La princesa quería ser mala pero su madre hada no la dejaba ir a la escuela de hadas malas. Su madre sugirió que la princesa participe en obras de teatro donde podría actuar como hada mala. La princesa habló con su maestra y consiguió el papel principal en la próxima obra de la escuela. Disfrutó cambiando de personalidad en las obras y entendió que podía ser buena o mala de manera ficticia. Con el tiempo se hizo famosa por sus papeles teatrales y fue conocida