Paul Grice fue un filósofo inglés que desarrolló el principio de cooperación. Este principio establece que en una conversación, los interlocutores deben hacer contribuciones que sean requeridas por el propósito de la conversación. Grice identificó cuatro máximas específicas relacionadas con la cantidad y calidad de la información compartida, su relevancia y claridad. El principio de cooperación busca que la comunicación sea veraz, ajustada y útil para el receptor.