La eucaristía consta de cuatro partes principales: el rito de entrada, la liturgia de la palabra con tres lecturas, la liturgia eucarística que incluye la ofrenda del pan y el vino y la comunión, y el rito de despedida para cerrar la celebración. Toda la misa conduce hacia el momento importante de la comunión, donde se recibe a Cristo bajo los signos de pan y vino.