Este documento explora los cambios normales y problemas comunes relacionados con la sexualidad a medida que las personas envejecen. Explica que aunque los cuerpos cambian con la edad, la capacidad de disfrutar de las relaciones sexuales y la intimidad no disminuyen necesariamente. Detalla algunos desafíos comunes como la disfunción eréctil, la sequedad vaginal y cómo las enfermedades pueden afectar la sexualidad. También discute la importancia de la adaptación y la comunicación con la pareja.
2. Importancia y Alteraciones en la
sexualidad
La sexualidad, se manifiesta a través del afecto, necesidad de intimidad, vinculación, autoerotismo,
autoimagen y el contexto del individuo en relación al género, contexto sociocultural y etnicidad.
Siendo también muy importantes, las características físicas, psicológicas y biográficas del sujeto y la
existencia de una pareja sana. La combinación de la capacidad para disfrutar una relación sexual
satisfactoria y la capacidad de expresar los deseos sexuales propios, no disminuyen con la edad.
3. 1. A medida que envejecemos, nuestros cuerpos cambian, incluyendo nuestro peso, piel y tono
muscular, y algunos adultos mayores no se sienten muy cómodos con sus cuerpos envejecidos. Los
adultos mayores, tanto los hombres como las mujeres, pueden preocuparse de que sus parejas ya no
los encuentren atractivos. Los problemas sexuales relacionados con el envejecimiento como los
mencionados anteriormente pueden causar estrés y preocupación. Esta preocupación puede dificultar
que una persona disfrute de una vida sexual plena.
2. Las parejas mayores enfrentan las mismas tensiones diarias que afectan a las personas de cualquier
edad. También pueden conllevar preocupaciones adicionales de enfermedad, jubilación y cambios en
el estilo de vida, todo lo cual puede ocasionar dificultades sexuales. Hable abiertamente con su pareja
y trate de no culparse a sí mismo o culpar a su pareja.
4. 1. También puede ser útil hablar con un terapeuta, ya sea solo o con su pareja. Algunos terapeutas
tienen adiestramiento especial para ayudar con problemas sexuales. Si siente cambios en la actitud
de su pareja hacia las relaciones sexuales, no asuma que es porque ya no está interesada en usted o
en una vida sexual activa. Hable con su pareja sobre la situación. Muchas de las cosas que causan
problemas sexuales en los adultos mayores pueden ser remediadas.
2. La valoración de la sexualidad en el anciano de ambos sexos, incluye un enfoque múltiple pues más que una
afectación intrínseca, lo que existe es una acumulación de factores que influyen de forma negativa sobre la
actividad sexual (cambios fisiológicos asociados a la vejez y estado de salud) y no exactamente la edad.
3. Debemos tener en cuenta los prejuicios que afectan a este colectivo. Los prejuicios negativos dicen que los
viejos son todos enfermos, deprimidos, pobres y que no tienen sexualidad. Los positivos en cambio, que son
todos buenos, sabios y amables. Cuando hablamos de la sexualidad en el anciano, debemos huir de estereotipos
generalizados que pregonan una pérdida de sexualidad en la vejez.
5. 1. Muchas personas quieren y necesitan tener una relación cercana con los demás a medida que
envejecen. Para algunas personas, esto incluye el deseo de continuar una vida sexual activa y
satisfactoria. Con el envejecimiento, eso puede significar adaptar la actividad sexual para amoldarse a
los cambios físicos, de salud y de otro tipo.
2. Hay muchas maneras diferentes de tener relaciones sexuales y de logar una sensación de intimidad,
solo o con una pareja.
3.
4. La expresión de su sexualidad podría incluir muchos tipos de contacto íntimo o estimulación. Algunos
adultos pueden optar por no participar en la actividad sexual, y eso también es normal.
5. Aquí exploramos algunos de los problemas comunes que los adultos mayores pueden enfrentar con
la sexualidad.
6. ¿Cuáles son los cambios normales?
1. El envejecimiento normal trae cambios físicos tanto en los hombres como en las mujeres. Estos
cambios a veces afectan la capacidad de tener y disfrutar de las relaciones sexuales.
2. Una mujer puede notar cambios en su vagina. A medida que las mujeres envejecen, la vagina puede
acortarse y estrecharse. Las paredes vaginales pueden volverse más delgadas y un poco más rígidas.
La mayoría de las mujeres tendrán menos lubricación vaginal, y puede tomar más tiempo para que la
vagina se lubrique naturalmente. Estos cambios podrían hacer que ciertos tipos de actividad sexual,
como la penetración vaginal, sean dolorosos o menos deseables.
7. 1. Si la sequedad vaginal es un problema, usar un lubricante a base de agua o condones lubricados
puede hacer que la penetración sea más cómoda. Si una mujer está usando terapia hormonal para
tratar los calores súbitos (sofocos) u otros síntomas de la menopausia, es posible que desee tener
relaciones sexuales con más frecuencia que antes de la terapia hormonal.
