El documento describe la gran diversidad biológica marina y los ecosistemas marinos, pero también destaca las graves amenazas a las que se enfrentan debido a la acción humana, como la sobrepesca, la destrucción de hábitats, la contaminación y el cambio climático. Estas amenazas ponen en peligro la salud de los océanos y su capacidad de sostener la vida, así como de proporcionar servicios esenciales para el bienestar humano como la seguridad alimentaria y los medios de subsistencia.
CAUSAS Y CONSECUENCIAS DE LOS fenomenos y desastres naturales.pptx
Amenazas a la biodiversidad marina
1.
2. Contenido
Características……………………………………………………………………………….2
Amenaza a la biodiversidad marina……………………………………………………….3
La biodiversidad y los ecosistemas marinos mantienen la salud del planeta y
sostienen el bienestar social……………………………………………………………….5
Webgrafías………………………………………………………………………………….11
3. BIODIVERSIDAD MARINA
Biodiversidad marina. La biodiversidad marina o
diversidad biológica marina es el término que define la
amplia variedad de seres vivos dentro de este medio,
especies microscópicas y macroscópicas, y los genes que
habitan entre ellos.
Características
El medio marino tiene unas características muy diferentes a las del medio terrestre y, por lo
tanto, su diversidad biológica es, asimismo, muy distinta, tanto en su composición como en
su estructura y funcionamiento. El agua tiene una mayor capacidad de absorción de energía
que el aire, lo que hace que el medio marino sea mucho más estable en cuanto a la
temperatura que el terrestre, y que controle el clima a nivel global y estabilice las temperaturas
de la superficie terrestre próximas a la costa. El agua del mar es 830 veces más densa que
el aire, por lo que la gravedad afecta a los organismos marinos de forma muy diferente a los
terrestres. La elevada densidad del agua permite la vida en suspensión (plancton y necton)
con un gasto relativamente bajo de energía, lo que posibilita que distintas formas de vida
ocupen todo el volumen de la gran masa de agua, aunque la mayor parte de la vida marina
se concentra en las capas más superficiales (alrededor del 80% de la biomasa se concentra
por encima de los 1000 m).
La existencia de vida en suspensión, así como de diversos tipos de partículas orgánicas y de
nutrientes disueltos supone que el agua transporta en su seno una gran cantidad de alimento.
Ello ha determinado que buena parte de los
grupos o especies de animales marinos se
hayan adaptado a la vida sésil (fija al sustrato) y
a nutrirse simplemente por filtración. Por el
contrario, en el medio terrestre todos los
animales se ven obligados a desplazarse para
obtener el alimento, mientras que sólo los
vegetales pueden vivir fijos al sustrato. En el
fondo marino, plantas y animales compiten por
la ocupación del espacio y, de hecho, muchos paisajes o ecosistemas marinos están
constituidos mayoritariamente por especies animales sésiles. Algunos de los grandes grupos
4. que comprende el Reino Animal están constituidos exclusivamente por especies sésiles
(esponjas, endoproctos, foronídeos, briozoos, ascidiáceos).
Otros, como los cnidarios, aunque cuentan también con especies de vida libre, son
mayoritariamente sésiles y, asimismo, algunos grupos
de animales originariamente móviles (como molúscos
y anélidos), cuentan también con numerosas especies
adaptadas a vivir fijas al sustrato y a alimentarse por
filtración. Por otro lado, aunque muchas de las
especies marinas son bentónicas (viven asociadas al
fondo), buena parte de ellas (se estima que alrededor
del 70%) poseen una o más fases larvarias
planctónicas, lo cual les confiere una gran capacidad de dispersión, que depende de la mayor
o menor duración del periodo que pasan en el plancton. El aislamiento genético requerido
para la formación de nuevas especies se produce con mayor dificultad en el medio marino,
por lo que las tasas de especiación son mucho mayores en el terrestre, donde las barreras
geográficas, los bruscos cambios en el medio físico de unas zonas a otras y la capacidad de
dispersión, por lo general reducida, favorecen la aparición de nuevas especies y la existencia
de un alto número de endemismos locales.
