La tecnología de la comunicación ha evolucionado mucho, trayendo cambios económicos, sociales y culturales. Cada innovación tecnológica hace la comunicación más fácil pero también más costosa. Socialmente, la adicción a la tecnología puede afectar las interacciones personales y el gasto. Culturalmente, los jóvenes adoptan nuevas formas de vestir, hablar y comportarse influenciados por la tecnología, alejándose de las costumbres del pasado.