Los gatitos necesitan ser alimentados dos o tres veces al día con alimentos húmedos o secos humedecidos para facilitar la digestión. Si la alimentación es equilibrada, no requieren suplementos vitamínicos que pueden ser dañinos. Los cachorros requieren una dieta alta en proteínas y taurina, mientras que los adultos deben comer una dieta moderada en cereales que son difíciles de digerir.