El circo llegó al pueblo y Ramón el elefante se dio cuenta de que no veía bien. Su amigo el ratón le sugirió que se pusiera gafas, lo que le permitió ver claramente y convertirse en una estrella del circo junto a su nueva amiga y pareja, una elefante hembra. Juntos tuvieron mucho éxito con su show en el circo y vivieron felices para siempre.