SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 11
Descargar para leer sin conexión
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalism
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




El objetivo principal del presente trabajo es resaltar el aporte de algunas de las
categorías fundamentales para la crítica de la sociedad capitalista y de las clases que las
constituyen. Dicha lectura se basa en el entrecruzamiento de tres textos fundamentales:
la “Introducción” y el “Prólogo” a la crítica de la economía política (1857 y 1859
respectivamente) y el libro I de “El Capital” (1867). Esta metodología de lo “abstracto a lo
concreto” desarrollada en la “Introducción” es una importante clave para entender la
estructuración del tomo I de “El Capital”. Esta última obra debe leerse teniendo como
telón de fondo algunas categorías abstractas necesarias para poder dar cuenta de lo
concreto, que es la formación económica social específicamente capitalista. Estos
elementos abstractos hay que entenderlos como elementos presentes en todas las
sociedades humanas, sean capitalistas o no, para transformarlos en categorías
concretas, es decir, propiamente capitalistas.




 I) Presentación.




En la presente ponencia desarrollaremos cuatro categorías extraídas de nuestra lectura de tres
textos de Marx: la “Introducción” de 1857 y el “Prólogo” de 1859 – ambos escritos en torno a la
“Contribución de la Crítica la Economía Política”–  así como el Libro I de “El Capital”. Los cuatro
conceptos a desarrollar son: i) el trabajo, ii) el mercado, iii) el modo de producción y iv) lo que
aquí denominaremos como la organización. Creemos que estos cuatro conceptos son 
cimientos fundamentales para una crítica a la sociedad capitalista y de las clases sociales que
la constituyen(1). Por último, la ponencia concluirá exponiendo las líneas de investigación que
el aporte de Marx permite para el estudio de las sociedades capitalistas en base a estas cuatro
nociones ya presentadas.




                                                                                              1 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




II) Cuestiones preliminares sobre lo abstracto y lo concreto.




De la “Introducción” de 1857 encontramos el método conocido como “de lo abstracto a lo
concreto”(2). Tales categorías están profundamente enraizadas a lo largo de la historia de la
filosofía. Con distintas connotaciones, desde Platón, Aristóteles hasta Hegel y Feuerbach, lo
abstracto y lo concreto son categorías fundamentales para la reflexión filosófica. Diremos aquí
únicamente que entenderemos por “abstraer” el acto de sacar algo de alguna cosa, separar
algo de algo, poner algo aparte. Por su parte, entenderemos por “concreto” a un agregado, algo
que se ha formado por coagulación o por condensación de partes, algo de compacto o
denso(3).




Pienso que así es como se deben entender ambas categorías en la “Introducción” (1857). El
método del materialismo histórico debe comenzar por asumir el caos social para analizarlo de
forma cada vez más precisa, alcanzando conceptos cada vez más sutiles y específicos(4).
Marx nos dice que no se trata de aislar categorías para analizarlas en sí mismas (la población,
el trabajo asalariado, el capital, el dinero, etc.), sino de tejer las complejas relaciones y
contradicciones que hay entre éstas para obtener una unidad compleja de elementos
interrelacionados. Por eso que aún nos falta por citar un segundo paso, el cual Marx denomina
el “viaje de retorno”(5). De este modo, lo concreto es la “síntesis de múltiples determinaciones”,
vale decir, una reconstrucción del pensamiento y no una simple representación abstracta. Dos
cosas queremos señalar aquí: primero, este desglose de los elementos abstractos hay que
entenderlo como un ejercicio de presentación de elementos  presentes en todas las sociedades
en general, sean capitalistas o no. Segundo, el método del viaje de retorno consiste en dar
cuenta de las relaciones específicas entre estos elementos para dar con la concreta formación
económico social capitalista.
 




III) Los dos primeros elementos: Trabajo y Mercado en el sistema capitalista.




Comencemos por el “trabajo” señalando que se trata de un tipo de actividad, una forma de
relación entre hombre y naturaleza que tiene por finalidad proveer satisfacción a las
necesidades. En “El Capital”, comenzando el Capítulo V, Marx comienza desarrollando la idea
de la actividad del trabajo en tanto relación hombre-naturaleza(6). Este “trabajo en general” no
es exclusivo del capitalismo, sino que ha estado presente de diversas maneras a lo largo de la
historia. Por ello mismo, esta determinación abstracta del trabajo no es suficiente para dar



                                                                                             2 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




cuenta de la producción y creación de riqueza en el capitalismo. A esto hay que agregar que la
actividad del trabajo permite explicar la creación de la riqueza. El trabajo como fuente de
creación de riqueza o de valorización se basa en la acumulación de valores necesarios para los
procesos de producción. En efecto, ya los economistas burgueses anteriores a Marx habían
destacado el hecho de que el precio de un determinado producto está dado por el valor
acumulado o, para ser más exactos a la terminología de Marx, por el trabajo acumulado(7).




Una vez dicho estas cuestiones generales del trabajo, revisemos ahora el segundo concepto
abstracto: el “mercado”. En “El Capital” Marx enseña que la circulación de mercancías es el
punto de arranque, es decir, pone al mercado como un supuesto histórico necesario para la
sociedad capitalista(8). Por lo mismo, el mercado está presente en cualquier forma
económico-social como contexto necesario para el intercambio. Por ello mismo, al igual que
sucedía con el “trabajo”, el “mercado” tomado abstractamente es insuficiente para el análisis
específico del capitalismo. Todas las sociedades más o menos desarrolladas han dado forma a
sus propios mercados, esto es, han intercambiado mercancías. Por ello mismo, y también por
motivos de espacio, no desarrollaremos aquí una explicación ni del doble carácter de la
mercancía (uso y valor), ni de los dos ciclos de circulación de mercancías (M – D – M y D – M –
D)(9).




En efecto, nos interesa otra cosa: establecer la relación entre trabajo y mercado en el
capitalismo. Tomados aisladamente, abstractamente, estos concretos no nos dicen nada de lo
específico del capitalismo. En cambio, al relacionarlos entre sí comenzamos a entender
algunas cuestiones fundamentales. Principalmente, que el capitalismo lleva a la particularidad
del trabajo asalariado, esto es, un trabajo que se compra y vende en el mercado por medio de
un salario. Lo propio del mercado capitalista es que en él se vende y se compra una mercancía
especial, única en tanto creadora de la riqueza, a saber, la mercancía fuerza de trabajo.
Podríamos decir que lo que podemos denominar como “mercado de trabajo” es algo propio del
capitalismo, cuestión que no se veía en sociedades precapitalistas(10). Como vemos, sólo en
la relación entre estos dos elementos abstractos (trabajo en general y mercado) podemos
encontrar un aspecto concreto del capitalismo. En éste, el trabajo en general deviene en fuerza
de trabajo que se puede comprar y vender en el mercado. La fuerza de trabajo se vuelve así
una mercancía sutil y casi imperceptible, pero tremendamente fundamental en cuanto
productora de riqueza.




En relación con la plusvalía capitalista, podemos decir que la explicación de la plusvalía se
comienza a obtener, en primera instancia, a partir de la relación entre mercado y fuerza de
trabajo. Ahora bien, esta relación entre mercado y fuerza de trabajo se establece como un



                                                                                                3 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




“corte” en la exposición del argumento desarrollado en El Capital (transición que va del
Capítulo III al V). En efecto, en un momento de la exposición, Marx nos presenta un problema
adicional: no puede haber ganancia (plusvalía) por el simple motivo de la equivalencia. Es
decir, el modelo puro de la circulación de mercancías a través del equivalente del dinero simple
y llanamente no explica la aparición de la plusvalía(11). Así, Marx desecha de plano las
explicaciones vulgares que dan cuenta de la plusvalía como el resultado de comprar barato o
vender más caro(12). Aquí es donde aparecen elementos que no son estrictamente de
mercado en su sentido puro, abstracto, lo que obliga a Marx a dejar la exposición de las
mercancías y del mercado (capítulos I, II y III de El Capital).




Por ello, la vinculación entre fuerza de trabajo y mercado aún no es suficiente, debiendo
relacionar esto con otros elementos. Esto porque, insistimos, la plusvalía brota, al menos en
parte, de algo que está por fuera de la circulación. Aquí, la explicación de Marx está en el
límite; al mismo tiempo dentro y fuera de la circulación(13).




