3. Hay palabras que pueden herir
más que los golpes, y los niños
son muy susceptibles a este tipo
de expresiones, por lo que es
mejor pensar bien lo que vas a
decir antes de abrir la boca
4. Sin duda existen palabras que
pueden llegar a dañar la
autoestima de los niños e incluso,
a deteriorar la relación entre
padres e hijos.
5. En muchas ocasiones los padres no
se dan cuenta de que algunas frases
son perjudiciales, debido a que las
han escuchado de sus propios
padres, tíos, abuelos...
6. Se podría decir que estas oraciones se
han convertido en una tradición o en
clásicos, creyendo que son de lo más
común y que no tendrán repercusión
alguna en la autoestima de los infantes.
7. Es verdad que no existe una guía
exacta para ser los mejores
padres, ni para educar sin errores
a los hijos; además de que en
ocasiones hay situaciones que se
salen de control y el enojo, la
impotencia o frustración pueden
hacerte decir cosas que dañan a
tus hijos.
8. Bajo este contexto, De10.mx, con
información de mx.mujer.yahoo.com y
bbmundo.com, hace un listado de las
frases que son mejor que retires de tu
vocabulario a la hora de interactuar con
tu hijo, pues a la larga pueden acarrear
problemas de seguridad y autoestima en
el pequeño.
11. Estas palabras seguidas de un adjetivo
como tonto, insoportable, fastidioso, etc.,
pueden hacer que el niño se sienta en
verdad de esa forma, y más si las usas
constantemente. Es verdad que te pueden
sacar de quicio, pero hablar por hablar no
es la solución; así que piensa bien lo que
vas a decir antes de abrir la boca para
dirigirte a tus hijos.
13. Cuando un padre le dice estas
frases a su hijo, es muy probable
que el pequeño se sienta mal e
inseguro, ya que la persona que
dice amarlo y a la que él quiere,
no le tiene confianza, situación
que lo puede orillar a ya no
expresarse, a no platicar las
cosas que le pasan, porque de
todas formas no le creerán.
15. Reprimir los sentimientos de los niños no
es algo bueno, ya que a la larga podrían
acarrear problemas emocionales y hasta
caer en depresión; es mejor siempre tener
un diálogo constante con ellos para que
expresen sus emociones con palabras y
no con llanto.
17. Esta frase siempre deja como
villano a uno de los padres, ya
que la amenaza lleva consigo
una reprimenda, por lo que el
niño aprenderá con quién sí
puede portarse mal y quién lo
regañará por sus malas acciones.
Aquí lo importante es que el rol
de los padres sea parejo, y que a
ambos les tenga respeto y no
miedo.
19. Los niños están en su proceso de
aprendizaje, y es verdad que a algunos les
cuesta más trabajo realizar ciertas
actividades, sin embargo, en ti, como padre,
tiene que existir la paciencia y el amor por
enseñarles cómo hacer las cosas que más
se les dificultan.
21. Existen mejores maneras de explicarle a
tu hijo que en ese preciso momento estás
ocupado y que no puedes jugar con él;
pero que en cuento te desocupes podrás
prestarle atención. Estas palabras son
muy fuertes para un menor, ya que le
estás diciendo que lo único que hace es
molestarte y que no lo quieres cerca; no
dañes la percepción que tu hijo tiene de
ti, ni pongas barreras invisibles que
después te serán muy complicadas
derribar.
22. 7. "¿Por qué no eres como tu hermano
(a)?" o "Aprende a tu hermano (a)".
23. Las comparaciones nunca son buenas y
menos entre hermanos, ya que estás
propiciando a que genere rencor y que su
relación se vaya desgastando con el
tiempo. Además de que sentirá que el
cariño que tú como padre les tienes, no es
parejo.
24. 8. "¡Me vas a matar de un infarto!" o
"Sólo me das disgustos".
25. Con frases como estas le estás haciendo
ver que sólo te trae problemas, por lo que
se puede sentir mal al darse cuenta que
no aporta nada bueno a tu vida.
27. Las amenazas que no se cumplen tienen
un efecto negativo en los niños. Si él hizo
algo que no es correcto y tú le dijiste que
obtendría un castigo por ello, debes de
cumplirle; pues al no hacerlo, él sabrá
que tus palabras no siempre son ciertas y
tu autoridad se ira demeritando. Del
mismo modo debes cumplir con los
premios que le prometes.
29. Es importante nunca hacerte el
gracioso con los errores que
cometen tus hijos, ya que esto
puede dañar severamente su
autoestima, provocando que le
de miedo realizar diversas
actividades por no ser humillado.