Amenaza a la biodiversidad marina
Los más de 500 expertos internacionales presentes en la primera Conferencia Internacional
sobre Biodiversidad Marina, celebrada en Valencia, han afirmado que las reservas de los
grandes caladeros son tan sólo un 10% con respecto a las que había a principios del siglo
XX. Según el holandés Carlo Heip, copresidente del congreso, la situación está "próxima al
colapso y son necesarios nuevos modelos de gestión."
Los investigadores destacan diversas amenazas que
ponen en peligro la continuidad de la vida marina, todas
ellas relacionadas con la acción humana. La sobrepesca
está poniendo al borde de la extinción a numerosas
especies comerciales y otras que también son afectadas
por los métodos intensivos de las grandes flotas
pesqueras.
5. Por su parte, la falta de protección y la destrucción "masiva" de los hábitats está dejando sin
hogar a miles de especies que merman, desaparecen o tienen que migrar a otros lugares. La
acidificación de los océanos, provocada por el vertido de residuos nitrogenados y sedimentos,
es otro grave problema, ya que está produciendo un incremento de las zonas muertas en un
5% al año: más de 12.000 km2 de áreas marinas con una escasez tal de oxígeno que dificulta
el desarrollo de la vida.
Un estudio de la Fundación BBVA señaló en el año 2008 que
los arrecifes de coral y las praderas submarinas sufren una
tasa de pérdida cinco veces superior a la de los bosques
tropicales. El estudio, coordinado por uno de los copresidentes del congreso de Valencia, el
biólogo del CSIC Carlos M. Duarte, recordaba que a pesar de esta delicada situación, tan
sólo el 0,1% del mar se encuentra en un área protegida, frente al 10% en el caso de la
superficie terrestre.
Los expertos añaden el problema del cambio climático,
que entre otros efectos negativos, está contribuyendo
a reducir el hielo del Ártico y a aumentar la temperatura
de las zonas templadas, favoreciendo así la
proliferación de especies invasoras marinas. Se ha
detectado que determinadas algas invasoras avanzan
50 kilómetros por década. Por ello, Duarte ha
asegurado que el calentamiento global podría ser "el golpe de gracia que cause un deterioro
catastrófico".
La biodiversidad y los ecosistemas marinos mantienen la salud del
planeta y sostienen el bienestar social.
En ningún otro ámbito la importancia de la biodiversidad para el desarrollo sostenible es más
esencial que en los océanos. La biodiversidad marina, esto es,
la variedad de vida en los océanos y los mares, es un aspecto
fundamental de los tres pilares del desarrollo sostenible
económico, social y ambiental, que mantiene el
funcionamiento saludable del planeta y proporciona servicios
6. que sustentan la salud, el bienestar y la prosperidad de la humanidad.
Los océanos son una de las principales reservas de
biodiversidad en el mundo. Constituyen más del 90%
del espacio habitable del planeta y contienen unas
250.000 especies conocidas y muchas más que aún
quedan por descubrir, ya que todavía no se han
identificado más de dos tercios de las especies
marinas del mundo.
Los océanos y la vida que contienen son
fundamentales para el funcionamiento saludable del planeta, ya que suministran la mitad del
oxígeno que respiramos y absorben anualmente un 26% de las emisiones antropógenas de
dióxido de carbono emitidas a la atmósfera.
