El documento propone que el 15 de septiembre en México haya silencio en lugar del tradicional grito de independencia, como forma de protesta contra la inseguridad y la falta de resultados de los gobernantes. Se invita a la gente a no asistir a los eventos oficiales y dejar solos a los líderes políticos en sus celebraciones, para mostrar el descontento con la situación actual del país.