Este documento discute cómo Jesús enseñó a sus discípulos a no hacer cosas buenas, como la oración y el ayuno, por las razones equivocadas de buscar atención o aprobación de los demás. Explica que deben orar y ayunar en privado, enfocándose en Dios en lugar de en los demás. También analiza pasajes bíblicos sobre la oración y el ayuno, y reflexiona sobre mantener la pureza de motivaciones al servir a Dios.