La agresión se define como una respuesta que tiene como objetivo causar daño a otro organismo vivo. En los humanos, la agresión puede ser hostil, surgida del enojo con el objetivo directo de dañar, o instrumental, dirigida a hacer daño como un medio para lograr otro fin. Existen diferentes tipos de agresión, como la reactiva e impulsiva en respuesta a provocaciones, o la proactiva y fría orientada a obtener beneficios como dominación o status.