IV) Tercer concepto abstracto: modo de producción.




Los tres primeros capítulos de “El Capital” tienen sentido únicamente como preámbulo para
llegar a la mercancía especial, aquella mercancía que es diferente al resto. Se trata de la
mercancía “fuerza de trabajo”. Insistimos, por tanto, que los primeros tres capítulos de “El
Capital” sirven para Marx nos demuestre que no es ni el dinero, ni la reventa de la mercancía,
lo que hace brotar la plusvalía(14). Es más, podemos decir incluso que la plusvalía comienza a
explicarse no a partir de la compra y venta de la fuerza de trabajo, sino del uso del trabajo
mismo, esto es, de la puesta en acción de la mercancía ya comprada en el mercado e
internada en el seno del proceso de producción. La fuerza de trabajo es aquella mercancía que
–ya no dentro de la órbita de la circulación del mercado, sino de la producción misma – es
usada, es decir, es consumida en su “valor de uso” en tanto aplicación de cerebro y músculos,
“condiciones físicas y espirituales” que se dan en el cuerpo y subjetividad del trabajador. En
otras palabras, el uso de la mercancía trabajo implica que ya no es un mero trabajo en general,
sino fuerza de trabajo, siendo esto lo que produce la plusvalía.




Hasta aquí vimos cómo se entrelazan dos conceptos claves: mercado y trabajo. Pero dicho
entrelazamiento de ambos conceptos remite a un contexto social que se explica con un tercer
elemento abstracto: el “modo de producción”. Éste implica la manera en que se producen,



                                                                                           4 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




intercambian, distribuyen y consumen los bienes socialmente necesarios para la reproducción
de una determinada formación histórico-social(15). Es decir, el modo de producción incluye al
mercado y al trabajo, pero también elementos que van más allá de estos. En términos
generales, el modo de producción se constituye por la articulación de las “fuerzas productivas”
con las “relaciones sociales de producción”, lo que significa que la forma en que estén
desarrolladas las primeras será determinante para la forma como se estructuren las
segundas(16). Pero, además, la categoría abstracta del modo de producción reconoce que la
propiedad de los medios de producción se convierte en el pivote del poder y del principio de la
división social del trabajo y las consiguientes relaciones sociales de producción. Este concepto
remite al hecho de que toda forma económico-social se constituye sobre la base de sus
relaciones con los medios de producción, relaciones sociales antagónicas. En el capitalismo, el
conjunto de estas relaciones de producción determinadas por la propiedad (o carencia de
propiedad) de los medios de producción no sólo establecen una división social del trabajo, sino
que, además, todo un edificio jurídico e ideológico que variará según la correlación de fuerzas
específicas en las sociedades concretas. El modo de producción se define entonces como una
división del trabajo que define las condiciones del gasto y del consumo de la fuerza de trabajo,
la naturaleza y el destino de los valores de uso producidos, así como también implica
determinaciones jurídicas, políticas, ideológicas.




V) Cuarto elemento: la organización.




Nos falta por explicitar un cuarto concepto abstracto: el de la “organización”. Para ello,
comencemos explicando los términos de “trabajo necesario” y de la “jornada de trabajo”.




Todas las mercancías poseen valor. La fuerza de trabajo, en tanto es una mercancía, también
posee valor. El valor de una mercancía está determinado por el tiempo de trabajo necesario
para su producción. En el caso de la fuerza de trabajo, su valor está determinado por los
medios de vida necesarios para asegurar la subsistencia del obrero y los suyos. Este concepto
es el que todos conocemos como “trabajo necesario”. Aquí llegamos a un punto crucial: sólo es
productiva la fuerza de trabajo que crea un valor mayor que excede el suyo propio o, en otros
términos, sólo es productiva la fuerza de trabajo que produce un valor más allá del “trabajo
necesario”. En efecto, dentro de la “jornada de trabajo” –que viene a darse una vez que la
fuerza de trabajo ya fue comprada por el capitalista y puesta en el proceso de producción – 
Marx diferencia dos elementos: i) tiempo socialmente necesario recién definido y ii) el tiempo
excedente en que, una vez que el obrero produce lo suyo (trabajo necesario), trabaja un
excedente, un plustrabajo que lleva a un plusvalor(17). La plusvalía o plusvalor aparece cuando
se aminora el tiempo necesario para la vida del obrero y, por tanto, se acrecienta el trabajo



                                                                                             5 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




excedente. Es decir, sólo cuando el obrero produce más allá de lo que él mismo costó (su
salario) y lo que costaron los medios de producción, podemos hablar de un trabajo productivo
o, lo que es lo mismo, fuerza de trabajo que produce plusvalía, que valoriza las mercancías.




Es así como para obtener plusvalía el burgués debe invertir capital, el cual se divide en dos
tipos: i) capital constante o inversión en medios de producción; ii) capital variable o inversión en
fuerza de trabajo. La parte constante del capital consistente en lo invertido en medios de
producción no agrega valor nuevo más que el suyo propio. En cambio, la parte de capital
invertida en salarios sí agrega valor. Por ello su nombre de capital variable, justamente porque
se sostiene sobre la fuerza de trabajo, fuerza que, como ya dijimos, agrega más valor de  lo
que ella misma vale, es decir, de lo invertido en salario.




Precisamente, la transformación del capital en plusvalía sigue estas mismas líneas ya
expuestas. Con ello, Marx distingue dos conceptos esenciales: i) plusvalía absoluta y ii)
plusvalía relativa. Ambas son formas de ganancia capitalista, pero, más allá de eso, son
métodos de administración de la fuerza de trabajo que posee la burguesía para aumentar el
grado de explotación e incremento del plustrabajo. Mientras la “plusvalía absoluta” consiste en
aumentar la masa de plusvalía mediante el alargamiento de la jornada de trabajo, la “plusvalía
relativa” consiste en aumentar la masa de plusvalía disminuyendo el valor de la fuerza de
trabajo a partir de aumentar las fuerzas productivas. Cuando la fuerza productiva del trabajo
aumenta y la jornada laboral se mantiene constante, el tiempo en que el obrero trabaja para
reproducir su fuerza de trabajo se reduce y la masa de plustrabajo aumenta. Podríamos decir
que la “plusvalía absoluta” es el método de explotación más básico, alcanzando su máxima
difusión en los estadios iniciales del capitalismo basado en el trabajo manual. Por el contrario,
podríamos decir que la “plusvalía relativa” es mucho más “racional” (en términos de la
racionalidad instrumental) y surge cuando apareció y se desarrolló la gran industria
maquinizada y la administración del trabajo, momento en que resultó posible aumentar la
productividad del trabajo. La racionalización y eficiencia de la productividad disminuyó el tiempo
socialmente necesario y aumentó el plustrabajo.




En distintos capítulos hacia el final de “El Capital”, Marx demuestra tres métodos de plusvalía
relativa con los cuales el capitalismo profundiza el proceso de racionalización de la explotación
de la fuerza de trabajo. Estos métodos son: 1) la cooperación o multiplicación de la
productividad mediante una colaboración simultánea de muchos hombres con arreglo a un
plan(18). 2) la división del trabajo, tal y como hasta 1770 se desarrolló en el período
manufacturero. 3) La maquinaria, con la ayuda de la cual la gran industria se viene
desenvolviendo.



                                                                                               6 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




Todo lo que hasta aquí hemos desarrollado y que remite a la profundización de los distintos
métodos de plusvalía relativa dan cuenta de nuestra cuarta categoría abstracta: la de la
“organización”. Se trata de la organización del trabajo de terceros que eleva la intensidad y
productividad del trabajo. Esto trae importantes consecuencias que revisamos a continuación
en nuestras conclusiones.




VI) Conclusión: Elementos fundamentales a la hora de pensar la estructura de clases.




Primero: El capitalismo es la formación económico-social donde la desigual distribución de los
medios de producción implica un mecanismo de explotación basado en el mercado como
espacio de compra y venta de la mercancía fuerza de trabajo. Ante la pregunta ¿qué es lo
específico del mercado capitalista?, la respuesta es la compra y venta no del trabajo en
general, sino de la fuerza de trabajo. En el mercado capitalista no ganan todos, sino sólo el que
compra la fuerza de trabajo (el capitalista), no el que la vende (el obrero). Por ello, podemos
decir que en el modo de producción capitalista el “trabajo” no es una relación de explotación del
hombre hacia la naturaleza (“trabajo en general”), sino que del hombre hacia el hombre mismo,
esto es, del capitalista hacia la fuerza del trabajo vendida por el obrero en el mercado.




