio universitario, a
2. pesar, de que no manejan los contenidos y saberes de su asignatura con
propiedad. Las carreras universitarias de “prestigio”, hacen oídos sordos y
hacen vista gorda de los procesos sociales, ya que la concepción de desarrollo
que les han inculcado, resulta incompatible con la realidad nacional y se
mantienen al margen de cualquier discusión, apelando, a que el tiempo es
dinero y que no importa el bienestar colectivo mientras alguna empresa
extranjera, o un buen jefe, les reciba con jugosos sueldos a fin de mes.
La acumulación de fallas en el sistema político económico imperante en
nuestro país, se ha concentrado en un punto crítico; la educación, y son los
estudiantes de enseñanza secundaria, quienes nuevamente nos enseñan cómo
se hacen las cosas, asemejándose analógicamente, a las células inmunitarias
que luchan contra un cáncer propagado.
La intelectualidad que emana de los estudiantes de las Universidades Chilenas,
apesta a podrido. El cáncer metastático de la individualidad e indiferencia está
arraigado en el cuerpo y alma de este organismo. Las opciones para mejorar
son pocas, muchos de los que habitan en este cuerpo ocupan la quimioterapia
como forma de combatirla, otros se someten a radiaciones atómicas
permanentes y existen algunos, que creen en las terapias alternativas para la
solución de este mal, sin embargo, el actuar de los adolescentes de enseñanza
secundaria, nos muestra claramente que este organismo está a punto de morir,
y que es cosa de tiempo, para que estemos enterrando el cadáver de un
sistema educacional caduco y obsoleto, que muchos y por conveniencia, lo
mantienen conectado a un ventilador artificial.
Vaya para los estudiantes secundarios, toda mi energía y apoyo, ya que
nuevamente nos están enseñando como se lucha contra un sistema
educacional opresivo y retrogrado.
Valparaíso, Agosto del 2012