La música afrocolombiana es el resultado de la mezcla de las raíces africanas con elementos de otras culturas, lo que contribuyó a la construcción de la nación colombiana. Los ritmos musicales del Caribe como la cumbia, el porro y el mapalé son muy populares en las celebraciones nacionales desde la llegada de los esclavos africanos en el siglo XVI y reflejan las creencias y sentimientos colectivos del pueblo colombiano.