Segundo: Sin embargo, el mercado es la condición previa para la explotación, toda vez que la
producción de plusvalía se da explotando la fuerza de trabajo en el seno de la producción.
Ahora bien, para que se dé la compra y venta de la fuerza de trabajo deben darse dos
condiciones fundamentales: i) la igualdad en el plano jurídico de quien vende y quien compra
(obreros y capitalistas negocian como seres iguales y libres); ii) el poseedor de la fuerza de
trabajo no debe tener otra mercancía más que ofrecer que su fuerza de trabajo(19). Esto último
no es otra cosa que la naturalización de la desigualdad social dada por el aparato jurídico e
ideológico que permiten la legitimación del antagonismo de la estructura de clases.
Otro punto importante es que la explotación capitalista es un concepto relacional, es decir, se
da en el seno de las relaciones sociales de producción(20). Las relaciones sociales entre
clases en el capitalismo no se puede entender sin razonar dialécticamente: los burgueses son
burgueses sólo porque existen proletarios y viceversa(21). Repetimos: estas relaciones en el
seno de la producción no son “naturales”, sino que antagónicas, cargadas de conflicto, unas
veces invisibilizado y otras de forma explícita.




                                                                                            7 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




Tercero: La categoría de la organización es la de más difícil identificación. De hecho, es una
categoría que Marx nunca desarrolló explícitamente, aunque pueden encontrarse ciertas
“pinceladas” a lo largo de toda su obra. Desde el comienzo de El Capital, Marx nos habla de un
capitalista dividido en dos: un “propietario” y un “organizador”(22). La plusvalía relativa implica
una forma específica de control no sólo de los medios físicos, sino también de lo que E. O.
Wright denominó como “bienes de organización”, teniendo como principal función la de la
producción de valores de uso en tiempos de “trabajo excedente”. Así, la dominación y
explotación capitalista se basa en dos tipos de coacciones (a veces unidas y otras separadas):
i) propiedad de medios de producción (físicos) y ii) control u organización de la producción a
través de medios de organización (medios intangibles, tales como la cualificación o la jerarquía
de organización). Pero esto también da pié para profundizar en el estatus de clase de las
llamadas “nuevas clases medias” quienes sin ser propietarias de los medios de producción
pueden llegar a administrar la explotación(23). Son estas nuevas pautas las que deberán ser
analizadas desde este nuevo flanco que abre la categoría de la organización en tanto
posiciones, dentro de la estructura de clases, cuyo papel en el proceso de producción es el de
gestionar la explotación capitalista.




Por último, permítasenos decir que la organización es un elemento abstracto y no exclusivo del
capitalismo, puesto que en los regímenes socialistas de organización planificada la producción
no está en manos privadas, sino que organizada centralizadamente(24).




NOTAS




1. Es imprescindible señalar nuestra deuda respecto del texto de Jaques Bidet, traducido al
español por María Emilia Tijoux. Véase Bidet, Jaques (2007): Refundación del marxismo.
Explicación y reconstrucción de El Capital, Lom, Santiago de Chile.
2. Véase por ejemplo el texto recién citado de Jaques Bidet. Entre otros, ver también Kohan,
Néstor (1992): “El método dialéctico de lo abstracto a lo concreto. Una aproximación.”, en
Dialéktica, Revista de filosofía y teoría social, año I, número 2, Buenos Aires, Argentina,
pp.45-52. Véase también “Itinerario de la Contribución a la Crítica de la Economía Política de
Karl Marx”, Apuntes del Seminario Permanente Hegel-Marx, Facultad de Filosofía Universidad
de Chile.
http://seminariopermanentehegelmarx.weebly.com/uploads/2/7/3/9/2739972/jornadas_iv_coloq
uio_interdisciplinario_de_estudiantes.pdf



                                                                                              8 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




3. Diccionario Crítico de Ciencias Sociales. Terminología Científico-Social, Román Reyes (dir.),
Plaza y Valdés, Madrid-México 2009. 
http://www.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/A/abstracto-concreto.htm
4. “Parece justo comenzar por lo real y lo concreto, por el supuesto efectivo; así, por ej., en la
economía, por la población que es la base y el sujeto del acto social de la producción en su
conjunto. Sin embargo, si se examina con mayor atención, esto se revela [como] falso. La
población es una abstracción si se deja de lado, por ej., el trabajo asalariado, el capital, etc.
Estos últimos suponen el cambio, la división del trabajo, los precios, etc. El capital, por ej., no
es nada sin trabajo asalariado, sin valor, dinero, precios, etc. Si comenzara, pues, por la
población, tendría una representación caótica del conjunto y, precisando cada vez más, llegaría
analíticamente a conceptos cada vez más simples”. Marx, K. (1971a), Introducción general a la
crítica de la economía política. 1857, Cuadernos del Pasado y Presente, Buenos Aires,
Argentina, Pág. 21.
5. “Llegando a este punto, habría que reemprender el viaje de retorno, hasta dar de nuevo con
la población, pero esta vez no tendría una representación caótica de un conjunto, sino una rica
totalidad con múltiples determinaciones y relaciones”. IBÍD.
6. En “El Capital”, Marx escribe: “El trabajo es, en primer término, un proceso entre la
naturaleza y el hombre, proceso que éste realiza, regula y controla mediante su propia acción
su intercambio de materias con la naturaleza”. Marx, K. (2001): El Capital, Tomo I, FCE,
México, Pág. 130.
7. En la “Introducción” (1857), Marx le asigna este gran descubrimiento a Adam Smith.
8. “La producción de mercancías y su circulación desarrollada, o sea, el comercio, forman las
premisas históricas en que surge el capital.”  Marx, 2001: 103.
9. El ciclo D – M – D es el propio del capitalista, pero su explicación no es útil para los
propósitos que tenemos en esta ponencia. Tal  y como lo veremos, queremos salirnos del
ámbito del mercado para llegar al de la producción que explica, entre otras cosas, a este ciclo
(D – M – D, donde este último es D’, vale decir, dinero más un incremento).
10. En sociedades precapitalistas es impensado hablar de mercado de fuerza de trabajo. esto
debido a que en estas sociedades la explotación se basa en desigualdades generadas por la
propiedad de bienes en forma de fuerza de trabajo (por Ej., en el feudalismo). Por el contrario,
en el capitalismo, la explotación se basa en la propiedad de medios de producción que
permiten la explotación de la fuerza de trabajo. Precisamente, las revoluciones burguesas (y su
expresión ideológica: las “libertades burguesas”) redistribuyeron los bienes productivos
asociados a las personas haciendo de la modernidad el momento histórico donde cada uno, al
menos, se posee a sí mismo, cuestión que precisamente no ocurría en las épocas
precapitalistas, donde el cuerpo del siervo y del esclavo (y, por ende, su fuerza de trabajo) le
pertenecían al señor.
11. “En su forma pura, el cambio de mercancías es siempre un cambio de equivalentes y, por
tanto, no da pie para lucrarse obteniendo más valor”.  ÍBID: 113.
12. En otro pasaje de El Capital, Marx escribe: “En su forma pura, el proceso de circulación de
mercancías presupone el intercambio de equivalentes. Sin embargo, en la realidad las cosas
no se presentan en toda su pureza. Partamos pues del intercambio de no equivalentes.” ÍBID.:
115. El capitalista no es sólo un vendedor de mercancías, sino que es también un comprador,
por tanto, si los capitalistas venden caro sus productos estos precios se reflejan a la hora de
suministrarse –por la vía de otro capitalista- los medios de producción (maquinarias, materias
primas). Por tanto, no hay ganancia, sino sólo compensación de precios; lo que gana



