Los sufrimientos de Jesús en Getsemaní y en su Pasión fueron inmensos, tanto física como espiritualmente. En Getsemaní, Jesús experimentó una angustia intensa al aceptar cargar con los pecados de la humanidad, sintiéndose separado de Dios. Sudó gotas de sangre debido al sufrimiento moral. La causa principal de su sufrimiento fue su amor hacia la humanidad, al aceptar voluntariamente la muerte en la cruz para salvarnos del pecado.
El sacrificio de Jesús en la cruz fue motivado por el amor de Dios hacia la humanidad, no por su ira. Aunque el pecado despierta la ira de Dios, Él dirige su ira contra el pecado y no contra los pecadores. Jesús cargó voluntariamente con los pecados de la humanidad y murió en nuestro lugar para salvarnos de la condenación, a pesar del profundo sufrimiento que esto le causó tanto física como espiritualmente.
Desde el principio, la Biblia señala hacia la muerte de Cristo en la cruz para redimirnos del pecado. Aunque se usan diferentes símbolos como Isaac e Isaías 53, en el centro está su sustitución en la cruz para salvarnos. Su sacrificio muestra el extremo al que Dios llegó por amor, a pesar de su santa ira contra el pecado.
El documento resume cinco pasajes del libro de Isaías que ofrecen vislumbres de la vida y obra de Jesús. Describe que Jesús traerá justicia de manera humilde, anunciará sufrimiento y rechazo, será azotado y torturado pero confiará en Dios, será rechazado pero morirá por nuestros pecados, y predicará buenas nuevas guiado por el Espíritu Santo. También cita pasajes de la Biblia que explican que Jesús murió en nuestro lugar para darnos vida eterna, y
El documento habla sobre la expiación como la forma en que el pecado es absuelto al cargar con su pena. Explica que la expiación se fundamenta en el pecado como algo que contamina al hombre y lo separa de Dios. Luego describe el origen del sacrificio como algo ordenado por Dios antes de la creación y luego instituido en la tierra para los pecadores arrepentidos. Finalmente, detalla los efectos de la expiación de Cristo como el perdón de pecados, libertad del poder del pecado y liberación de la muerte.
1) Jesús murió crucificado para redimir a la humanidad de sus pecados, según el plan y diseño de Dios revelado en las Escrituras.
2) Jesús descendió a los infiernos para anunciar su victoria sobre la muerte a quienes esperaban la redención.
3) Al tercer día, Jesús resucitó de entre los muertos con un cuerpo glorificado, confirmando su divinidad y dando esperanza a la humanidad de la vida eterna.
Este documento describe el sufrimiento de Jesús en el Getsemaní y en la cruz como expiación por los pecados de la humanidad. Resume que Jesús experimentó una gran angustia al aceptar la copa del sufrimiento por nuestros pecados. En la cruz, Jesús sufrió la separación total de Dios al ser castigado en nuestro lugar, pero finalmente exclamó "¡Consumado está!" tras vencer al pecado y a la muerte a través de su sacrificio.
El documento describe el sistema de sacrificios del Antiguo Testamento, el cual señalaba al sacrificio de Cristo. Explica que diferentes tipos de sacrificios se ofrecían para expiar pecados intencionales e involuntarios, y que la sangre de los animales simbolizaba la sangre de Cristo que quita el pecado. También describe los diferentes ritos asociados con los sacrificios y su significado espiritual de identificarse con la víctima y transferir el pecado.
Este documento resume las siete palabras pronunciadas por Cristo en la cruz durante su crucifixión. 1) La primera palabra, "Padre, perdónalos", expresa la misericordia de Dios hacia la humanidad. 2) La segunda palabra, dirigida a un ladrón crucificado junto a él, "De cierto te digo: Hoy estarás conmigo en el Paraíso", ofrece esperanza de salvación. 3) La tercera palabra, "Mujer, he aquí tu hijo; Juan he ahí tu madre", demuestra el cuidado de Cristo
El sacrificio de Jesús en la cruz fue motivado por el amor de Dios hacia la humanidad, no por su ira. Aunque el pecado despierta la ira de Dios, Él dirige su ira contra el pecado y no contra los pecadores. Jesús cargó voluntariamente con los pecados de la humanidad y murió en nuestro lugar para salvarnos de la condenación, a pesar del profundo sufrimiento que esto le causó tanto física como espiritualmente.
Desde el principio, la Biblia señala hacia la muerte de Cristo en la cruz para redimirnos del pecado. Aunque se usan diferentes símbolos como Isaac e Isaías 53, en el centro está su sustitución en la cruz para salvarnos. Su sacrificio muestra el extremo al que Dios llegó por amor, a pesar de su santa ira contra el pecado.
El documento resume cinco pasajes del libro de Isaías que ofrecen vislumbres de la vida y obra de Jesús. Describe que Jesús traerá justicia de manera humilde, anunciará sufrimiento y rechazo, será azotado y torturado pero confiará en Dios, será rechazado pero morirá por nuestros pecados, y predicará buenas nuevas guiado por el Espíritu Santo. También cita pasajes de la Biblia que explican que Jesús murió en nuestro lugar para darnos vida eterna, y
El documento habla sobre la expiación como la forma en que el pecado es absuelto al cargar con su pena. Explica que la expiación se fundamenta en el pecado como algo que contamina al hombre y lo separa de Dios. Luego describe el origen del sacrificio como algo ordenado por Dios antes de la creación y luego instituido en la tierra para los pecadores arrepentidos. Finalmente, detalla los efectos de la expiación de Cristo como el perdón de pecados, libertad del poder del pecado y liberación de la muerte.
1) Jesús murió crucificado para redimir a la humanidad de sus pecados, según el plan y diseño de Dios revelado en las Escrituras.
2) Jesús descendió a los infiernos para anunciar su victoria sobre la muerte a quienes esperaban la redención.
3) Al tercer día, Jesús resucitó de entre los muertos con un cuerpo glorificado, confirmando su divinidad y dando esperanza a la humanidad de la vida eterna.
Este documento describe el sufrimiento de Jesús en el Getsemaní y en la cruz como expiación por los pecados de la humanidad. Resume que Jesús experimentó una gran angustia al aceptar la copa del sufrimiento por nuestros pecados. En la cruz, Jesús sufrió la separación total de Dios al ser castigado en nuestro lugar, pero finalmente exclamó "¡Consumado está!" tras vencer al pecado y a la muerte a través de su sacrificio.