Cada vez hay más evidencias que demuestran el papel esencial que desempeña la
biodiversidad marina para la salud del planeta y el bienestar social. Los sectores de la pesca
y la acuicultura son una fuente de ingresos para cientos de millones de personas,
especialmente para las familias de bajos ingresos, y contribuyen directa e indirectamente a
su seguridad alimentaria. Los ecosistemas marinos proporcionan innumerables servicios a
las comunidades costeras de todo el mundo. Por ejemplo, los ecosistemas de los manglares
son una importante fuente de alimento para más de 210 millones de personas, pero también
prestan otros muchos servicios como medios de subsistencia, agua limpia, productos
forestales y protección contra la erosión y los fenómenos meteorológicos extremos.
No es sorprendente que, dados los recursos que el océano proporciona, se hayan
desarrollado asentamientos humanos cerca de la costa: el 38% de la población mundial vive
a menos de 100 km de la costa, el 44% a menos de 150 km, el 50% a menos de 200 km y el
67% a menos de 400 km. Aproximadamente el 61% del total del producto interno bruto del
mundo proviene del océano y de las zonas costeras situadas a menos de 100 km del litoral.
Estas zonas, donde la densidad de población es 2,6 veces más elevada que en las zonas del
interior, se benefician directa e indirectamente de los bienes y servicios de los ecosistemas
costeros y marinos, que contribuyen a la erradicación de la pobreza, el crecimiento económico
sostenido, la seguridad alimentaria y la creación de medios de subsistencia sostenibles y de
empleo inclusivo, al tiempo que albergan una rica biodiversidad y mitigan los efectos del
cambio climático.
7. Por eso, las presiones que afectan negativamente a la biodiversidad marina socavan también
y ponen en peligro el funcionamiento saludable del planeta y su capacidad para proporcionar
los servicios que necesitamos para sobrevivir y
prosperar. Además, si sigue aumentando la presión
sobre los océanos, la continuidad de la prestación de
estos servicios se verá gravemente amenazada. Las
consecuencias de la pérdida de biodiversidad suelen ser
más graves para los pobres, que dependen en gran
medida de los servicios de los ecosistemas locales para
su subsistencia y son altamente vulnerables a los
impactos sobre tales servicios.
Las preocupaciones por el drástico deterioro de la biodiversidad constituyeron el origen del
Convenio sobre la Diversidad Biológica. El Convenio engloba tres objetivos complementarios
entre sí: la conservación de la biodiversidad, el uso sostenible de sus componentes y el
reparto justo y equitativo de los beneficios derivados de la utilización de los recursos
genéticos. Con 196 Estados partes en el Convenio, este tiene casi carácter universal, señal
de que el mundo entero ha tomado conciencia de la necesidad de trabajar conjuntamente
para asegurar la supervivencia de la vida en la Tierra.
El Convenio cumple también la función de ser un centro de coordinación en materia de
biodiversidad para todo el sistema de las Naciones Unidas y la base para que otros
instrumentos y procesos internacionales integren en su labor las cuestiones relativas a la
biodiversidad; por tanto, es un elemento central del marco mundial para el desarrollo
sostenible. El Plan Estratégico para la Diversidad Biológica 2011-2020 y sus 20 Metas para
la Diversidad Biológica que los Estados partes en el Convenio aprobaron en Nagoya,
prefectura de Aichi (Japón) en 2010 proporcionan un marco eficaz para la cooperación con
miras a lograr un futuro en el que la comunidad mundial pueda beneficiarse sostenible y
equitativamente de la biodiversidad, sin que ello afecte a la capacidad de las generaciones
futuras para hacerlo también.
La importancia fundamental de la biodiversidad marina para el desarrollo sostenible fue
reconocida en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y los Objetivos de Desarrollo
Sostenible (ODS), en los que los líderes mundiales resaltaron la urgencia de adoptar medidas
para mejorar la conservación y el uso sostenible de la biodiversidad marina. En particular, el
ODS 14—conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos
para el desarrollo sostenible— hace hincapié en los fuertes vínculos que existen entre la
biodiversidad marina y los objetivos más amplios de desarrollo sostenible. De hecho, muchos
8. elementos del ODS 14 y otros ODS reflejan los mismos objetivos y principios que los
acordados en las Metas de Aichi para la Diversidad Biológica. Por tanto, los esfuerzos a todos
los niveles por lograr las Metas de Aichi contribuirán directamente al cumplimiento de la
Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y a la consecución de los ODS.