                                                                                              9 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




vendiendo caro se compensa en el momento de ir a comprar medios de producción a otro
capitalista, el cual, desde este modelo, le vende caro. “La creación de la plusvalía  y, por tanto,
la transformación del dinero en capital, no puede, como se ve, tener su explicación en el hecho
de que el vendedor venda las mercancías por más de lo que valen o el comprador las adquiera
por menos de su valor” ÍBID.: 116.
13. “Como se ve, el capital no puede brotar de la circulación, ni puede brotar tampoco fuera de
la circulación. Tiene necesariamente que brotar en ella y fuera de ella, al mismo tiempo” ÍBID.:
120.
14. El dinero como medio de compra y pago sólo realiza el precio de mercancía que se compra
o se paga, manteniéndose inalterable como medio equivalente, sin aumentar la magnitud del
valor. Tampoco es la reventa de la mercancía, pues ello sólo convierte nuevamente la
mercancía en dinero equivalente, sin aumentar valor.
15. En otra de sus célebres obras, nos referimos al Prólogo de la “Contribución a la crítica de la
economía política”, Marx escribió un conocido pasaje: “En la producción social de su existencia,
los hombres contraen determinadas relaciones necesarias e independientes de su voluntad,
relaciones de producción que corresponden a una determinada fase de desarrollo de sus
fuerzas productivas materiales. El conjunto de estas relaciones de producción forma la
estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se eleva un edificio jurídico y
político y a la que corresponden determinadas formas de conciencia social. El modo de
producción de la vida material determina el proceso de la vida social, política y espiritual en
general”. Marx, K. (1971b): “Prólogo a contribución a la crítica de la economía política”, en
Introducción general a la crítica de la economía política, Ob.cit., Pág. 35. (Cursivas mías O.B.).
16. Las fuerzas productivas son los medios de producción, elementos de origen natural, tales
como la tierra, aire, agua, bosques, etc. así como las herramientas o instrumentos construidos
por el hombre. A ello debemos incluir también todos los procedimientos laborales, el
agrupamiento de los obreros en fábricas o talleres y luego en complejos industriales, la división
del trabajo y su racionalización, entre otros. De esta manera, la ciencia interviene en la
formación de las fuerzas productivas. Esto será de mucha importancia más adelante en nuestra
explicación.
17. “Una de las dos partes que la integran [a la jornada de trabajo] se halla condicionada por el
tiempo de trabajo requerido para la reproducción continua del propio obrero, pero su duración
total cambia al cambiar la longitud o duración del trabajo excedente”. ÍBID: 178. Ahora bien, es
importante decir que, en tanto suma de trabajo necesario y trabajo excedente, la jornada
laboral no es algo que pueda determinarse a priori, sino a partir de elementos externos o,
simple y llanamente, sociopolíticos. “Por eso, en la historia de la producción capitalista, la
reglamentación de la jornada de trabajo se nos revela como una lucha que se libra en torno a
los límites de la jornada; lucha ventilada entre el capitalista universal,  o sea, la clase
capitalista, de un lado, y de otro el obrero universal, o sea, la clase obrera”.  ÍBID.: 180.
18. El fordismo o taylorismo y, posteriormente, los métodos postfordistas, incluyendo los más
recientes, recaen en esta categoría de management capitalista.
19. Por esto mismo, el poseedor del dinero (el capitalista) va a mercado a encontrarse con el
“obrero libre”: “(…) libre en un doble sentido, pues de una parte ha de poder disponer
libremente de su fuerza de trabajo como de su propia mercancía, y, de otra parte, no ha de
tener otras mercancías que ofrecer en venta, ha de hallarse, pues, suelto, escotero y libre de
todos los objetos necesarios para realizar por cuenta propia su fuerza de trabajo” ÍBID.: 122.
20. Véase Wright, Erik O. (1994): Clases, Siglo XXI, Madrid.



                                                                                             10 / 11
De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo
Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30




21. Esto nos aleja de perspectivas que analizan a la sociedad en cuanto "segmentos” o
“estratos”. Por ejemplo, los sectores ABC1, C2, C3, D, y E, son grupos que dan cuenta de
distintos niveles de consumo. No son clases sociales, pues no son definibles en términos de
sus relaciones entre clases. Toda clase social es un grupo social que se relaciona con otro.
Esto equivale a decir que una clase es un grupo que puede ser definido en función de sus
relaciones con otras clases. Tal y como señala E. O. Wright, las clases no son grupos
“gradacionales”. Este último es un principio distributivo: hay grupos con distintos “grados” de
ingresos, niveles educativos, capacidades de consumo, etc., conformándose grupos que no
necesariamente establecen relaciones sociales de explotación entre sí, sino más bien los
grupos se distinguen por el grado cuantitativo de algún atributo (ingresos, estatus, educación,
etc.).
22. Bidet, Ob.cit.
23. A éstas se les suele caracterizar hoy por su estatus, su nivel de consumo, sus ingresos, sus
calificaciones, etc. Pero, en cambio, al hablar de “organización”, incluimos a las clases medias
dentro de las relaciones sociales de producción, por tanto, de la explotación capitalista.
24. Wright, Ob.cit.




Profesor en la Universidad ARCIS Santiago. Sociólogo por la Universidad Arcis. ©
Magíster en Ciencias Sociales, mención Sociología de la Modernización, Universidad de
Chile.




    <!--[endif]-->




                                                                                          11 / 11

Más contenido relacionado

Destacado (8)

Marx
MarxMarx
Marx
 
Lenin - Tres Fuentes y Tres Partes del Marxismo
Lenin - Tres Fuentes y Tres Partes del MarxismoLenin - Tres Fuentes y Tres Partes del Marxismo
Lenin - Tres Fuentes y Tres Partes del Marxismo
 
Marxismo
MarxismoMarxismo
Marxismo
 
Karl marx power point
Karl marx power pointKarl marx power point
Karl marx power point
 
Exposicion modos de produccion
Exposicion modos de produccionExposicion modos de produccion
Exposicion modos de produccion
 
Modos de produccion
Modos de produccionModos de produccion
Modos de produccion
 
Karl Marx y el marxismo
Karl Marx y el marxismoKarl Marx y el marxismo
Karl Marx y el marxismo
 
Karl marx diapositivas
Karl marx diapositivasKarl marx diapositivas
Karl marx diapositivas
 

Similar a De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo y las clases sociales (Portal Pluma y Pincel www.plumaypincel.cl)

Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorTransformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorRafael Verde)
 
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorTransformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorRafael Verde)
 
El capital comentario wiki
El capital comentario wikiEl capital comentario wiki
El capital comentario wikiJulio Paz
 
El trabajo en la era de la globalización
El trabajo en la era de la globalizaciónEl trabajo en la era de la globalización
El trabajo en la era de la globalizaciónPatricio Fuentes
 
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concretoJaimitoB
 
Monografía Economistas (Marx - Smith)
Monografía Economistas (Marx - Smith)Monografía Economistas (Marx - Smith)
Monografía Economistas (Marx - Smith)María Eugenia Zampi
 
Karl marx contribucion a la critica de la economia politica
Karl marx   contribucion a la critica de la economia politicaKarl marx   contribucion a la critica de la economia politica
Karl marx contribucion a la critica de la economia politicaMaría Ibáñez
 
01 entrar en_la_lectura_de_el_capital
01 entrar en_la_lectura_de_el_capital01 entrar en_la_lectura_de_el_capital
01 entrar en_la_lectura_de_el_capitalLuisPerez2014
 
Precursores de la sociología
Precursores de la sociologíaPrecursores de la sociología
Precursores de la sociologíaBraw Antonio
 
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdf
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdfMarx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdf
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdfSofisjuarez545gmailc
 
Lenin y el Marxismo.pdf
Lenin y el Marxismo.pdfLenin y el Marxismo.pdf
Lenin y el Marxismo.pdfssuser8db174
 

Similar a De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo y las clases sociales (Portal Pluma y Pincel www.plumaypincel.cl) (20)

Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorTransformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
 
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valorTransformación de la mercancia en dinero teoría del valor
Transformación de la mercancia en dinero teoría del valor
 
El capital comentario wiki
El capital comentario wikiEl capital comentario wiki
El capital comentario wiki
 
Teoría del valor
Teoría del valorTeoría del valor
Teoría del valor
 
Teoría del valor
Teoría del valorTeoría del valor
Teoría del valor
 
El trabajo en la era de la globalización
El trabajo en la era de la globalizaciónEl trabajo en la era de la globalización
El trabajo en la era de la globalización
 
