El documento describe cómo el movimiento constante de las placas tectónicas produce fricciones y deformaciones que, cuando superan el límite de resistencia de la corteza terrestre, ocasionan terremotos. Explica que los terremotos ocurren principalmente en zonas donde las placas tienden a contraerse, como a lo largo de fallas geológicas frágiles. También menciona algunos efectos secundarios de los terremotos, como la licuefacción del suelo, deslizamientos de laderas y tsunamis.