La ecuación patrimonial surge para conocer los cambios en el activo, pasivo y patrimonio de una empresa. Los activos son los bienes y derechos de cobro que posee la empresa, mientras que el pasivo son sus obligaciones y deudas. El patrimonio representa la participación de los socios e incluye el capital social, resultados y reservas. La ecuación básica es que los activos son igual a la suma del pasivo y el patrimonio, aunque esta ecuación puede sufrir variaciones.