El documento describe el sistema de sacrificios del Antiguo Testamento, el cual señalaba al sacrificio de Cristo. Explica que diferentes tipos de sacrificios se ofrecían para expiar pecados intencionales e involuntarios, y que la sangre de los animales simbolizaba la sangre de Cristo que quita el pecado. También describe los diferentes ritos asociados con los sacrificios y su significado espiritual de identificarse con la víctima y transferir el pecado.
Este documento resume las siete palabras pronunciadas por Cristo en la cruz durante su crucifixión. 1) La primera palabra, "Padre, perdónalos", expresa la misericordia de Dios hacia la humanidad. 2) La segunda palabra, dirigida a un ladrón crucificado junto a él, "De cierto te digo: Hoy estarás conmigo en el Paraíso", ofrece esperanza de salvación. 3) La tercera palabra, "Mujer, he aquí tu hijo; Juan he ahí tu madre", demuestra el cuidado de Cristo
¿Cuan importante es la muerte de Cristo?
¿Cual es el significado del Calvario?
¿Por qué se hizo hombre Dios?‘
¿Por qué murió Cristo?
¿Cual es el significado de la expiación, la sustitución, la satisfacción y la propiciación?
¿La muerte de Cristo fue un ministerio realizado para nuestro beneficio o en nuestra sustitución?
¿Cuales son los logros de la Cruz?
¿Que significa vivir bajo la Cruz?
El documento resume los ritos del Día de Expiación en el antiguo Santuario terrenal, describiendo las funciones del Sumo Sacerdote, los dos machos cabríos y el pueblo. El Sumo Sacerdote ofrecía sacrificios por sí mismo y los sacerdotes para estar limpios. Un macho cabrío era sacrificado para purificar el Santuario, y el otro cargaba los pecados del pueblo y era enviado al desierto. El pueblo debía afligir sus almas y abstenerse de trabajar. Esto prefiguraba la
El documento resume el sistema de sacrificios del Antiguo Testamento, señalando que apuntaba al sacrificio de Cristo. Explica los cinco tipos de sacrificios y sus propósitos respectivos, así como los animales utilizados y los procedimientos. Finalmente, destaca que estos rituales ayudaban a los israelitas a comprender que el pecado requería un precio, el cual solo podía pagarse a través de la muerte de Cristo.
El documento resume el significado y propósito de la expiación en el Antiguo Testamento, así como los detalles del Día de Expiación. La expiación involucraba el sacrificio de animales sin mancha para cubrir los pecados e impurezas, restaurando la relación del pecador con Dios. El Nuevo Testamento enseña que mientras las ofrendas del AT solo cubrían temporalmente los pecados, el sacrificio definitivo de Cristo en la cruz quitó los pecados de una vez por todas.
1) El documento describe los ritos y símbolos del Día de la Expiación según se describe en el Libro de Levítico, incluyendo los sacrificios de dos machos cabríos. 2) Explica que estos ritos y símbolos enseñan sobre la obra de expiación de Jesús desde su primera venida hasta su segunda venida. 3) Señala que al final Satanás será destruido junto con todo rastro de pecado.
El documento describe la expiación en el Antiguo y Nuevo Testamento. En el Antiguo Testamento, los sacrificios de animales fueron ordenados por Dios como una señal de la expiación perfecta que vendría en Cristo. Estos sacrificios prepararon al pueblo para entender la muerte de Cristo como la verdadera expiación por los pecados. En el Nuevo Testamento, la muerte de Cristo proporcionó el perdón de pecados, la liberación del pecado y la muerte, y la vida eterna.
Este documento discute la importancia de la cruz de Cristo para el cristianismo. Señala que aunque algunas denominaciones rechazan la cruz, es el símbolo central de la redención porque fue en la cruz donde Jesús murió para salvarnos de nuestros pecados. Refuta las afirmaciones de que Jesús murió en un palo vertical en lugar de una cruz, y resalta que la cruz representa el amor de Dios y nuestra obediencia a Él.
El documento resume las lecturas bíblicas para el Décimo Domingo del Tiempo Ordinario, que incluyen la ratificación de la Alianza entre Dios y su pueblo en el Antiguo Testamento y la institución de la Eucaristía por Jesús como la Nueva Alianza en el Nuevo Testamento. Se describe cómo Jesús tomó los elementos del pan y el vino durante la Última Cena y dijo que eran su cuerpo y su sangre, estableciendo así el sacramento central del cristianismo.
El documento resume tres conceptos bíblicos relacionados con la ofrenda de purificación. 1) La sangre de la ofrenda transfería la culpa del pecado al santuario terrenal. 2) La obra sacerdotal en el santuario terrenal prefiguraba la obra de Cristo de llevar sobre sí mismo la culpa de nuestros pecados. 3) Al igual que Dios se deleita en la misericordia, los que han experimentado su gracia imitarán su carácter amoroso y misericordioso.
El documento resume la crucifixión de Jesucristo. Describe cómo fue condenado a morir de la forma más vergonzosa a pesar de ser el único justo. Jesús murió para salvar a toda la humanidad de sus pecados. Aunque su sacrificio es el más significativo, a menudo se pierde el verdadero mensaje de amor y reconciliación con Dios. El documento también analiza las 7 actitudes hacia Jesús crucificado, como burlarse de él y hacer negocio con sus pertenencias.
Este documento presenta un Via Crucis escrito por el Cardenal Joseph Ratzinger, actual Papa Benedicto XVI. En la introducción, Ratzinger explica que el Via Crucis sigue el camino de Jesús como el grano de trigo que muere para dar mucho fruto, interpretando su vida, muerte y resurrección en la perspectiva de la Eucaristía. El Via Crucis conduce a una comunión profunda con Jesús y debe ser una escuela de fe y amor, no sólo un sentimiento pasajero.
Este documento describe los diferentes tipos de sacrificios que se ofrecían en el antiguo Israel para la expiación de pecados. Explica que el pecador debía imponer sus manos sobre la víctima para transferir sus pecados a ella antes de que fuera sacrificada. También describe cómo la sangre de la víctima era usada para limpiar el pecado, ya sea rociándola en el altar o llevándola al lugar santo. Resalta que Jesús cargó con todos nuestros pecados en la cruz para proveer la expiación completa.
El documento resume la naturaleza y origen de la expiación en el Antiguo y Nuevo Testamento. Explica que la expiación fue ordenada por Dios desde el principio para remediar la caída del hombre, e instituyó sacrificios como medio de gracia temporal. Estos sacrificios prefiguraban el sacrificio definitivo de Cristo, el cual ofrece perdón total de pecados, liberación del poder y pena del pecado, y vida eterna victoriosa.