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto
91596697 kohan-nestor-el-metodo-dialectico-de-lo-abstracto-a-lo-concreto
 
Monografía Economistas (Marx - Smith)
Monografía Economistas (Marx - Smith)Monografía Economistas (Marx - Smith)
Monografía Economistas (Marx - Smith)
 
Karl marx contribucion a la critica de la economia politica
Karl marx   contribucion a la critica de la economia politicaKarl marx   contribucion a la critica de la economia politica
Karl marx contribucion a la critica de la economia politica
 
01 entrar en_la_lectura_de_el_capital
01 entrar en_la_lectura_de_el_capital01 entrar en_la_lectura_de_el_capital
01 entrar en_la_lectura_de_el_capital
 
Precursores de la sociología
Precursores de la sociologíaPrecursores de la sociología
Precursores de la sociología
 
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdf
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdfMarx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdf
Marx_Carlos_Contribucion_a_la_critica_de_la_economia_politica_.pdf
 
marx.pdf
marx.pdfmarx.pdf
marx.pdf
 
Lenin y el Marxismo.pdf
Lenin y el Marxismo.pdfLenin y el Marxismo.pdf
Lenin y el Marxismo.pdf
 
Marx.pdf
Marx.pdfMarx.pdf
Marx.pdf
 
Marx.pdf
Marx.pdfMarx.pdf
Marx.pdf
 
Teoría del valor
Teoría del valorTeoría del valor
Teoría del valor
 
Teoría del valor
Teoría del valorTeoría del valor
Teoría del valor
 
Marx
MarxMarx
Marx
 
Materialismo histórico y Materialismo filosófico
Materialismo histórico y Materialismo filosóficoMaterialismo histórico y Materialismo filosófico
Materialismo histórico y Materialismo filosófico
 

Más de Osvaldo Blanco

¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...
¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...
¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...Osvaldo Blanco
 
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.Osvaldo Blanco
 
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler - Osvaldo Blanco
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler  - Osvaldo BlancoNotas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler  - Osvaldo Blanco
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler - Osvaldo BlancoOsvaldo Blanco
 
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...Osvaldo Blanco
 
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...Osvaldo Blanco
 
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...Osvaldo Blanco
 
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...Osvaldo Blanco
 
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”Osvaldo Blanco
 
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...Osvaldo Blanco
 
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...Osvaldo Blanco
 
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...Osvaldo Blanco
 
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...Osvaldo Blanco
 

Más de Osvaldo Blanco (12)

¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...
¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...
¿Eurocentrismo o crítica decolonial? Epistemología política para una sociolog...
 
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.
Reconocimiento y lucha política en el movimiento estudiantil chileno.
 
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler - Osvaldo Blanco
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler  - Osvaldo BlancoNotas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler  - Osvaldo Blanco
Notas sobre la noción de mecanismos psíquicos en Judith Butler - Osvaldo Blanco
 
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...
Weber y el debate por el método de las ciencias del espíritu (apuntes de cáte...
 
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...
El Programa “Liceo para Todos”: Una estrategia de lucha contra la deserción e...
 
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...
Perspectivismo científico y nihilismo desencantado: reminiscencias nietzschea...
 
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...
La estadística como máquina de control biopolítico. Hacia un enfoque de inves...
 
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”
“Estructura, fronteras y desigualdades desde la convergencia clase/género”
 
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...
La estructura de clases como herramienta para el estudio de la desigualdad so...
 
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...
Identidad, racismo y tensiones en las élites a la luz de las ideologías posit...
 
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...
Hipótesis en torno al discurso, la ideología y el antagonismo como elemento e...
 
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...
Biopolítica, Espacio y Estadística (Revista Ciencia Política, universidad nac...
 

De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo y las clases sociales (Portal Pluma y Pincel www.plumaypincel.cl)

