El documento discute la sexualidad en la vejez, destacando que es un mito que las personas mayores pierden el deseo o capacidad sexual. Aunque hay cambios fisiológicos con la edad, la actividad sexual puede mantenerse con una buena salud, una pareja compatible y manteniendo una vida sexual activa a lo largo de la vida. El documento también resalta la importancia de romper los prejuicios sociales sobre la sexualidad en la vejez.