El documento describe la caridad como el amor de Dios por sí mismo y por la humanidad. Explica que Dios es amor y que envió a su Hijo y al Espíritu Santo para revelar su amor y permitir que los humanos participen en él. También describe cómo Dios amó al mundo enviando a su Hijo para salvarnos, y cómo Jesús amó a sus discípulos hasta el final. Finalmente, la caridad implica que los humanos respondan amando a Dios, a Jesús y al Espíritu Santo, y que también se amen los unos a los

1. La caridad
1. En primer lugar, la caridad
(en griego: agápe) es el
amor de Dios en sí mismo:
“..."Dios es Amor" (1 Jn 4,8.16);
el ser mismo de Dios es
Amor. Al enviar en la
plenitud de los tiempos a su
Hijo único y al Espíritu de
Amor, Dios revela su secreto
más íntimo; El mismo es una
eterna comunicación de
amor: Padre, Hijo y Espíritu
Santo, y nos ha destinado a
participar en El” (CCE 221).

2. 2. En segundo lugar, la caridad es el amor de la
Trinidad al mundo, especialmente a los hombres:
-“Dios amó tanto al mundo, que entregó a su Hijo
único para que todo el que cree en él no muera, sino
que tenga Vida eterna” (Jn 3, 16).
-“Antes de la fiesta de Pascua, sabiendo Jesús que
había llegado la hora de pasar de este mundo al
Padre, él, que había amado a los suyos que
quedaban en el mundo, los amó hasta el fin” (Jn
13,1).
- “El amor de Dios ha sido derramado en nuestros
corazones por el Espíritu Santo, que nos ha sido
dado” (Rm 5,5).
La caridad

3. - “Así Dios nos manifestó su amor:
envió a su Hijo único al mundo,
para que tuviéramos Vida por
medio de él. Y este amor no
consiste en que nosotros
hayamos amado a Dios, sino en
que él nos amó primero, y envió
a su Hijo como víctima
propiciatoria por nuestros
pecados” (1 Jn 4, 9s).
- Y “la prueba de que Dios nos ama
es que Cristo murió por nosotros
cuando todavía éramos
pecadores” (Rm 5,8).

4. 3. Recién en tercer lugar entra la acción humana:
- la caridad es la respuesta de amor del hombre a
Dios, contemplado como Padre (cf. Mt 6, 1-18);
- a Jesús, contemplado como nuestro hermano
mayor (cf. Rm 8, 29);
- y al Espíritu Santo Paráclito: el Dios amigo que
nos acompaña, fortalece y aconseja en el camino
de la vida... (cf. Jn 14-16).
La caridad

5. 4. En cuarto lugar, la caridad es el amor mutuo que nos
tenemos los seres humanos, contemplándonos como
hermanos, a la luz de la contemplación del Padre común.
Por eso, dice Jesús:
- “Ustedes tienen un solo padre:
el Padre celestial...
y todos ustedes son hermanos”
(cf. Mt 23, 8s).
- “Este es mi mandamiento: Amense los unos a los otros,
como yo los he amado” (Jn 15,12).

6. - Finalmente –en quinto lugar, entonces – la
caridad es la asistencia material al hermano
necesitado... Contemplado como hermano a
la luz de Dios, y valorado como un igual.