El documento discute la naturaleza del alma humana y lo que sucede después de la muerte según la Biblia. Explica que el hombre está compuesto de polvo y aliento de vida dado por Dios, y que cuando el aliento de vida se retira, el cuerpo muere pero el alma no va a ninguna parte, solo deja de existir hasta la resurrección. La Biblia muestra que la muerte es un sueño y que los muertos serán resucitados en el futuro para recibir su recompensa.
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Hay muchas ideas diferentes sobre el estado
de los muertos, mas ¿qué nos dice Dios
sobre esto?
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El hombre es formado por
dos componentes.
“Entonces Dios el Eterno modeló
al hombre del polvo de la tierra.
Sopló en su nariz aliento de vida,
y el hombre llegó a ser un ser
viviente.”
G é n. 2: 7
4. 4
Adán poseía
cerebro, mas no
pensaba ni
amaba, hasta
que Dios sopló
en sus narices
aliento de vida.
Y ¿cuál fue el
resultado?
5. 5Polvo de la tierra + aliento de vida = ser viviente.
6. 6
Bombillo + energía eléctrica = luz.
Cuando es interrumpida la conexión
eléctrica, ¿qué acontece con la luz?
Se apaga.
¿A dónde fue la luz?
A ningún lado, solo se apagó.
7. 7
Corte la energía eléctrica y la luz
dejará de existir.
Quite el aliento de vida y no habrá
alma, apenas un cuerpo muerto.
8. 8
La desobediencia separó al
hombre de la fuente de vida.
“…pero del árbol del
conocimiento del bien y
del mal no comerás,
porque el día que
comas de él, morirás.”
Gé n. 2: 1 6 -1 7
9. 9
La primera mentira fue
sobre el estado de los
muertos.
“No es cierto.
No moriréis.”
G é n 3: 3-4
10. 10
Las tendencias
pecaminosas de Adán y
Eva fueron transmitidas
para toda la raza
humana.
“Por tanto, así como el
pecado entró en el
mundo por un hombre, y
por el pecado la muerte,
así la muerte pasó a
todos los hombres, pues
todos pecaron.” Ro m .
5: 1 2
11. 11
Nuestro cuerpo está
sujeto a la muerte.
“Por consiguiente, no reine
el pecado en vuestro cuerpo
mortal, para obedecer a sus
malos deseos.” Ro m . 6 : 1 2
12. 12
La inmortalidad
se nos concede
en Cristo.
“Nuestro Salvador
Jesucristo, quien
abolió la muerte, y
sacó a la luz la
vida y la
inmortalidad.”
2 Tim . 1 : 1 0
13. 13
Solo Dios es inmortal.
“Dios, bendito y único
Soberano, Rey de reyes y
Señor de señores, el
único que tiene
inmortalidad.”
1 Tim . 6 : 1 5-1 6
15. 15
El hombre es hecho de polvo.
“y el polvo vuelva a la tierra
de donde vino, y el aliento
de vida vuelva a Dios que
lo dio.”
“Pues polvo eres, y al polvo
volverás.” G é n. 3: 1 9
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La palabra “espíritu” es la palabra hebrea
(RUACH) que simplemente significa
viento.
Algunas veces esta es
traducida por viento y en otras
por espíritu, pudiendo ser
usadas alternamente.
18. 18
Los muertos no saben cosa alguna.
“Los muertos nada saben… su amor,
su odio y su envidia perecieron ya, y
nunca más participan en nada de lo
que se hace bajo el sol.” Ecl. 9 : 5-6
19. 19
El mismo David no subió al cielo
después de su muerte.
“Hermanos, se puede decir
confiadamente que el patriarca
David murió y fue sepultado, y su
sepulcro está con nosotros hasta
hoy. Porque David no subió al
cielo.” He ch. 2: 29 , 34
20. 20
La muerte no es una
continuación de la vida, es un
período de espera.
21. 21
En 50 lugares, la Biblia
muestra la muerte como un
sueño.
“Nuestro amigo lázaro duerme,
mas voy para despertarlo…
22. …Entonces sus discípulos dijeron: Señor, si se ha
dormido, sanará. Pero esto decía Jesús de la muerte
de Lázaro, y ellos pensaron que hablaba del reposo
24. 24
El sueño de la
muerte no es eterno.
“No os maravilléis de
esto, porque vendrá la
hora, cuando todos
los que están en los
sepulcros oirán su
voz…
25. 25
…Y los que hicieron
bien, resucitarán para
vivir…
…pero los que hicieron
el mal, resucitarán para
ser condenados”
Juan 5: 28 -29
26. 26
Si los muertos fuesen directamente al
cielo o al infierno, no habría necesidad
del día de la resurrección para recibir la
27. 27
La resurrección de
Jesús es nuestra
certeza de que los
santos muertos serán
resucitados.
“Si sólo para esta vida esperamos en Cristo,
somos los más desdichados de todos los
hombres…
28. 28
…
…Pero lo cierto es que Cristo resucitó de los
muertos, y fue hecho primicia de los que
durmieron.”
29. 29
1 Te s. 4: 1 6 -1 7
“Porque el mismo
Señor descenderá del
cielo con aclamación,
con voz de arcángel,
y con trompeta de
Dios, y los muertos
en Cristo resucitarán
primero…
30. 30
…Luego
nosotros, los
que vivamos, los
que hayamos
quedado,
seremos
arrebatados
junto con ellos
en las nubes, a
recibir al Señor
en el aire. Y así
estaremos
siempre con el
Señor.”