  • 1. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalism Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 El objetivo principal del presente trabajo es resaltar el aporte de algunas de las categorías fundamentales para la crítica de la sociedad capitalista y de las clases que las constituyen. Dicha lectura se basa en el entrecruzamiento de tres textos fundamentales: la “Introducción” y el “Prólogo” a la crítica de la economía política (1857 y 1859 respectivamente) y el libro I de “El Capital” (1867). Esta metodología de lo “abstracto a lo concreto” desarrollada en la “Introducción” es una importante clave para entender la estructuración del tomo I de “El Capital”. Esta última obra debe leerse teniendo como telón de fondo algunas categorías abstractas necesarias para poder dar cuenta de lo concreto, que es la formación económica social específicamente capitalista. Estos elementos abstractos hay que entenderlos como elementos presentes en todas las sociedades humanas, sean capitalistas o no, para transformarlos en categorías concretas, es decir, propiamente capitalistas.  I) Presentación. En la presente ponencia desarrollaremos cuatro categorías extraídas de nuestra lectura de tres textos de Marx: la “Introducción” de 1857 y el “Prólogo” de 1859 – ambos escritos en torno a la “Contribución de la Crítica la Economía Política”–  así como el Libro I de “El Capital”. Los cuatro conceptos a desarrollar son: i) el trabajo, ii) el mercado, iii) el modo de producción y iv) lo que aquí denominaremos como la organización. Creemos que estos cuatro conceptos son  cimientos fundamentales para una crítica a la sociedad capitalista y de las clases sociales que la constituyen(1). Por último, la ponencia concluirá exponiendo las líneas de investigación que el aporte de Marx permite para el estudio de las sociedades capitalistas en base a estas cuatro nociones ya presentadas. 1 / 11
  • 2. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 II) Cuestiones preliminares sobre lo abstracto y lo concreto. De la “Introducción” de 1857 encontramos el método conocido como “de lo abstracto a lo concreto”(2). Tales categorías están profundamente enraizadas a lo largo de la historia de la filosofía. Con distintas connotaciones, desde Platón, Aristóteles hasta Hegel y Feuerbach, lo abstracto y lo concreto son categorías fundamentales para la reflexión filosófica. Diremos aquí únicamente que entenderemos por “abstraer” el acto de sacar algo de alguna cosa, separar algo de algo, poner algo aparte. Por su parte, entenderemos por “concreto” a un agregado, algo que se ha formado por coagulación o por condensación de partes, algo de compacto o denso(3). Pienso que así es como se deben entender ambas categorías en la “Introducción” (1857). El método del materialismo histórico debe comenzar por asumir el caos social para analizarlo de forma cada vez más precisa, alcanzando conceptos cada vez más sutiles y específicos(4). Marx nos dice que no se trata de aislar categorías para analizarlas en sí mismas (la población, el trabajo asalariado, el capital, el dinero, etc.), sino de tejer las complejas relaciones y contradicciones que hay entre éstas para obtener una unidad compleja de elementos interrelacionados. Por eso que aún nos falta por citar un segundo paso, el cual Marx denomina el “viaje de retorno”(5). De este modo, lo concreto es la “síntesis de múltiples determinaciones”, vale decir, una reconstrucción del pensamiento y no una simple representación abstracta. Dos cosas queremos señalar aquí: primero, este desglose de los elementos abstractos hay que entenderlo como un ejercicio de presentación de elementos  presentes en todas las sociedades en general, sean capitalistas o no. Segundo, el método del viaje de retorno consiste en dar cuenta de las relaciones específicas entre estos elementos para dar con la concreta formación económico social capitalista.   III) Los dos primeros elementos: Trabajo y Mercado en el sistema capitalista. Comencemos por el “trabajo” señalando que se trata de un tipo de actividad, una forma de relación entre hombre y naturaleza que tiene por finalidad proveer satisfacción a las necesidades. En “El Capital”, comenzando el Capítulo V, Marx comienza desarrollando la idea de la actividad del trabajo en tanto relación hombre-naturaleza(6). Este “trabajo en general” no es exclusivo del capitalismo, sino que ha estado presente de diversas maneras a lo largo de la historia. Por ello mismo, esta determinación abstracta del trabajo no es suficiente para dar 2 / 11
  • 3. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 cuenta de la producción y creación de riqueza en el capitalismo. A esto hay que agregar que la actividad del trabajo permite explicar la creación de la riqueza. El trabajo como fuente de creación de riqueza o de valorización se basa en la acumulación de valores necesarios para los procesos de producción. En efecto, ya los economistas burgueses anteriores a Marx habían destacado el hecho de que el precio de un determinado producto está dado por el valor acumulado o, para ser más exactos a la terminología de Marx, por el trabajo acumulado(7). Una vez dicho estas cuestiones generales del trabajo, revisemos ahora el segundo concepto abstracto: el “mercado”. En “El Capital” Marx enseña que la circulación de mercancías es el punto de arranque, es decir, pone al mercado como un supuesto histórico necesario para la sociedad capitalista(8). Por lo mismo, el mercado está presente en cualquier forma económico-social como contexto necesario para el intercambio. Por ello mismo, al igual que sucedía con el “trabajo”, el “mercado” tomado abstractamente es insuficiente para el análisis específico del capitalismo. Todas las sociedades más o menos desarrolladas han dado forma a sus propios mercados, esto es, han intercambiado mercancías. Por ello mismo, y también por motivos de espacio, no desarrollaremos aquí una explicación ni del doble carácter de la mercancía (uso y valor), ni de los dos ciclos de circulación de mercancías (M – D – M y D – M – D)(9). En efecto, nos interesa otra cosa: establecer la relación entre trabajo y mercado en el capitalismo. Tomados aisladamente, abstractamente, estos concretos no nos dicen nada de lo específico del capitalismo. En cambio, al relacionarlos entre sí comenzamos a entender algunas cuestiones fundamentales. Principalmente, que el capitalismo lleva a la particularidad del trabajo asalariado, esto es, un trabajo que se compra y vende en el mercado por medio de un salario. Lo propio del mercado capitalista es que en él se vende y se compra una mercancía especial, única en tanto creadora de la riqueza, a saber, la mercancía fuerza de trabajo. Podríamos decir que lo que podemos denominar como “mercado de trabajo” es algo propio del capitalismo, cuestión que no se veía en sociedades precapitalistas(10). Como vemos, sólo en la relación entre estos dos elementos abstractos (trabajo en general y mercado) podemos encontrar un aspecto concreto del capitalismo. En éste, el trabajo en general deviene en fuerza de trabajo que se puede comprar y vender en el mercado. La fuerza de trabajo se vuelve así una mercancía sutil y casi imperceptible, pero tremendamente fundamental en cuanto productora de riqueza. En relación con la plusvalía capitalista, podemos decir que la explicación de la plusvalía se comienza a obtener, en primera instancia, a partir de la relación entre mercado y fuerza de trabajo. Ahora bien, esta relación entre mercado y fuerza de trabajo se establece como un 3 / 11
  • 4. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 “corte” en la exposición del argumento desarrollado en El Capital (transición que va del Capítulo III al V). En efecto, en un momento de la exposición, Marx nos presenta un problema adicional: no puede haber ganancia (plusvalía) por el simple motivo de la equivalencia. Es decir, el modelo puro de la circulación de mercancías a través del equivalente del dinero simple y llanamente no explica la aparición de la plusvalía(11). Así, Marx desecha de plano las explicaciones vulgares que dan cuenta de la plusvalía como el resultado de comprar barato o vender más caro(12). Aquí es donde aparecen elementos que no son estrictamente de mercado en su sentido puro, abstracto, lo que obliga a Marx a dejar la exposición de las mercancías y del mercado (capítulos I, II y III de El Capital). Por ello, la vinculación entre fuerza de trabajo y mercado aún no es suficiente, debiendo relacionar esto con otros elementos. Esto porque, insistimos, la plusvalía brota, al menos en parte, de algo que está por fuera de la circulación. Aquí, la explicación de Marx está en el límite; al mismo tiempo dentro y fuera de la circulación(13). IV) Tercer concepto abstracto: modo de producción. Los tres primeros capítulos de “El Capital” tienen sentido únicamente como preámbulo para llegar a la mercancía especial, aquella mercancía que es diferente al resto. Se trata de la mercancía “fuerza de trabajo”. Insistimos, por tanto, que los primeros tres capítulos de “El Capital” sirven para Marx nos demuestre que no es ni el dinero, ni la reventa de la mercancía, lo que hace brotar la plusvalía(14). Es más, podemos decir incluso que la plusvalía comienza a explicarse no a partir de la compra y venta de la fuerza de trabajo, sino del uso del trabajo mismo, esto es, de la puesta en acción de la mercancía ya comprada en el mercado e internada en el seno del proceso de producción. La fuerza de trabajo es aquella mercancía que –ya no dentro de la órbita de la circulación del mercado, sino de la producción misma – es usada, es decir, es consumida en su “valor de uso” en tanto aplicación de cerebro y músculos, “condiciones físicas y espirituales” que se dan en el cuerpo y subjetividad del trabajador. En otras palabras, el uso de la mercancía trabajo implica que ya no es un mero trabajo en general, sino fuerza de trabajo, siendo esto lo que produce la plusvalía. Hasta aquí vimos cómo se entrelazan dos conceptos claves: mercado y trabajo. Pero dicho entrelazamiento de ambos conceptos remite a un contexto social que se explica con un tercer elemento abstracto: el “modo de producción”. Éste implica la manera en que se producen, 4 / 11
