1. Carlos Ruiz Zafón – “La sombra del Viento” - Quotes
• Tal vez la atmósfera hechicera había podido conmigo, pero tuve la
seguridad de que aquel libro había estado allí esperándome durante años,
probablemente desde antes que naciese.
• Pocas cosas marcan tanto a un lector como el primer libro que realmente
se abre camino hasta su corazón.
• Las mujeres tienen un instinto infalible para saber cuando un hombre se
ha enamorado de ellas perdidamente, especialmente si el varón en cuestión es un
tonto de capirote y menor de edad.
• Una de las trampas de la infancia es que no hace falta comprender algo
para sentirlo. Para cuando la razón es capaz de entender lo sucedido, las heridas
en el corazón ya son demasiado profundas.
• Si me hubiese parado a pensarlo, hubiera comprendido que mi devoción
por Clara no era más que una fuente de sufrimiento. Quizá por eso la adoraba
más, por esa estupidez eterna de perseguir a los que nos hacen daño.
• Si algún día tiene usted una hija empezará, sin darse cuenta a dividir a los
hombres en dos clases: los que usted sospecha que se acuestan con ella y los
que no.

2. • Este mundo no morirá de una bomba atómica como dicen los diarios, se
morirá de risa, de banalidad, haciendo un chiste de todo, además un chiste malo.
• Las palabras con la que se envenena el corazón de un hijo, por
mezquindad o por ignorancia se quedan enquistadas en la memoria y tarde o
temprano le queman el alma.
• Le hablé de cómo, hasta ese momento no había comprendido que aquella
era una historia de gente sola, de ausencias y de pérdida y que por esa razón e
había refugiado en ella hasta confundirla con mi propia vida, como quien escapa a
través de las páginas de una novela porque aquellos a quien necesita amar son
solo sombras que viven en el alma de un extraño.
• El modo más eficaz de hacer inofensivos a los pobres es enseñarles a
querer imitar a los ricos.
• No hay segundas oportunidades, excepto para el remordimiento.
• Lo que mata es la soledad, los recuerdos son peores que balas.
• Las guerras no tienen memoria y nadie se atreve a comprenderlas hasta
que ya no quedan voces para contar lo que pasó, hasta que lega el momento en
que no se las reconoce y regresan, con otra cara y otro nombre, a devorar lo que
dejarán atrás.

3. • ¿Sabe el loco que está loco? ¿O los locos son los demás, que se
empeñan en convencerle de su sinrazón para salvaguardar su existencia de
quimeras?
• El tiempo me ha enseñado a no perder las esperanzas, pero a no confiar
demasiado en ellas.