Este documento describe varios aspectos del sistema de sacrificios del Antiguo Testamento. Explica que la "ofrenda de purificación" se aplicaba a pecados no intencionales y deliberados. Detalla los rituales asociados con este sacrificio, incluida la imposición de manos, la muerte del animal, y la manipulación de la sangre. Explica que estos rituales simbolizaban la transferencia del pecado del pecador al animal, y luego al santuario, prefigurando la obra de Cristo de llevar nuestros pecados.
El documento resume la historia bíblica de los sacrificios desde Adán y Eva hasta Jesús, explicando que apuntaban a la muerte redentora de Cristo. Describe los tipos de sacrificios en el santuario y cómo la sangre representaba la vida dada por Dios para la remisión de pecados. Aunque los sacrificios ya no son necesarios, Dios desea nuestra entrega a través de la ayuda a otros, alabanza y consagración completa.
El documento describe el significado del santuario terrenal como una ilustración del santuario celestial y la obra de Cristo como sumo sacerdote. Explica que el ritual del santuario, incluyendo el día de la expiación, simbolizaba la obra de Cristo para purificar el santuario celestial de los pecados del pueblo. También insta a los creyentes a participar en esta obra mediante la fe, el arrepentimiento y la entrega total a Dios.
La Expiacion Ofrenda de Purificacion. marco valdez
El documento describe los procedimientos del sacrificio en el antiguo Israel para el perdón de pecados. Había tres tipos de pecado que requerían diferentes sacrificios. El pecador debía traer una víctima, imponer sus manos sobre ella para transferir la culpa, y luego matarla. El sacerdote usaba la sangre de la víctima para limpiar al pecador. Jesús cargó con todos los pecados a través de su sacrificio en la cruz para proveer perdón completo.
Leccion 05 d. la expiación ofrenda de purificaciónLUISE195
La ley ceremonial distinguía entre tres tipos de pecado: transgresión involuntaria, pecado deliberado y pecado de rebelión. El pecador arrepentido debía presentar una víctima en el santuario, como un becerro o palominos, para transferir su culpa a la víctima y ser perdonado. La sangre de la víctima era rociada en el altar o llevada al Lugar Santo dependiendo del tipo de pecador para transferir la culpa a Dios. Jesús cargó con nuestros pecados en la cruz como la ví
El documento describe cómo Jesucristo es llamado "Señor" en la Biblia. Los primeros cristianos confesaban a Jesús como Señor y entraron en conflicto con el Imperio Romano por negarse a reconocer al emperador como señor. Jesús es el único Señor verdadero y los cristianos son sus siervos y administradores fieles.
1) El documento trata sobre la identidad de Jesucristo y discute si era un hombre o Dios. 2) Presenta evidencia de fuentes históricas como Josefo y Tácito que confirman la existencia de Jesús como figura histórica. 3) Argumenta que Jesús afirmó ser Dios a través de sus palabras y acciones milagrosas, por lo que sólo puede ser Dios o un mentiroso o un lunático.
El Sanedrín, el consejo religioso judío presidido por el sumo sacerdote Caifás, condenó a Jesús a muerte por blasfemia. Como los judíos no tenían autoridad para imponer sentencias capitales, entregaron a Jesús a Poncio Pilato, el gobernador romano, acusándolo falsamente de sedición. Aunque Pilato reconoció la inocencia de Jesús, cedió a la presión de la multitud y lo condenó a crucifixión para satisfacerlos.
El documento habla sobre la importancia de comprender y vivir la fe en este año dedicado a ella. Explica que la fe es un don divino que implica la adhesión de la inteligencia, la confianza y la obediencia a la palabra de Dios revelada en la Biblia y enseñada por la Iglesia. También destaca que aunque se puede cultivar la fe con esfuerzo humano, en última instancia es un regalo de Dios que debemos agradecer.
¿Cuan importante es la muerte de Cristo?
¿Cual es el significado del Calvario?
¿Por qué se hizo hombre Dios?‘
¿Por qué murió Cristo?
¿Cual es el significado de la expiación, la sustitución, la satisfacción y la propiciación?
¿La muerte de Cristo fue un ministerio realizado para nuestro beneficio o en nuestra sustitución?
¿Cuales son los logros de la Cruz?
¿Que significa vivir bajo la Cruz?
El documento resume los ritos del Día de Expiación en el antiguo Santuario terrenal, describiendo las funciones del Sumo Sacerdote, los dos machos cabríos y el pueblo. El Sumo Sacerdote ofrecía sacrificios por sí mismo y los sacerdotes para estar limpios. Un macho cabrío era sacrificado para purificar el Santuario, y el otro cargaba los pecados del pueblo y era enviado al desierto. El pueblo debía afligir sus almas y abstenerse de trabajar. Esto prefiguraba la
El documento resume el sistema de sacrificios del Antiguo Testamento, señalando que apuntaba al sacrificio de Cristo. Explica los cinco tipos de sacrificios y sus propósitos respectivos, así como los animales utilizados y los procedimientos. Finalmente, destaca que estos rituales ayudaban a los israelitas a comprender que el pecado requería un precio, el cual solo podía pagarse a través de la muerte de Cristo.
El documento resume el significado y propósito de la expiación en el Antiguo Testamento, así como los detalles del Día de Expiación. La expiación involucraba el sacrificio de animales sin mancha para cubrir los pecados e impurezas, restaurando la relación del pecador con Dios. El Nuevo Testamento enseña que mientras las ofrendas del AT solo cubrían temporalmente los pecados, el sacrificio definitivo de Cristo en la cruz quitó los pecados de una vez por todas.
1) El documento describe los ritos y símbolos del Día de la Expiación según se describe en el Libro de Levítico, incluyendo los sacrificios de dos machos cabríos. 2) Explica que estos ritos y símbolos enseñan sobre la obra de expiación de Jesús desde su primera venida hasta su segunda venida. 3) Señala que al final Satanás será destruido junto con todo rastro de pecado.
El documento describe la expiación en el Antiguo y Nuevo Testamento. En el Antiguo Testamento, los sacrificios de animales fueron ordenados por Dios como una señal de la expiación perfecta que vendría en Cristo. Estos sacrificios prepararon al pueblo para entender la muerte de Cristo como la verdadera expiación por los pecados. En el Nuevo Testamento, la muerte de Cristo proporcionó el perdón de pecados, la liberación del pecado y la muerte, y la vida eterna.
Este documento discute la importancia de la cruz de Cristo para el cristianismo. Señala que aunque algunas denominaciones rechazan la cruz, es el símbolo central de la redención porque fue en la cruz donde Jesús murió para salvarnos de nuestros pecados. Refuta las afirmaciones de que Jesús murió en un palo vertical en lugar de una cruz, y resalta que la cruz representa el amor de Dios y nuestra obediencia a Él.
