Este documento describe los animales con pieles como bonitos, cariñosos y amorosos, pero también indefensos. Señala que cada año más de 400 millones de animales son muertos por la industria de las pieles, muchos de ellos en condiciones deplorables y mediante métodos crueles como asfixia o veneno. Exhorta al lector a no comprar ni usar pieles de animales y dejarlos vivir libres y felices.