Barranquilla se desarrolló como puerto fluvial durante el siglo XIX, convirtiéndose en la puerta de entrada al país y recibiendo grandes oleadas de inmigrantes. Para finales de siglo era el principal puerto de Colombia, con la construcción del muelle de Puerto Colombia. La ciudad se volvió cosmopolita y moderna gracias a la dinamización económica de los extranjeros que se asentaron allí, particularmente sirio-libaneses, alemanes e italianos.