El documento resume las lecturas bíblicas para el Décimo Domingo del Tiempo Ordinario, que incluyen la ratificación de la Alianza entre Dios y su pueblo en el Antiguo Testamento y la institución de la Eucaristía por Jesús como la Nueva Alianza en el Nuevo Testamento. Se describe cómo Jesús tomó los elementos del pan y el vino durante la Última Cena y dijo que eran su cuerpo y su sangre, estableciendo así el sacramento central del cristianismo.
El documento resume tres conceptos bíblicos relacionados con la ofrenda de purificación. 1) La sangre de la ofrenda transfería la culpa del pecado al santuario terrenal. 2) La obra sacerdotal en el santuario terrenal prefiguraba la obra de Cristo de llevar sobre sí mismo la culpa de nuestros pecados. 3) Al igual que Dios se deleita en la misericordia, los que han experimentado su gracia imitarán su carácter amoroso y misericordioso.
El documento resume la crucifixión de Jesucristo. Describe cómo fue condenado a morir de la forma más vergonzosa a pesar de ser el único justo. Jesús murió para salvar a toda la humanidad de sus pecados. Aunque su sacrificio es el más significativo, a menudo se pierde el verdadero mensaje de amor y reconciliación con Dios. El documento también analiza las 7 actitudes hacia Jesús crucificado, como burlarse de él y hacer negocio con sus pertenencias.
Este documento presenta un Via Crucis escrito por el Cardenal Joseph Ratzinger, actual Papa Benedicto XVI. En la introducción, Ratzinger explica que el Via Crucis sigue el camino de Jesús como el grano de trigo que muere para dar mucho fruto, interpretando su vida, muerte y resurrección en la perspectiva de la Eucaristía. El Via Crucis conduce a una comunión profunda con Jesús y debe ser una escuela de fe y amor, no sólo un sentimiento pasajero.
Este documento describe los diferentes tipos de sacrificios que se ofrecían en el antiguo Israel para la expiación de pecados. Explica que el pecador debía imponer sus manos sobre la víctima para transferir sus pecados a ella antes de que fuera sacrificada. También describe cómo la sangre de la víctima era usada para limpiar el pecado, ya sea rociándola en el altar o llevándola al lugar santo. Resalta que Jesús cargó con todos nuestros pecados en la cruz para proveer la expiación completa.
El documento resume la naturaleza y origen de la expiación en el Antiguo y Nuevo Testamento. Explica que la expiación fue ordenada por Dios desde el principio para remediar la caída del hombre, e instituyó sacrificios como medio de gracia temporal. Estos sacrificios prefiguraban el sacrificio definitivo de Cristo, el cual ofrece perdón total de pecados, liberación del poder y pena del pecado, y vida eterna victoriosa.
Este documento describe varios aspectos del sistema de sacrificios del Antiguo Testamento. Explica que la "ofrenda de purificación" se aplicaba a pecados no intencionales y deliberados. Detalla los rituales asociados con este sacrificio, incluida la imposición de manos, la muerte del animal, y la manipulación de la sangre. Explica que estos rituales simbolizaban la transferencia del pecado del pecador al animal, y luego al santuario, prefigurando la obra de Cristo de llevar nuestros pecados.
El documento resume la historia bíblica de los sacrificios desde Adán y Eva hasta Jesús, explicando que apuntaban a la muerte redentora de Cristo. Describe los tipos de sacrificios en el santuario y cómo la sangre representaba la vida dada por Dios para la remisión de pecados. Aunque los sacrificios ya no son necesarios, Dios desea nuestra entrega a través de la ayuda a otros, alabanza y consagración completa.
El documento describe el significado del santuario terrenal como una ilustración del santuario celestial y la obra de Cristo como sumo sacerdote. Explica que el ritual del santuario, incluyendo el día de la expiación, simbolizaba la obra de Cristo para purificar el santuario celestial de los pecados del pueblo. También insta a los creyentes a participar en esta obra mediante la fe, el arrepentimiento y la entrega total a Dios.
La Expiacion Ofrenda de Purificacion. marco valdez
El documento describe los procedimientos del sacrificio en el antiguo Israel para el perdón de pecados. Había tres tipos de pecado que requerían diferentes sacrificios. El pecador debía traer una víctima, imponer sus manos sobre ella para transferir la culpa, y luego matarla. El sacerdote usaba la sangre de la víctima para limpiar al pecador. Jesús cargó con todos los pecados a través de su sacrificio en la cruz para proveer perdón completo.
Leccion 05 d. la expiación ofrenda de purificaciónLUISE195
La ley ceremonial distinguía entre tres tipos de pecado: transgresión involuntaria, pecado deliberado y pecado de rebelión. El pecador arrepentido debía presentar una víctima en el santuario, como un becerro o palominos, para transferir su culpa a la víctima y ser perdonado. La sangre de la víctima era rociada en el altar o llevada al Lugar Santo dependiendo del tipo de pecador para transferir la culpa a Dios. Jesús cargó con nuestros pecados en la cruz como la ví
El documento describe cómo Jesucristo es llamado "Señor" en la Biblia. Los primeros cristianos confesaban a Jesús como Señor y entraron en conflicto con el Imperio Romano por negarse a reconocer al emperador como señor. Jesús es el único Señor verdadero y los cristianos son sus siervos y administradores fieles.
1) El documento trata sobre la identidad de Jesucristo y discute si era un hombre o Dios. 2) Presenta evidencia de fuentes históricas como Josefo y Tácito que confirman la existencia de Jesús como figura histórica. 3) Argumenta que Jesús afirmó ser Dios a través de sus palabras y acciones milagrosas, por lo que sólo puede ser Dios o un mentiroso o un lunático.
El Sanedrín, el consejo religioso judío presidido por el sumo sacerdote Caifás, condenó a Jesús a muerte por blasfemia. Como los judíos no tenían autoridad para imponer sentencias capitales, entregaron a Jesús a Poncio Pilato, el gobernador romano, acusándolo falsamente de sedición. Aunque Pilato reconoció la inocencia de Jesús, cedió a la presión de la multitud y lo condenó a crucifixión para satisfacerlos.
El documento habla sobre la importancia de comprender y vivir la fe en este año dedicado a ella. Explica que la fe es un don divino que implica la adhesión de la inteligencia, la confianza y la obediencia a la palabra de Dios revelada en la Biblia y enseñada por la Iglesia. También destaca que aunque se puede cultivar la fe con esfuerzo humano, en última instancia es un regalo de Dios que debemos agradecer.
