La carta de Santiago insta a los creyentes a tener paciencia mientras esperan el regreso de Jesús, a no quejarse unos de otros para evitar ser condenados, y a tomar como ejemplo a los profetas que sufrieron con paciencia mientras hablaban en nombre del Señor. El documento también ofrece algunas sugerencias espirituales como la oración, la eucaristía y la contemplación para prepararse para la venida de Cristo durante la temporada de Adviento.