La biodiversidad y los ecosistemas marinos están intrínsecamente vinculados a una amplia
gama de servicios que son esenciales para el desarrollo sostenible. Estas relaciones suelen
ser complejas y dinámicas, y se ven afectadas por los bucles de retroalimentación y los
efectos de las sinergias. Por eso es preciso adoptar
un enfoque integrado y holístico de la conservación y
el uso sostenible de la biodiversidad marina, basado
en los ecosistemas y en los criterios de prevención,
en los principios de inclusión y equidad y en la
necesidad de brindar múltiples beneficios a los
ecosistemas y las comunidades.
La labor realizada en el marco del Convenio ha evolucionado para reflejar este enfoque y
para ayudar a los Estados partes y a las organizaciones pertinentes a aplicarlo,
principalmente mediante estrategias y planes de acción nacionales sobre biodiversidad y
mediante políticas, programas y medidas en los sectores que afectan a la biodiversidad y que
a su vez dependen de ella.
Esta labor adopta un enfoque temático centrado en:
a) comprender el valor ecológico y biológico de los océanos
b) hacer frente a los efectos de las presiones y amenazas sobre la biodiversidad de las zonas
marinas y costeras
c) facilitar la utilización de herramientas para aplicar el enfoque ecosistémico en pro de su
conservación y uso sostenible
d) crear capacidad para establecer las condiciones propicias para la aplicación del Convenio
e) integrar la biodiversidad en los distintos sectores.
En el marco del Convenio sobre la Diversidad Biológica, el proceso mundial de identificación
de las áreas marinas de importancia ecológica o biológica ha servido para mejorar la
comprensión del valor ecológico y biológico de las zonas marinas en casi todas las regiones
oceánicas del mundo. Este trabajo es un punto de partida importante en materia de
9. conservación y gestión y crea las condiciones propicias para seguir mejorando y utilizando
estos conocimientos y para impulsar la creación de redes científicas y asociaciones a nivel
regional. También es útil para identificar lagunas de conocimiento y para dar prioridad a las
actividades de vigilancia e investigación que refuerzan la aplicación del enfoque ecosistémico.
Los Estados partes han dado también prioridad a la necesidad de hacer frente a las
principales presiones sobre la biodiversidad marina, como las prácticas de pesca no
sostenibles, la basura marina y el ruido subacuático antropógeno, el cambio climático y la
acidificación de los océanos.
La secretaría, los Estados partes en el Convenio, otros
Gobiernos y las organizaciones pertinentes trabajan con
científicos y expertos para sintetizar los mejores
conocimientos disponibles sobre los efectos de las presiones
y factores de perturbación clave, y para elaborar directrices
uniformes sobre los medios para prevenir y mitigar los
efectos adversos de dichas presiones.
Con base en los talleres de formación organizados por expertos, las publicaciones y la
participación en otros procesos pertinentes, el Convenio sobre la Diversidad Biológica ha
elaborado directrices para el desarrollo y la aplicación del enfoque ecosistémico, con medidas
como la planificación del espacio marino y el establecimiento de zonas marinas y costeras
protegidas y la incorporación de la diversidad biológica en las evaluaciones de impacto
ambiental y en las evaluaciones ambientales estratégicas, que integran diferentes medidas
de política sectorial para hacer frente a las diversas presiones existentes sobre el valor
biológico y ecológico de los océanos.