El documento describe el nacimiento de Jesús y el papel de María como su madre. Explica que María concibió a Jesús por obra del Espíritu Santo y lo dio a luz en Belén, aunque tuvo que hacerlo en un pesebre debido a la falta de espacio en posadas. También destaca que María es venerada como la Madre de Dios y que fue preservada sin pecado desde el momento de su concepción.
El documento describe la doctrina cristiana de la Encarnación, es decir, cómo el Hijo de Dios se hizo hombre al nacer de la Virgen María. Explica que Jesucristo es verdadero Dios y verdadero hombre, con dos naturalezas unidas en una sola persona. También describe los detalles de la Anunciación a María y por qué se cree que concibió a Jesús siendo virgen, por obra del Espíritu Santo.
1) Jesús fue crucificado por los romanos fuera de Jerusalén y sufrió intensamente tanto física como emocionalmente antes de morir. 2) A pesar del intenso sufrimiento, Jesús perdonó a sus verdugos y cuidó de su madre desde la cruz. 3) Finalmente murió después de varias horas de agonía, cumpliendo su misión de dar la vida por la salvación de la humanidad.
Este documento discute la creación del universo y de la humanidad por parte de Dios. Explica que Dios creó todo de la nada, incluyendo a los ángeles y al hombre y la mujer, dotándolos de dignidad. Si bien la Biblia ofrece una explicación religiosa más que científica de la creación en seis días, subraya que todo procede de Dios y tiene un propósito ordenado.
Este documento es un acto penitencial que utiliza diferentes tipos de guantes como metáfora para pedir perdón por diversos pecados y superficialidades. Se pide perdón por vivir en apariencias y no en profundidad con Dios, por no valorar el presente, por hacer daño a los demás, por la frialdad y egoísmo en las relaciones, por las prisas y falta de silencio, por falta de tacto y comprensión hacia los demás, por vivir más para agradar a los demás que a Dios, por dejarse llevar por
1) Jesús murió crucificado para redimir a la humanidad de sus pecados, según el plan y diseño de Dios revelado en las Escrituras.
2) Jesús descendió a los infiernos para anunciar su victoria sobre la muerte a quienes esperaban la redención.
3) Al tercer día, Jesús resucitó de entre los muertos con un cuerpo glorificado, confirmando su divinidad y dando esperanza a la humanidad de la vida eterna.
1) Jesús murió crucificado para redimir a la humanidad de sus pecados, cumpliendo el plan de Dios revelado en las Escrituras.
2) Jesús descendió a los infiernos para anunciar su victoria sobre la muerte a quienes esperaban la redención.
3) Al tercer día, Jesús resucitó de entre los muertos con un cuerpo glorificado, confirmando su divinidad y dando esperanza de vida eterna a los creyentes.
Jesucristo murió en la cruz para redimirnos de nuestros pecados. Como consecuencia del pecado original, los hombres nacemos esclavos del pecado, y solo Dios podía liberarnos mediante el rescate de su Hijo Jesucristo. Cristo aceptó libremente morir en la cruz por amor a Dios y a la humanidad, pagando así el precio de nuestra libertad y reconciliándonos con el Padre.
Jesucristo murió en la cruz para redimirnos de nuestros pecados. Al asumir voluntariamente el sufrimiento y la muerte, ofreció a Dios el Padre un sacrificio perfecto que tiene valor redentor, reparador, expiatorio y satisfactorio. Su muerte en la cruz y resurrección posibilitan que, a través de los sacramentos, cada persona pueda participar de los frutos de la redención.
1. La Semana Santa conmemora los misterios de la Pasión y Muerte de Jesús, así como su Resurrección, eventos fundamentales para la fe cristiana. 2. Los días de la Semana Santa recuerdan diferentes momentos como la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, la Última Cena, su crucifixión y muerte, y su resurrección al tercer día. 3. La Resurrección de Cristo es la base de la esperanza cristiana de vida eterna y la derrota del pecado y la muerte.
En 3 oraciones:
El documento resume las lecturas bíblicas de la primera semana de Cuaresma, incluyendo el pacto de Dios con Noé, Jesús siendo tentado en el desierto, y el juicio final donde Jesús se identifica con los pobres y necesitados y juzga a las personas basado en si mostraron misericordia hacia los demás. También discute la renovación de la alianza bautismal durante la Cuaresma y la necesidad de convertirse para ser fieles discípulos de Cristo.
Los Sufrimientos, La Muerte y El Retorno-59.pdfZafnat Panea
Este documento resume el capítulo 1 del libro "Los Sufrimientos, La Muerte y El Retorno Glorioso de JESUCRISTO" de Ellen G. White. Describe la agonía de Jesús en el Huerto de Getsemaní la noche antes de su crucifixión, donde oró a Dios para que pasara de él el sufrimiento que enfrentaría. A pesar de pedirles que velaran con él, los discípulos se durmieron, dejándolo solo en su agonía. Al despertarlos, Jesús les reprochó su falta de vigilia y
En 3 oraciones o menos:
El documento resume las lecturas bíblicas de la primera semana de Cuaresma. Habla sobre la alianza de Dios con Noé después del diluvio, Jesús siendo tentado en el desierto pero venciendo las tentaciones, y el juicio final donde Jesús se identifica con los pobres y necesitados y juzgará a los hombres basado en si practicaron obras de misericordia y amor al prójimo.
el poder que tiene la palabra de Dios para convertir y regenerar al ser humano, transformar vidas , al crear Dos el cielo y la tierra de la nada Dios también puede transformar tu vida."Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias". Mateo 8: 16, 17. Qué poder extraordinario tiene la Palabra de Dios!
Génesis, capítulo 1.
Por el poder de su palabra apareció la luz,
por el poder de su palabra fueron creados los animales,
las plantas y todo el mundo.
El documento resume una lección bíblica sobre el sacrificio único de Jesús. Explica que Jesús murió una sola vez para quitar los pecados de muchos, mientras que bajo la ley de Moisés se requerían múltiples sacrificios que no eran efectivos. También señala que Jesús volverá por segunda vez para salvar a los que le esperan, no para ser sacrificado de nuevo. Alienta a los creyentes a esperar el regreso de Jesús y a descansar en la obra completa de su sacrificio para encontrar paz con Dios
El misterio pascual....................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................................
