Este documento describe los nueve frutos del Espíritu Santo mencionados en Gálatas 5:22-23. Explica que cada fruto representa un aspecto del carácter de Cristo reproducido en los creyentes a través de la obra del Espíritu Santo. También enfatiza que todos los frutos forman parte de un solo fruto y deben manifestarse juntos en la vida del cristiano como evidencia de la transformación obra por Dios.