2. Carta de San Martín al gobierno de BuenosAires
Octubre de 1816
Al gobierno de Buenos Aires:
Tocamos yala primavera y todavía nome mandaron ni la mitad de las cosas que pedí.
Me falta tiempo ydinero y no ando bien de salud.
Entre el asma que no me deja respirar ylos ataques de reuma que metuvieron postrado en la cama durante11días,
no sé con qué quedarme.
Yasé cuál es el remedio para mis males: ¡tranquilidad!
Pero cómo voy a estar tranquilo si mis soldados no tienen ropa para ponerse, ni frazadas para taparse en la
intemperie. ¡Por Dios!, mándenmelos vestuarios para los granaderos que andanen cuero.
Otro elemento que necesito son clarines, sin ellos las prácticas de caballería son muydesordenadas porque los
últimos de la fila no escuchan las órdenes.
No quiero molestarlo más con tanto pedido. Pero es que con soldados así no podremos ganarningunaguerra.
Ellos se desaniman, las enfermedades los atacan y el frío de los Andes sin ropa adecuada se hace insoportable.
Hagan ustedes lo necesario pero que sea rápido.
Cordialmente.
Joséde San Martín
4. 23 deenero 1817
En las montañas
Querido hermano:
No pude escribirte porque me enfermé. El médico dijo que estuve apunado. Si no
quiero sentirme así voy a tener que masticar ajo y cebolla todo el resto del camino.
¡Tengo un aliento espantoso!
Mi amigo Felipe me regaló su chifle para que no me falte agua.
Te dejo .Todavía estoy algo débil (nole cuentes a mama)
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio
5. 9 de febrero de1817
En las montañas
Hoy anda todo el mundo intranquilo. Se corre la voz deque pronto habrá batalla.
El General pasa todo el tiempo mirando los montes con sus anteojos. Pareceque los
españoles están cerca.
La comida no será como la demamá peroes pasable. El charquicán es grasoso y ¡bien
picante! Pero es lo único que te saca el frio. Eso si las galletas son durísimas.
Te quiero
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio
6. Mayo 1816
Campamento de Plumerillo
Querido Lucio:
La vida acá en el campamento es bastante agitada. Apenas amanece, se dispara un
cañonazo para que nos levantemos.
Cada uno hacelo quele toca. Algunos practican tiro al blanco, otros ensayan con lo
sables, otros cocinano limpian.
Yo toco enla banda de tambores ycornetas. Los sábados lavamos la ropa ylos
domingos descansamos.
Todavía notengo uniforme.
Cariños
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio
7. Julio1816
Campamento de Plumerillo
Hermanito:
Quisiera escribirte más seguido pero siempre tengo algo que hacer.Hoyme pusieron
a fabricar zapatones. Las botas no alcanzanpara todos.
Los armamos cosiendo cuerosy los rellenamos con trapos. Son para cruzar la
Cordillera.
¡Meduelelos dedos detanto empujarla aguja!
Por suerte ayerllegaron las frazadas. ¡Nosabes el frio que hace a la noche!Tengo un
amigo que me escribe las cartas, otro día tecuento.
¡Teextraño!
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio
8. Octubre 1816
Campamento de Plumerillo
Lucio:
Mi amigo se llama Antonio, es granadero. En los ratos libres me enseña a usar el sable. ¡Pero
es muypesado para mí!
Tecuento un secreto. La otra noche, mirandopor un agujerito de la tienda de SanMartín (ya
sé que no está bien espiar),descubrí que está un poco enfermo. Tomaba un líquido verde deuna
botellita y lecontaba a otro capitán que hacía dos noches quedormía sentado.
¡Pero al minutoestaba jugando ajedrezcomo si nada! ¡Ah!Meodiaba! Medieron el uniforme!
El gorro es un poco grande, pero el resto me queda pintado.
¡Saludos a todos! Besos
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio
9. Diciembre 1816
Campamento de Plumerillo
Lucio querido:
En dos días más salimos para la Cordillera. San Martín nos contó que cruzaremos
las montañas divididos en dos grupos.
¡Ojalá que me toquecon Antonio!Nos dijo que fuéramos valientes yque no
olvidáremos nuncanuestra misión: ¡Lucharpor unapatria libre e independiente de
España!
Hasta pronto hermano.
¡Deséame suerte!
Tequiere
Ramón
Carta del soldado Ramóna su hermanoLucio