La contaminación sonora puede causar molestias o daños a la salud. Produce efectos como elevación de la agudeza auditiva, trauma acústico, y pérdida prematura de la audición. Diversas actividades como el tránsito vehicular, la industria, los servicios públicos y las actividades domésticas generan ruidos que contribuyen a la contaminación acústica y representan un peligro para la salud. Instituciones como el INDECOPI y la DIGESA se encargan de regular y monitorear los niveles de