Este documento discute el acceso de las mujeres al sistema de seguridad social en Ecuador. Señala que la seguridad social es un derecho universal y que el Estado es responsable de garantizarlo para todos, incluidas las personas que realizan trabajo no remunerado en el hogar como las amas de casa. Propone medidas como la afiliación obligatoria, definir aportaciones del Estado y de los individuos según su capacidad, e implementar prestaciones básicas como la maternidad y la vejez para ampliar progresivamente la cobertura a toda la población.