El documento resume la doctrina cristiana de la salvación. Explica que 1) antes del pecado, Dios proveyó un medio de salvación a través de Cristo y su sacrificio sustitutivo, y 2) la muerte de Cristo en la cruz fue para expiar los pecados de la humanidad, como estaba profetizado en el Antiguo Testamento. Describe varias teorías erróneas sobre la muerte de Cristo y explica que su muerte fue vicaria, es decir, murió como sustituto para llevar los pecados de la humanidad.
Los sufrimientos, la muerte y el regreso glorioso de JesucristoZafnat Panea
Este libro describe los sufrimientos, muerte y regreso glorioso de Jesucristo. La sección 1 detalla la agonía de Cristo en el Jardín de Getsemaní, donde oró a Dios para que se alejara la "copa" de sufrimiento mientras sus discípulos dormían. El capítulo 1 describe la profunda tristeza de Cristo y su lucha al enfrentar la carga de los pecados de la humanidad y la ira de Dios, dejándolo solo a pesar de pedir a los discípulos que oraran con él
Juan el Bautista testifica que Jesús es el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo. El pecado del mundo incluye los pecados individuales y sociales, así como la pretensión de construir la sociedad sin Dios. Jesús, como Cordero de Dios, se ofrece a sí mismo para quitar el pecado mediante su inocencia, mansedumbre y misión de víctima en favor de la humanidad.
El documento habla sobre la Pasión y Muerte de Jesucristo. Explica que Cristo murió libremente para redimir a la humanidad de sus pecados mediante su sacrificio. Su Pasión satisfizo la justicia divina, mereció la gracia y nos reconcilió con Dios. También transformó el sentido del sufrimiento humano.
El documento resume la muerte y resurrección de Jesús, destacando cómo cumplió profecías del Antiguo Testamento de una manera precisa. Jesús murió como un pecador aunque era inocente, para salvar a la humanidad. Tres días después, resucitó de entre los muertos, demostrando que era el Hijo de Dios.
La lección trata sobre los resultados del pecado de Adán y Eva, la solución divina a través del sacrificio de Cristo, y la nueva creación que resulta de la redención. El pecado trajo juicio y muerte, pero Dios mostró su amor sacrificando a Cristo para reconciliar a la humanidad. A través de Cristo, las personas pueden recibir un nuevo corazón y vida, siendo creadas de nuevo para vivir en santidad.
Este documento presenta un resumen de cinco pasajes del profeta Isaías que describen aspectos de la vida y obra de Jesús. Estos pasajes, llamados "cantos", describen cómo Jesús traería justicia humildemente, sufriría rechazo y aceptaría tortura aunque era inocente, y finalmente sería glorificado tras su muerte y resurrección. El documento también analiza el significado de la muerte sustitutiva de Jesús y cómo su sangre inocente puede limpiarnos del pecado.
El documento describe una sesión de aprendizaje sobre Dios como Redentor. Incluye 3 secciones: 1) Datos informativos sobre la fecha y tema, 2) Aprendizaje esperado sobre Dios como Redentor y compartir el evangelio, y 3) Desarrollo de actividades que exploran pasajes bíblicos que revelan a Dios como Redentor a través de la promesa en el Edén, el sacrificio de Isaac, los evangelios y la cruz. El documento enfatiza que la muerte de Cristo en la cruz demuestra el gran amor
2. En la gruta de Belén
están la pobreza y el
abandono; en la huída a
Egipto, la nostalgia de
la patria; en la casa de
Nazaret, la escasez y el
trabajo; en la vida
pública, fatigas,
engaños,
contradicciones, odios;
al final, el camino de la
cruz y la muerte.
En toda la vida terrena de Jesucristo está
presente el dolor.
3. Aunque
Jesucristo padeció
mucho en su vida,
como víctima de
salvación, cuando
en el Credo se
dice que
“padeció”, se
refiere a todas las
penas que
Jesucristo sufrió
en su Pasión.
4. Toda la creación tiene un sentido de unión con Dios. Sin
embargo, el pecado alteró profundamente el orden de la
creación; el hombre dejó de ver el mundo como una obra
llena de bondad y puso su esperanza en las creaturas
poniendo como meta falsos fines terrenos.
El misterio del
sufrimiento se
encuadra en el
marco general del
proyecto de Dios
y de la venida de
Jesús al mundo.
5. Para ello, Jesús, verdadera
Cabeza del género humano,
asumió toda la realidad
humana degradada por el
pecado, la hizo suya, y la
ofreció filialmente al Padre.
De este modo Jesús
restituyó a cada relación y
situación humana su
verdadero sentido, en
dependencia a Dios Padre.
La venida de Jesucristo al mundo tiene como finalidad
reimplantar en el mundo el proyecto de Dios y
conducirlo eficazmente a su destino de unión con Él.
6. Dios tiene que castigar
el pecado, y si Dios nos
castigara de verdad a
nosotros por nuestros
pecados, todos
estaríamos condenados
al infierno para siempre.
Pero el Salvador, por
amor, estuvo dispuesto
a morir en nuestro
lugar, como nuestro
sustituto, para tomar
sobre sí mismo el
castigo que nosotros
merecíamos.
7. La finalidad propia
del misterio de la
Cruz es cancelar el
pecado del mundo,
algo completamente
necesario para que
se pueda realizar la
unión filial con Dios.
Esta unión es el
objetivo último del
plan de Dios.
8. El sacrificio de Jesús "por los pecados del
mundo entero" es la expresión de su comunión
de amor con el Padre. Este deseo de aceptar el
designio de amor redentor de su Padre anima
toda la vida de Jesús porque su Pasión redentora
es la razón de ser de su Encarnación.
Desde el
primer
instante de su
Encarnación
el Hijo acepta
el designio
divino de
salvación en
su misión
redentora:
9. San Marcos, en su relato de la pasión nos presenta a
Jesús como el justo que sufre sin culpa la persecución
de los hombres.
El es el Siervo de Yavé, tan desfigurado
que no parecía hombre, sin apariencia ni
presencia, despreciable y desecho de los
hombres, varón de dolores y sabedor de
dolencias, ante quien se vuelve el rostro.
Carga sobre sí nuestros sufrimientos y
dolores, azotado, herido de Dios y
humillado. Herido, ciertamente, por
nuestras rebeldías, molido por nuestras
culpas, soportando Él el castigo que nos
trae la paz, pues con sus cardenales
hemos sido nosotros curados. Él tomó el
pecado de muchos e intercedió por los
pecadores (Is 52,13-53,12).
23. Cristo padeció en la
cabeza la corona de
punzantes espinas; en las
manos y pies, el taladro de
los clavos; en la cara, las
bofetadas y salivazos; y en
todo el cuerpo, los azotes.
Algunos dicen que fueron
los mayores entre los
dolores de la vida
presente. Sobre todo unido
a lo interno.
