El CMM es un modelo de referencia desarrollado para mejorar la calidad del software a través de la aplicación de conceptos de gestión de procesos. Se compone de cinco niveles de madurez que van desde inicial hasta optimizante, donde cada nivel mejora las áreas de proceso del anterior. El modelo ayuda a las organizaciones a alcanzar procesos más maduros y exitosos mediante la definición, medición, control y mejora continua de sus procesos de desarrollo de software.