El documento habla sobre el señorío de Jesús en nuestras vidas. Explica que para ser un verdadero cristiano, Jesús debe ser el centro y señor de toda nuestra existencia, no solo una parte. Debemos hacer todo lo que Él quiere, como Él quiere y cuando Él quiere. También debemos reconocer a Jesús como Señor con nuestra boca y creer en nuestro corazón para alcanzar la salvación.