Un grupo de niñas fueron a pedir dulces a una casa encantada en Halloween. Cuando entraron, cayeron en una trampa y quedaron encerradas en una jaula bajo tierra. Carmen logró abrir la cerradura con una pinza y escaparon, pero la bruja las persiguió. La policía escuchó los gritos de las niñas atrapadas y las rescató antes de que la bruja pudiera atraparlas de nuevo.