Este documento define una aplicación como un programa informático diseñado para permitir que un usuario realice tareas. Explica que las aplicaciones tienen interfaces de usuario y pueden automatizar procesos para ahorrar tiempo y costos. Además, detalla que el desarrollo de una aplicación implica definir funcionalidades en base al perfil de usuarios y especificaciones técnicas antes de crear la estructura sobre la cual funcionará. Finalmente, menciona tres tipos de aplicaciones: nativas, compatibles y híbridas.