Bartolomé Esteban Murillo (1617-1682) fue un pintor barroco español formado en el naturalismo que evolucionó hacia el barroco pleno. Figura central de la escuela sevillana, fue conocido por sus representaciones de la Inmaculada Concepción y el Buen Pastor, así como por retratar escenas de la vida cotidiana. Dejó varias obras a un convento de capuchinos en Sevilla antes de fallecer.