El documento habla sobre la importancia de la participación escolar y una cultura de respeto en la casa y la escuela. Se menciona que en la casa del autor no hay bullying y se respeta a todos los miembros de la familia. También se enfatiza la necesidad de que los gobernantes cumplan con lo que proponen y que toda la familia tiene derecho a la democracia y participación al igual que los demás. Finalmente, se identifican los robos y grafitis en las escuelas como problemas graves para la educación.