En el documento se describe la vida cotidiana en las ciudades argentinas en épocas pasadas. Los panaderos utilizaban esclavos para hacer el pan a mano debido a la falta de molinos. También se vendían productos como naranjas, pescado y en pulperías. Con el tiempo se construyeron lugares como la Recova Vieja para que los vendedores ambulantes ofrecieran sus mercancías.