  • 5. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 intercambian, distribuyen y consumen los bienes socialmente necesarios para la reproducción de una determinada formación histórico-social(15). Es decir, el modo de producción incluye al mercado y al trabajo, pero también elementos que van más allá de estos. En términos generales, el modo de producción se constituye por la articulación de las “fuerzas productivas” con las “relaciones sociales de producción”, lo que significa que la forma en que estén desarrolladas las primeras será determinante para la forma como se estructuren las segundas(16). Pero, además, la categoría abstracta del modo de producción reconoce que la propiedad de los medios de producción se convierte en el pivote del poder y del principio de la división social del trabajo y las consiguientes relaciones sociales de producción. Este concepto remite al hecho de que toda forma económico-social se constituye sobre la base de sus relaciones con los medios de producción, relaciones sociales antagónicas. En el capitalismo, el conjunto de estas relaciones de producción determinadas por la propiedad (o carencia de propiedad) de los medios de producción no sólo establecen una división social del trabajo, sino que, además, todo un edificio jurídico e ideológico que variará según la correlación de fuerzas específicas en las sociedades concretas. El modo de producción se define entonces como una división del trabajo que define las condiciones del gasto y del consumo de la fuerza de trabajo, la naturaleza y el destino de los valores de uso producidos, así como también implica determinaciones jurídicas, políticas, ideológicas. V) Cuarto elemento: la organización. Nos falta por explicitar un cuarto concepto abstracto: el de la “organización”. Para ello, comencemos explicando los términos de “trabajo necesario” y de la “jornada de trabajo”. Todas las mercancías poseen valor. La fuerza de trabajo, en tanto es una mercancía, también posee valor. El valor de una mercancía está determinado por el tiempo de trabajo necesario para su producción. En el caso de la fuerza de trabajo, su valor está determinado por los medios de vida necesarios para asegurar la subsistencia del obrero y los suyos. Este concepto es el que todos conocemos como “trabajo necesario”. Aquí llegamos a un punto crucial: sólo es productiva la fuerza de trabajo que crea un valor mayor que excede el suyo propio o, en otros términos, sólo es productiva la fuerza de trabajo que produce un valor más allá del “trabajo necesario”. En efecto, dentro de la “jornada de trabajo” –que viene a darse una vez que la fuerza de trabajo ya fue comprada por el capitalista y puesta en el proceso de producción –  Marx diferencia dos elementos: i) tiempo socialmente necesario recién definido y ii) el tiempo excedente en que, una vez que el obrero produce lo suyo (trabajo necesario), trabaja un excedente, un plustrabajo que lleva a un plusvalor(17). La plusvalía o plusvalor aparece cuando se aminora el tiempo necesario para la vida del obrero y, por tanto, se acrecienta el trabajo 5 / 11
  • 6. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 excedente. Es decir, sólo cuando el obrero produce más allá de lo que él mismo costó (su salario) y lo que costaron los medios de producción, podemos hablar de un trabajo productivo o, lo que es lo mismo, fuerza de trabajo que produce plusvalía, que valoriza las mercancías. Es así como para obtener plusvalía el burgués debe invertir capital, el cual se divide en dos tipos: i) capital constante o inversión en medios de producción; ii) capital variable o inversión en fuerza de trabajo. La parte constante del capital consistente en lo invertido en medios de producción no agrega valor nuevo más que el suyo propio. En cambio, la parte de capital invertida en salarios sí agrega valor. Por ello su nombre de capital variable, justamente porque se sostiene sobre la fuerza de trabajo, fuerza que, como ya dijimos, agrega más valor de  lo que ella misma vale, es decir, de lo invertido en salario. Precisamente, la transformación del capital en plusvalía sigue estas mismas líneas ya expuestas. Con ello, Marx distingue dos conceptos esenciales: i) plusvalía absoluta y ii) plusvalía relativa. Ambas son formas de ganancia capitalista, pero, más allá de eso, son métodos de administración de la fuerza de trabajo que posee la burguesía para aumentar el grado de explotación e incremento del plustrabajo. Mientras la “plusvalía absoluta” consiste en aumentar la masa de plusvalía mediante el alargamiento de la jornada de trabajo, la “plusvalía relativa” consiste en aumentar la masa de plusvalía disminuyendo el valor de la fuerza de trabajo a partir de aumentar las fuerzas productivas. Cuando la fuerza productiva del trabajo aumenta y la jornada laboral se mantiene constante, el tiempo en que el obrero trabaja para reproducir su fuerza de trabajo se reduce y la masa de plustrabajo aumenta. Podríamos decir que la “plusvalía absoluta” es el método de explotación más básico, alcanzando su máxima difusión en los estadios iniciales del capitalismo basado en el trabajo manual. Por el contrario, podríamos decir que la “plusvalía relativa” es mucho más “racional” (en términos de la racionalidad instrumental) y surge cuando apareció y se desarrolló la gran industria maquinizada y la administración del trabajo, momento en que resultó posible aumentar la productividad del trabajo. La racionalización y eficiencia de la productividad disminuyó el tiempo socialmente necesario y aumentó el plustrabajo. En distintos capítulos hacia el final de “El Capital”, Marx demuestra tres métodos de plusvalía relativa con los cuales el capitalismo profundiza el proceso de racionalización de la explotación de la fuerza de trabajo. Estos métodos son: 1) la cooperación o multiplicación de la productividad mediante una colaboración simultánea de muchos hombres con arreglo a un plan(18). 2) la división del trabajo, tal y como hasta 1770 se desarrolló en el período manufacturero. 3) La maquinaria, con la ayuda de la cual la gran industria se viene desenvolviendo. 6 / 11
  • 7. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 Todo lo que hasta aquí hemos desarrollado y que remite a la profundización de los distintos métodos de plusvalía relativa dan cuenta de nuestra cuarta categoría abstracta: la de la “organización”. Se trata de la organización del trabajo de terceros que eleva la intensidad y productividad del trabajo. Esto trae importantes consecuencias que revisamos a continuación en nuestras conclusiones. VI) Conclusión: Elementos fundamentales a la hora de pensar la estructura de clases. Primero: El capitalismo es la formación económico-social donde la desigual distribución de los medios de producción implica un mecanismo de explotación basado en el mercado como espacio de compra y venta de la mercancía fuerza de trabajo. Ante la pregunta ¿qué es lo específico del mercado capitalista?, la respuesta es la compra y venta no del trabajo en general, sino de la fuerza de trabajo. En el mercado capitalista no ganan todos, sino sólo el que compra la fuerza de trabajo (el capitalista), no el que la vende (el obrero). Por ello, podemos decir que en el modo de producción capitalista el “trabajo” no es una relación de explotación del hombre hacia la naturaleza (“trabajo en general”), sino que del hombre hacia el hombre mismo, esto es, del capitalista hacia la fuerza del trabajo vendida por el obrero en el mercado. Segundo: Sin embargo, el mercado es la condición previa para la explotación, toda vez que la producción de plusvalía se da explotando la fuerza de trabajo en el seno de la producción. Ahora bien, para que se dé la compra y venta de la fuerza de trabajo deben darse dos condiciones fundamentales: i) la igualdad en el plano jurídico de quien vende y quien compra (obreros y capitalistas negocian como seres iguales y libres); ii) el poseedor de la fuerza de trabajo no debe tener otra mercancía más que ofrecer que su fuerza de trabajo(19). Esto último no es otra cosa que la naturalización de la desigualdad social dada por el aparato jurídico e ideológico que permiten la legitimación del antagonismo de la estructura de clases. Otro punto importante es que la explotación capitalista es un concepto relacional, es decir, se da en el seno de las relaciones sociales de producción(20). Las relaciones sociales entre clases en el capitalismo no se puede entender sin razonar dialécticamente: los burgueses son burgueses sólo porque existen proletarios y viceversa(21). Repetimos: estas relaciones en el seno de la producción no son “naturales”, sino que antagónicas, cargadas de conflicto, unas veces invisibilizado y otras de forma explícita. 7 / 11
  • 8. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 Tercero: La categoría de la organización es la de más difícil identificación. De hecho, es una categoría que Marx nunca desarrolló explícitamente, aunque pueden encontrarse ciertas “pinceladas” a lo largo de toda su obra. Desde el comienzo de El Capital, Marx nos habla de un capitalista dividido en dos: un “propietario” y un “organizador”(22). La plusvalía relativa implica una forma específica de control no sólo de los medios físicos, sino también de lo que E. O. Wright denominó como “bienes de organización”, teniendo como principal función la de la producción de valores de uso en tiempos de “trabajo excedente”. Así, la dominación y explotación capitalista se basa en dos tipos de coacciones (a veces unidas y otras separadas): i) propiedad de medios de producción (físicos) y ii) control u organización de la producción a través de medios de organización (medios intangibles, tales como la cualificación o la jerarquía de organización). Pero esto también da pié para profundizar en el estatus de clase de las llamadas “nuevas clases medias” quienes sin ser propietarias de los medios de producción pueden llegar a administrar la explotación(23). Son estas nuevas pautas las que deberán ser analizadas desde este nuevo flanco que abre la categoría de la organización en tanto posiciones, dentro de la estructura de clases, cuyo papel en el proceso de producción es el de gestionar la explotación capitalista. Por último, permítasenos decir que la organización es un elemento abstracto y no exclusivo del capitalismo, puesto que en los regímenes socialistas de organización planificada la producción no está en manos privadas, sino que organizada centralizadamente(24). NOTAS 1. Es imprescindible señalar nuestra deuda respecto del texto de Jaques Bidet, traducido al español por María Emilia Tijoux. Véase Bidet, Jaques (2007): Refundación del marxismo. Explicación y reconstrucción de El Capital, Lom, Santiago de Chile. 2. Véase por ejemplo el texto recién citado de Jaques Bidet. Entre otros, ver también Kohan, Néstor (1992): “El método dialéctico de lo abstracto a lo concreto. Una aproximación.”, en Dialéktica, Revista de filosofía y teoría social, año I, número 2, Buenos Aires, Argentina, pp.45-52. Véase también “Itinerario de la Contribución a la Crítica de la Economía Política de Karl Marx”, Apuntes del Seminario Permanente Hegel-Marx, Facultad de Filosofía Universidad de Chile. http://seminariopermanentehegelmarx.weebly.com/uploads/2/7/3/9/2739972/jornadas_iv_coloq uio_interdisciplinario_de_estudiantes.pdf 8 / 11