Los padecimientos de Jesús en su Pasión
fueron grandes en todo su cuerpo.
24. La naturaleza humana se unió a la
persona divina, con todo sintió
tanto lo acerbo de su pasión como
si nunca se hubiese hecho tal
unión; porque en la única persona
de Jesucristo se conservaron las
propiedades de ambas
naturalezas, divina y humana, y
por eso lo que era pasible y
mortal, quedó mortal y pasible, y
lo que era inmortal e impasible,
como era la naturaleza divina,
quedó también inmortal e
impasible.
Mayores fueron los sufrimientos en su alma. El tomó
verdaderamente la naturaleza humana, y pudo decir en
verdad: "Triste está mi alma hasta la muerte".
25. Una causa del
sufrimiento de
Jesús era el verse
cargado con los
pecados de
todos, según
aquellas palabras
de Is 53,4:
Verdadera-mente
él soportó
nuestros dolores.
26. Otra causa de sufrimiento
era la capacidad de
percepción de Jesús
paciente, ya que su cuerpo
había sido formado
milagrosamente por obra
del Espíritu Santo y sus
sentidos debían ser más
vivos. Por esto en Él fue
exquisito el sentido del
tacto, de cuya percepción
se sigue el dolor. También
su alma, conforme a sus
facultades interiores,
percibió muy eficazmente
todas las causas de
tristeza.
27. Otra causa fue porque
Jesús aceptó aquella
pasión y aquellos
sufrimientos
voluntariamente, con
el fin de liberar del
pecado a los hombres.
Y, por ese motivo,
asumió tanta cantidad
de dolor cuanta fuese
proporcionada a la
grandeza del fruto que
de ahí iba a seguirse.
28. En el huerto de Getsemaní,
a pesar del horror que
suponía la muerte para la
humanidad absolutamente
santa de Aquél que es “el
autor de la vida” la voluntad
humana del Hijo de Dios se
adhiere a la voluntad del
Padre. Para salvarnos
acepta soportar nuestros
pecados en su cuerpo,
“haciéndose obediente
hasta la muerte” (Flp 2, 8).
Consideremos el sufrimiento interno de Jesús
en el huerto de Getsemaní.
29. Al acercarse al huerto de Getsemaní, Jesús comenzó a
sumirse en un extraño y agonizante silencio y en una
profunda tristeza que embargó todo su ser. Toda la vida
se había conducido en la presencia de Dios, pero ahora
le parecía estar excluido de la luz proveniente del Padre
y del Santo Espíritu.
Ahora se contaba
entre los
transgresores y
debía llevar sobre
sí la culpabilidad
de toda la
humanidad caída.
30. Fue a corta distancia de ellos y cayó postrado en el suelo.
Sentía que el pecado le estaba separando de su Padre. El
abismo era tan ancho, negro y profundo que su espíritu
se estremecía hasta lo sumo.
Al llegar al
huerto del
Getsemaní con
los discípulos,
Jesús les dijo:
"Quedaos aquí y
velad conmigo."
31. Sobre quien no conoció el pecado, debía ponerse la
iniquidad de todos nosotros. "Tan terrible le parece el
pecado, tan grande el peso de la culpabilidad que había
puesto sobre sus hombros, que estaba tentado a temer
que quedaría privado para siempre del amor de Dios.
Sintiendo cuán
terrible es la ira
de Dios contra
la transgresión,
exclamó "Mi
alma está muy
triste hasta la
muerte."
32. Lo vivido por Jesús
antes de ser tomado
como prisionero, lo
refieren como una
mezcla indecible de
tristeza, de espanto, de
tedio y de flaqueza. Esto
expresa una pena moral
que ha llegado al mayor
grado de su intensidad.
Los escritores sagrados describen la oración de
Getsemaní con enérgicas expresiones.
33. El estado de Cristo es
de una angustia
intensa. Él era Dios,
pero también era
hombre y como tal
padeció. Sus temores
y tristezas eran reales
y no una ficción. Él
necesitaba de sus
amados discípulos
pero todos le dejaron
solo. Todos se
durmieron mientras Él
oraba.
34. “ Y se le apareció un
ángel del cielo para
fortalecerle. Y estando
en agonía, oraba más
intensamente; y era su
sudor como grandes
gotas de sangre que
caían hasta la tierra” Lc
22: 43-44.
Es interesante notar que el único evangelista que
relata este hecho fue un médico, Lucas.
35. Fue tal el grado de sufrimiento moral, que
presentó como manifestación somática, física;
sudor de sangre (hematihidrosis o
hemohidrosis). “sudor de sangre, que le cubrió
todo el cuerpo y corrió en gruesas gotas hasta la
tierra”. (Lc 22, 43)
36. Como substituto y garante del hombre pecaminoso, Cristo
estaba sufriendo bajo la justicia divina. Veía lo que
significaba la justicia. Hasta entonces había obrado como
intercesor por otros; ahora anhelaba tener un intercesor
para sí. Quería el consuelo de sus amigos y no lo
encontró.
37. Satanás presentaba al Redentor la situación en
sus rasgos más duros: El pueblo te ha
rechazado. Uno de tus propios discípulos te
traicionará. Uno de tus más celosos seguidores
te negará. Todos te abandonarán.
Y venía la tentación:
¿qué se iba a ganar
por este sacrificio?
¡Cuán irremisibles
parecían la
culpabilidad y la
ingratitud de los
hombres!
38. Dios, en forma
humana, permitió
hacerse pecado para
salvarnos. En la cruz,
Él cargó con todos
los pecados del
mundo debido a su
amor. La única
manera de completar
su historia de amor es
amándole.
Esto traspasaba el alma de Jesús. El conflicto
era terrible.
39. Pero Jesús lo veía necesario, como les había dicho a los
apóstoles: Esto es lo que yo os dije estando con vosotros,
que era necesario que se cumpliera todo lo que estaba
escrito en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los
Salmos acerca de mí; y que estaba escrito que convenía
que Cristo padeciese y resucitase de entre los muertos.
Jesucristo no
padeció por
necesidad
absoluta, sino
porque quería
salvarnos.
40. Dios quiso salvar el mundo por el camino de la Cruz,
pero no porque ame el dolor o el sufrimiento, pues Dios
sólo ama el bien y hacer el bien. No quiso la Cruz con
una voluntad incondicionada, sino que la ha
querido sobre el presupuesto del pecado. Hay Cruz
porque existe el pecado. Pero también porque existe el
Amor.
La Cruz es fruto
del amor de Dios
ante el pecado
de los hombres.
