Este documento compara al cristiano con el águila para enfatizar la necesidad de esforzarse espiritualmente. Explica que el águila debe hacer un gran esfuerzo para elevarse, mueve sus alas con precisión y busca las alturas. Del mismo modo, el cristiano debe esforzarse para crecer espiritualmente, usar sus dones con cuidado y fijar su atención en las cosas celestiales más que en los problemas terrenales.