SlideShare una empresa de Scribd logo
1 de 1
Descargar para leer sin conexión
EJERCICIO 10: ENMARCAR UN PÁRRAFO.

Bryan había pasado en el instituto por un periodo de escepticismo. (Según un relato, sin
duda algo más que ligeramente embellecido, escribió a Robert G. Ingersoll solicitando
pertrechos pero, al recibir sólo una pronta respuesta de su secretario, volvió inmediatamente a
la ortodoxia.) Aun así, aunque Bryan nunca apoyo la evolución, no situó su oposición a la
misma en las primeras prioridades de su agenda; en realidad, demostró generosidad y
pluralismo evidentes hacia Darwin. En “El Príncipe de la Paz”, un discurso que, en lo que
respecta a popularidad y frecuencia de repetición, sólo le va a la zaga a “Cruz de Oro”, Bryan
dijo:

No llevo la doctrina de la evolución tan lejos como hacen algunos; todavía no estoy
convencido de que el hombre sea un descendiente directo de los animales
inferiores. No quiero decir que os censure si queréis aceptar la teoría… Aunque yo
no acepto la teoría darwiniana no os criticaré por ello.

(Bryan, quien ciertamente iba de un sitio a otro, pronunció por primera vez este discurso en
1904, y lo describió en sus obras completas como ”una conferencia pronunciada en muchas
reuniones religiosas y cursos de verano en Estados Unidos, y también en Canadá, México,
Tokio, Manila, Bombay, El Cairo y Jerusalén”.)

Stephen JayGould
Reflexiones sobre Historia Natural

Más contenido relacionado

La actualidad más candente (11)

Ejercicio 8 a
Ejercicio 8 aEjercicio 8 a
Ejercicio 8 a
 
Ejercicio 10 b
Ejercicio 10 bEjercicio 10 b
Ejercicio 10 b
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10, enmarcar un párrafo.
Ejercicio 10, enmarcar un párrafo.Ejercicio 10, enmarcar un párrafo.
Ejercicio 10, enmarcar un párrafo.
 
Manol
ManolManol
Manol
 
Ejercicio 8
Ejercicio 8Ejercicio 8
Ejercicio 8
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Bruce lee
Bruce leeBruce lee
Bruce lee
 
Mr. Crowley
Mr. CrowleyMr. Crowley
Mr. Crowley
 

Similar a Ejercicio 10 (20)

Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 8
Ejercicio 8Ejercicio 8
Ejercicio 8
 
Ejercicio 8
Ejercicio 8Ejercicio 8
Ejercicio 8
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejer8a.
Ejer8a.Ejer8a.
Ejer8a.
 
Ejer8a.
Ejer8a.Ejer8a.
Ejer8a.
 
Ejer10
Ejer10Ejer10
Ejer10
 
Ejer10
Ejer10Ejer10
Ejer10
 
Ejercicio 8b
Ejercicio 8bEjercicio 8b
Ejercicio 8b
 
Ejer8b
Ejer8bEjer8b
Ejer8b
 
Ejer8b
Ejer8bEjer8b
Ejer8b
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 10 pdf
Ejercicio 10 pdfEjercicio 10 pdf
Ejercicio 10 pdf
 
Ejercicio 8
Ejercicio 8Ejercicio 8
Ejercicio 8
 
Ejercicio 10
Ejercicio 10Ejercicio 10
Ejercicio 10
 
Ejercicio 8
Ejercicio 8Ejercicio 8
Ejercicio 8
 

Ejercicio 10

  • 1. EJERCICIO 10: ENMARCAR UN PÁRRAFO. Bryan había pasado en el instituto por un periodo de escepticismo. (Según un relato, sin duda algo más que ligeramente embellecido, escribió a Robert G. Ingersoll solicitando pertrechos pero, al recibir sólo una pronta respuesta de su secretario, volvió inmediatamente a la ortodoxia.) Aun así, aunque Bryan nunca apoyo la evolución, no situó su oposición a la misma en las primeras prioridades de su agenda; en realidad, demostró generosidad y pluralismo evidentes hacia Darwin. En “El Príncipe de la Paz”, un discurso que, en lo que respecta a popularidad y frecuencia de repetición, sólo le va a la zaga a “Cruz de Oro”, Bryan dijo: No llevo la doctrina de la evolución tan lejos como hacen algunos; todavía no estoy convencido de que el hombre sea un descendiente directo de los animales inferiores. No quiero decir que os censure si queréis aceptar la teoría… Aunque yo no acepto la teoría darwiniana no os criticaré por ello. (Bryan, quien ciertamente iba de un sitio a otro, pronunció por primera vez este discurso en 1904, y lo describió en sus obras completas como ”una conferencia pronunciada en muchas reuniones religiosas y cursos de verano en Estados Unidos, y también en Canadá, México, Tokio, Manila, Bombay, El Cairo y Jerusalén”.) Stephen JayGould Reflexiones sobre Historia Natural