41. Lo que cuenta no es
el dolor. ¿Cómo
podría Dios
complacerse en los
tormentos de una
criatura o de su
propio Hijo? Lo que
cuenta es la amplitud
del amor. Sólo el
amor da sentido al
dolor.
42. No bastara que viniese un ángel a satisfacer
por nosotros, porque la ofensa hecha a Dios por
el pecado era, en cierta manera, infinita, y para
satisfacer por ella se requería una persona que
tuviese un mérito infinito.
43. Era menester
que Jesucristo
fuese hombre
para que pudiese
padecer y morir,
y que fuese Dios
para que sus
padecimientos
fuesen de valor
infinito.
44. Jesucristo hubiera
podido librarse de
las manos de los
judíos y de Pilato,
mas se sujetó
voluntariamente a
padecer y morir para
salvarnos, por saber
que así lo quería su
eterno Padre.
Padeció libremente por amor.
45. No era
absolutamente
necesario que Jesús
padeciese tanto,
porque el menor de
sus padecimientos
hubiera sido
suficiente para
nuestra redención,
siendo cualquiera
acción suya de valor
infinito.
46. Quiso Jesús padecer tanto para satisfacer
más copiosamente a la divina justicia, para
mostrarnos más su amor
y para
inspirarnos
sumo horror
al pecado.
47. “Debo ser bautizado con un bautismo, el
bautismo de sangre, y qué angustia me embarga
hasta que sea cumplido”! Impacienta a Jesús el
ver llegar la hora en que podrá sumergirse en el
sufrimiento y sufrir la muerte para darnos la vida.
Por el
inmenso amor
de Jesús,
deseaba que
llegasen los
tormentos.
Les decía a
los apóstoles:
48. Pero cuando llega,
Cristo se entrega
con el mayor
ardor, aunque
conoce de
antemano todos
los sufrimientos
que esperan a su
cuerpo y a su
alma: He deseado
vivamente
comer esta Pascua
con vosotros,
antes de sufrir mi
pasión”.
49. Jesús llama a sus discípulos, los de entonces y los de
ahora, a tomar su cruz y seguirle (cf. Mt 16, 24), Jesús
quiere asociar a su sacrificio redentor a aquellos
mismos que son sus primeros beneficiarios.
50. Esta visión
bíblica de la
cruz supone
una revolución
en relación a
todas las
religiones no
cristianas.
En la religiosidad natural, la expiación significa el
restablecimiento de la relación con Dios, rota por la
culpa, mediante sacrificios y ofrendas de los hombres.
La obra expiatoria, con la que los hombres quieren
pagar a la divinidad y aplacarla, ocupa el centro de las
religiones.
51. El «derecho violado» se restablece por la iniciativa del
amor de Dios, que por su misericordia justifica al impío y
vivifica a los muertos. Su justicia es gracia, que hace
justos a los pecadores.
El Nuevo Testamento
nos ofrece una visión
completamente
distinta. No es el
hombre quien se
acerca a Dios y le
ofrece un don para
restablecer el
equilibrio roto. Es Dios
quien se acerca a los
hombres para
dispensarles un don.
52. Este es el misterio inaudito
de la cruz. La reconciliación
no parte de abajo hacia
arriba, sino de arriba hacia
abajo. No es la obra de
reconciliación que el hombre
ofrece al Dios airado, sino la
expresión del amor
entrañable de Dios que se
vacía de sí mismo para
salvar al hombre. Es su
acercamiento a nosotros.
La acción del hombre -el culto- es acción de gracias:
Eucaristía. Es, en vez de ofrenda de dones, aceptación
del don de Dios.
53. Si no fuese así, dirá J.
Ratzinger, los verdugos
serían los auténticos
sacerdotes; quienes
provocan los
sufrimientos serían
quienes habrían
ofrecido el sacrificio.
Pero no es ésta la
visión bíblica de la
cruz. Es Cristo, y no
sus verdugos, el
Sacerdote, que con su
amor unió los extremos
separados del mundo:
Dios y los hombres y
éstos entre sí (Ef 2,11-
22).
54. Dios no ha querido
librarnos de todas
las penalidades de
esta vida, para que
aceptándolas nos
identifiquemos con
Cristo, merezcamos
la vida eterna y
cooperemos en la
tarea de llevar a los
demás los frutos de
la Redención.
55. La enfermedad y el dolor,
ofrecidos a Dios en unión
con Cristo, alcanzan un
gran valor redentor, como
también la mortificación
corporal practicada con el
mismo espíritu con que
Cristo padeció libre y
voluntariamente en su
Pasión: por amor, para
redimirnos expiando por
nuestros pecados.
56. Pero Cristo, no
solamente nos
enseña a
soportar el
sufrimiento,sino
que, además,
nos ayuda a
soportarlo.
Podemos convertir el sufrimiento en algo de mucho
valor, uniendo nuestro sufrimiento a los sufrimientos
redentores de Jesucristo. Todos los Santos se han dado
cuenta de que su misión era sufrir en unión con
Jesucristo.
57. Antes de Cristo, el
hombre no sabía cómo
reconciliarse con
el sufrimiento.
Pero vino Cristo y
abrazó la cruz. La abrazó
voluntariamente,
amorosamente. Y este
amor con que aceptó el
sufrimiento y lo abrazó,
quitó al dolor la
maldición que estaba
incrustada en él, y lo
llenó de sentido.
58. Muchas veces se plantea la
gran cuestión y se oye la
terrible queja: "¿Por qué a
mí? ¿Por qué he de sufrir
precisamente yo? ¡Yo, que
siempre he servido con
fidelidad a Dios¡ Mientras
que al vecino, a ese
blasfemo, a ese frívolo y
licencioso todo le sale
bien..."
El sufrimiento puede ser la última tentativa de
Dios, el último recurso a que apela para salvar
nuestra alma. Es otra manifestación de su
misericordia.
59. De nada vale el sufrimiento por si mismo. Lo que
vale es la entrega amorosa que hacemos de él a
Dios. Es por eso que el sufrimiento es una gran
oportunidad y sería terrible el desperdiciarla.
El sufrimiento
es una
oportunidad
para unirnos
a Cristo y
cooperar en
la redención
del mundo.
60. Por eso, si el dolor
llama a nuestras
puertas, sepamos
aprovecharlo.
61. Cuando llame a tus puertas el dolor
y te invada la tristeza y la opresión,
Automático
69. Que María, quien sufrió al tener a
Jesús en sus brazos,
nos ayude a
saber ofrecer a
Dios nuestros
dolores y tener
paz aquí y gloria
en el cielo.
AMÉN