La etapa productiva permite a los aprendices del Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) aplicar y fortalecer las competencias adquiridas durante su formación a través de alternativas como contratos de aprendizaje, vínculos laborales, proyectos productivos o pasantías, lo que les da la oportunidad de resolver problemas reales del sector productivo. La autora prefiere el contrato de aprendizaje porque le permite postularse para prácticas en empresas y desarrollar lo aprendido mientras recibe apoyo económico.