  • 9. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 3. Diccionario Crítico de Ciencias Sociales. Terminología Científico-Social, Román Reyes (dir.), Plaza y Valdés, Madrid-México 2009.  http://www.ucm.es/info/eurotheo/diccionario/A/abstracto-concreto.htm 4. “Parece justo comenzar por lo real y lo concreto, por el supuesto efectivo; así, por ej., en la economía, por la población que es la base y el sujeto del acto social de la producción en su conjunto. Sin embargo, si se examina con mayor atención, esto se revela [como] falso. La población es una abstracción si se deja de lado, por ej., el trabajo asalariado, el capital, etc. Estos últimos suponen el cambio, la división del trabajo, los precios, etc. El capital, por ej., no es nada sin trabajo asalariado, sin valor, dinero, precios, etc. Si comenzara, pues, por la población, tendría una representación caótica del conjunto y, precisando cada vez más, llegaría analíticamente a conceptos cada vez más simples”. Marx, K. (1971a), Introducción general a la crítica de la economía política. 1857, Cuadernos del Pasado y Presente, Buenos Aires, Argentina, Pág. 21. 5. “Llegando a este punto, habría que reemprender el viaje de retorno, hasta dar de nuevo con la población, pero esta vez no tendría una representación caótica de un conjunto, sino una rica totalidad con múltiples determinaciones y relaciones”. IBÍD. 6. En “El Capital”, Marx escribe: “El trabajo es, en primer término, un proceso entre la naturaleza y el hombre, proceso que éste realiza, regula y controla mediante su propia acción su intercambio de materias con la naturaleza”. Marx, K. (2001): El Capital, Tomo I, FCE, México, Pág. 130. 7. En la “Introducción” (1857), Marx le asigna este gran descubrimiento a Adam Smith. 8. “La producción de mercancías y su circulación desarrollada, o sea, el comercio, forman las premisas históricas en que surge el capital.”  Marx, 2001: 103. 9. El ciclo D – M – D es el propio del capitalista, pero su explicación no es útil para los propósitos que tenemos en esta ponencia. Tal  y como lo veremos, queremos salirnos del ámbito del mercado para llegar al de la producción que explica, entre otras cosas, a este ciclo (D – M – D, donde este último es D’, vale decir, dinero más un incremento). 10. En sociedades precapitalistas es impensado hablar de mercado de fuerza de trabajo. esto debido a que en estas sociedades la explotación se basa en desigualdades generadas por la propiedad de bienes en forma de fuerza de trabajo (por Ej., en el feudalismo). Por el contrario, en el capitalismo, la explotación se basa en la propiedad de medios de producción que permiten la explotación de la fuerza de trabajo. Precisamente, las revoluciones burguesas (y su expresión ideológica: las “libertades burguesas”) redistribuyeron los bienes productivos asociados a las personas haciendo de la modernidad el momento histórico donde cada uno, al menos, se posee a sí mismo, cuestión que precisamente no ocurría en las épocas precapitalistas, donde el cuerpo del siervo y del esclavo (y, por ende, su fuerza de trabajo) le pertenecían al señor. 11. “En su forma pura, el cambio de mercancías es siempre un cambio de equivalentes y, por tanto, no da pie para lucrarse obteniendo más valor”.  ÍBID: 113. 12. En otro pasaje de El Capital, Marx escribe: “En su forma pura, el proceso de circulación de mercancías presupone el intercambio de equivalentes. Sin embargo, en la realidad las cosas no se presentan en toda su pureza. Partamos pues del intercambio de no equivalentes.” ÍBID.: 115. El capitalista no es sólo un vendedor de mercancías, sino que es también un comprador, por tanto, si los capitalistas venden caro sus productos estos precios se reflejan a la hora de suministrarse –por la vía de otro capitalista- los medios de producción (maquinarias, materias primas). Por tanto, no hay ganancia, sino sólo compensación de precios; lo que gana 9 / 11
  • 10. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 vendiendo caro se compensa en el momento de ir a comprar medios de producción a otro capitalista, el cual, desde este modelo, le vende caro. “La creación de la plusvalía  y, por tanto, la transformación del dinero en capital, no puede, como se ve, tener su explicación en el hecho de que el vendedor venda las mercancías por más de lo que valen o el comprador las adquiera por menos de su valor” ÍBID.: 116. 13. “Como se ve, el capital no puede brotar de la circulación, ni puede brotar tampoco fuera de la circulación. Tiene necesariamente que brotar en ella y fuera de ella, al mismo tiempo” ÍBID.: 120. 14. El dinero como medio de compra y pago sólo realiza el precio de mercancía que se compra o se paga, manteniéndose inalterable como medio equivalente, sin aumentar la magnitud del valor. Tampoco es la reventa de la mercancía, pues ello sólo convierte nuevamente la mercancía en dinero equivalente, sin aumentar valor. 15. En otra de sus célebres obras, nos referimos al Prólogo de la “Contribución a la crítica de la economía política”, Marx escribió un conocido pasaje: “En la producción social de su existencia, los hombres contraen determinadas relaciones necesarias e independientes de su voluntad, relaciones de producción que corresponden a una determinada fase de desarrollo de sus fuerzas productivas materiales. El conjunto de estas relaciones de producción forma la estructura económica de la sociedad, la base real sobre la que se eleva un edificio jurídico y político y a la que corresponden determinadas formas de conciencia social. El modo de producción de la vida material determina el proceso de la vida social, política y espiritual en general”. Marx, K. (1971b): “Prólogo a contribución a la crítica de la economía política”, en Introducción general a la crítica de la economía política, Ob.cit., Pág. 35. (Cursivas mías O.B.). 16. Las fuerzas productivas son los medios de producción, elementos de origen natural, tales como la tierra, aire, agua, bosques, etc. así como las herramientas o instrumentos construidos por el hombre. A ello debemos incluir también todos los procedimientos laborales, el agrupamiento de los obreros en fábricas o talleres y luego en complejos industriales, la división del trabajo y su racionalización, entre otros. De esta manera, la ciencia interviene en la formación de las fuerzas productivas. Esto será de mucha importancia más adelante en nuestra explicación. 17. “Una de las dos partes que la integran [a la jornada de trabajo] se halla condicionada por el tiempo de trabajo requerido para la reproducción continua del propio obrero, pero su duración total cambia al cambiar la longitud o duración del trabajo excedente”. ÍBID: 178. Ahora bien, es importante decir que, en tanto suma de trabajo necesario y trabajo excedente, la jornada laboral no es algo que pueda determinarse a priori, sino a partir de elementos externos o, simple y llanamente, sociopolíticos. “Por eso, en la historia de la producción capitalista, la reglamentación de la jornada de trabajo se nos revela como una lucha que se libra en torno a los límites de la jornada; lucha ventilada entre el capitalista universal,  o sea, la clase capitalista, de un lado, y de otro el obrero universal, o sea, la clase obrera”.  ÍBID.: 180. 18. El fordismo o taylorismo y, posteriormente, los métodos postfordistas, incluyendo los más recientes, recaen en esta categoría de management capitalista. 19. Por esto mismo, el poseedor del dinero (el capitalista) va a mercado a encontrarse con el “obrero libre”: “(…) libre en un doble sentido, pues de una parte ha de poder disponer libremente de su fuerza de trabajo como de su propia mercancía, y, de otra parte, no ha de tener otras mercancías que ofrecer en venta, ha de hallarse, pues, suelto, escotero y libre de todos los objetos necesarios para realizar por cuenta propia su fuerza de trabajo” ÍBID.: 122. 20. Véase Wright, Erik O. (1994): Clases, Siglo XXI, Madrid. 10 / 11
  • 11. De lo abstracto a lo concreto: Elementos fundamentales del aporte de Marx para el análisis del capitalismo Jueves, 15 de Abril de 2010 19:25 - Actualizado Viernes, 16 de Abril de 2010 16:30 21. Esto nos aleja de perspectivas que analizan a la sociedad en cuanto "segmentos” o “estratos”. Por ejemplo, los sectores ABC1, C2, C3, D, y E, son grupos que dan cuenta de distintos niveles de consumo. No son clases sociales, pues no son definibles en términos de sus relaciones entre clases. Toda clase social es un grupo social que se relaciona con otro. Esto equivale a decir que una clase es un grupo que puede ser definido en función de sus relaciones con otras clases. Tal y como señala E. O. Wright, las clases no son grupos “gradacionales”. Este último es un principio distributivo: hay grupos con distintos “grados” de ingresos, niveles educativos, capacidades de consumo, etc., conformándose grupos que no necesariamente establecen relaciones sociales de explotación entre sí, sino más bien los grupos se distinguen por el grado cuantitativo de algún atributo (ingresos, estatus, educación, etc.). 22. Bidet, Ob.cit. 23. A éstas se les suele caracterizar hoy por su estatus, su nivel de consumo, sus ingresos, sus calificaciones, etc. Pero, en cambio, al hablar de “organización”, incluimos a las clases medias dentro de las relaciones sociales de producción, por tanto, de la explotación capitalista. 24. Wright, Ob.cit. Profesor en la Universidad ARCIS Santiago. Sociólogo por la Universidad Arcis. © Magíster en Ciencias Sociales, mención Sociología de la Modernización, Universidad de Chile. <!--[endif]--> 11 / 11