Este cuento narra la historia de tres animales, una rana, un gato y una paloma, que aprenden sobre el mundo que los rodea a través de sus familias. Aunque inicialmente cada uno cree que la luna solo tiene una forma, al observarla juntos durante varias noches se dan cuenta de que la luna tiene diferentes caras. El cuento enseña que a través de la observación y la conversación con otros, se puede aprender y ampliar el conocimiento sobre el mundo.