El documento contrasta los derechos humanos y derechos fundamentales, señalando que los derechos humanos se refieren a la Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU de 1948, mientras que los derechos fundamentales se refieren a los reconocidos en la constitución de cada país. Luego discute que el acceso a Internet es considerado un derecho humano altamente protegido por la ONU. Finalmente, define la brecha digital como la desigualdad en el acceso y uso de tecnologías debido a factores geográficos y socio