El CMMI es un modelo de madurez de procesos que ayuda a las organizaciones a mejorar la calidad de sus procesos de desarrollo, adquisición y prestación de servicios. Ofrece una representación continua o escalonada y guías de seguridad como OPSD, SMP, SRTS y SVV. Al aplicar CMMI, las organizaciones pueden reducir la improvisación, mejorar el cumplimiento de plazos, aumentar la satisfacción del cliente y facilitar la reusabilidad.