Este pasaje bíblico describe la importancia de permanecer conectado a Jesús. Indica que si permanecemos en Jesús llevaremos mucho fruto, pero si nos separamos de él nada podremos hacer y seremos echados. También dice que al permanecer en Jesús y obedecer sus palabras podremos pedirle lo que queramos. El propósito es que al dar fruto glorifiquemos a Dios como sus discípulos.