Un ecosistema desértico se caracteriza por tener poca lluvia y vegetación. Los seres vivos que lo habitan incluyen camellos, tortugas, liebres y serpientes. La cadena alimenticia en un desierto consiste en plantas que realizan la fotosíntesis, conejos que se alimentan de plantas, serpientes que se alimentan de conejos, y águilas que se alimentan de serpientes. Para proteger este ecosistema frágil, no debemos lastimar plantas ni animales y debemos participar en campañas