Otro aspecto central del Convenio sobre la Diversidad Biológica es la creación de capacidad
para su aplicación. Uno de los instrumentos para ello es la Iniciativa de Océanos Sostenibles,
un marco mundial de colaboración coordinado por la secretaría del Convenio junto con
diversas entidades de las Naciones Unidas y organizaciones internacionales asociadas. La
Iniciativa se basa en las medidas, los recursos y las experiencias existentes mediante el
fomento de las asociaciones, la difusión de las lecciones aprendidas y los conocimientos
adquiridos y la mejora de la coordinación entre los distintos sectores y grupos de interesados.
Y lo hace a múltiples niveles con miras a crear las condiciones propicias necesarias para
mejorar la aplicación sobre el terreno. La Iniciativa de Océanos Sostenibles trabaja para
facilitar el diálogo y la coordinación intersectoriales a escala regional a través de actividades
como el Diálogo Global con Organizaciones de Mares Regionales y Organismos de Pesca
10. Regionales con miras a Acelerar el Progreso hacia las Metas de Aichi para la Diversidad
Biológica.
Los Estados partes han dado también prioridad a la incorporación de los aspectos relativos a
la biodiversidad en los sectores económicos que afectan a los ecosistemas marinos
saludables, y que a su vez dependen de ellos para un crecimiento económico sostenible. La
incorporación de la perspectiva de la biodiversidad en los distintos sectores ocupó un lugar
destacado en la reciente Conferencia de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica,
celebrada en Cancún (México) en diciembre de 2016.
Durante la serie de sesiones de alto nivel de la
Conferencia, ministros de medio ambiente, pesca y
turismo, entre otros, expresaron su compromiso,
haciendo suya la Declaración de Cancún, de trabajar a
todos los niveles con los Gobiernos y en todos los
sectores para incorporar la perspectiva de la
biodiversidad en los programas de desarrollo sectorial.
Con este espíritu, la secretaría del Convenio sobre la Diversidad Biológica ha trabajado
estrechamente durante años con la Organización de las Naciones Unidas para la
Alimentación y la Agricultura, los organismos de pesca regionales y otras partes interesadas
para reforzar la aplicación del Convenio por los Estados partes y para lograr una mejor
incorporación de la perspectiva de la biodiversidad en los sectores de la pesca y la acuicultura.
Si queremos alcanzar los ODS y las Metas de Aichi para la Diversidad Biológica, tendremos
que abandonar los enfoques que tradicionalmente se han venido aplicando e incorporar la
perspectiva de la biodiversidad en nuestra planificación del desarrollo, en la gobernanza y en
los procesos de adopción de decisiones. Para lograr los cambios tan desesperadamente
necesarios sobre el terreno, tendremos que movilizar recursos. Además, las partes
interesadas a todos los niveles tendrán que ser conscientes de cómo sus acciones y
comportamientos afectan a los ecosistemas marinos de los que todos dependemos, y tomar
decisiones informadas para mejorar nuestra relación con el océano, que tanto nos ha dado a
lo largo de la historia.
La próxima Conferencia sobre los Océanos, que se celebrará en la Sede de las Naciones
Unidas en Nueva York del 5 al 9 de junio de 2017, brinda una oportunidad extraordinaria para
construir la voluntad política necesaria y establecer las condiciones propicias para fomentar
una mejor aplicación a todos los niveles con inclusión de todas las partes interesadas, a fin
de lograr un futuro con una biodiversidad marina sana y productiva que sustente el bienestar
de la sociedad. En consonancia con los principios de la equidad intergeneracional, también
11. debemos reconocer el derecho de las generaciones futuras a heredar un planeta lleno de vida
y a cosechar los beneficios económicos, culturales y espirituales de un océano saludable.
WEBGRAFÍA
a. https://www.ecured.cu/Biodiversidad_marina
b. https://www.un.org/es/chronicle/article/la-biodiversidad-y-los-
ecosistemas-marinos-mantienen-la-salud-del-planeta-y-sostienen-
el-bienestar
c. https://www.consumer.es/medio-ambiente/biodiversidad-marina-
en-peligro.html
d. https://www.cbd.int/ebsa/