2. A medida que los hombres envejecen, la impotencia sexual (también llamada disfunción eréctil o DE)
se vuelve más común. DE es la pérdida de la capacidad de lograr y mantener una erección. La DE
puede hacer que un hombre tarde más en lograr una erección. Su erección puede no ser tan firme o
tan grande como solía ser. La pérdida de la erección después del orgasmo puede ocurrir más
rápidamente, o puede tomar más tiempo antes de que otra erección sea posible. La DE no es un
problema si ocurre de vez en cuando, pero si ocurre con frecuencia, hable con el médico.
8. 1. Por ejemplo, las erecciones. Después de los 40 años, y definitivamente después de los 50, las
erecciones son más lentas y se vuelven menos firmes y frecuentes. Ya no bastan las fantasías
sexuales. Hacen falta las caricias, por largo rato. Causa desilusión perder la firmeza y enfrentarse a la
flacidez a causa de distracciones menores, como el timbre del teléfono, pero esos cambios son
perfectamente normales. Lamentablemente, muchos hombres confunden esto con la disfunción
eréctil y se angustian, exacerbando así el problema. La ansiedad estrecha las arterias que llevan
sangre al pene, lo que dificulta aún más las erecciones.
2. Además, muchas afecciones interfieren con las erecciones: la obesidad, la diabetes, las enfermedades
cardiacas, el colesterol elevado y la hipertensión arterial.
9. Frecuencia de la actividad sexual
1. Frecuencia de la actividad sexual
2. La actividad sexual disminuye con la edad, manteniéndose con una frecuencia variable, dependiendo
de las características de la población estudiada. Cabe destacar que la gran mayoría de los estudios
demuestran claramente que la frecuencia de las relaciones sexuales disminuye con la edad y que el
mantenimiento de la actividad sexual en los ancianos depende principalmente de:
3. Buen estado de salud físico y mental.
4. La existencia de un compañero/a sin limitaciones.
5. La historia sexual previa.
10. Comportamiento sexual en la vejez
1. Los cambios fisiológicos, anatómicos y funcionales, en los órganos sexuales en los ancianos no
condicionan obligadamente el cese de la actividad sexual, sino que exigen una adaptación del
comportamiento sexual a su nuevo funcionamiento, evitándose así frustraciones y situaciones de
ansiedad ante las siguientes relaciones sexuales, que podrían llevar al cese innecesario de la
actividad sexual.
2. Está demostrado que el sexo y la sexualidad juegan un papel importante en el envejecimiento
saludable y pleno; sin embargo, las personas ancianas tienen una conducta sexual heterogénea en
relación a sus apetitos e intereses. Además de los factores previamente mencionados que afectan la
conducta sexual en el anciano (envejecimiento fisiológico, patología crónica, efectos secundarios de
medicamentos) se suman los factores sociales que inciden fuertemente en la actividad sexual en la
edad adulta.
11. Cambios en el patrón sexual en el
anciano
1. Como se ha mencionado previamente, el comportamiento sexual en la vejez depende de muchos
factores: salud en general, disponibilidad de un compañero(a) sano(a), personalidad, actitudes hacia y
de los otros, nivel de educación, nivel social, creencias sexuales, actitud sexual previa, intereses y
prácticas previas, grado de satisfacción con la vida, etc.
2. La sexualidad en el anciano debe considerarse en una forma amplia e integral, incluyendo en ella
tanto componentes físicos como emocionales. Por ello, se acepta como normal en el anciano ciertas
modificaciones en el patrón sexual considerado como estándar si se relaciona con el adulto joven;
estas serían: disminución del número de coitos y el aumento proporcional de otras actividades
sexuales como las aproximaciones físicas, caricias, ratos de intimidad emocional, de complicidad,
relaciones de compañía o masturbaciones.
3. La prevalencia de la masturbación se explica, en muchos casos, por la existencia de una pareja
incapacitada y por la frecuencia de viudez en edades avanzadas. Esto, unido al rechazo social que
existe hacia el establecimiento de una nueva pareja, serían factores que propiciarían la satisfacción
sexual mediante la masturbación.
12. ¿Qué causa los problemas sexuales?
1. Algunas enfermedades, discapacidades, medicamentos y cirugías pueden afectar su capacidad de
tener y disfrutar de las relaciones sexuales.
2. Artritis. El dolor en las articulaciones debido a la artritis puede hacer que el contacto sexual sea
incómodo. El ejercicio, los medicamentos y posiblemente la cirugía de reemplazo de articulaciones
pueden ayudar a aliviar este dolor. Descansar, baños tibios y cambiar la posición o el momento de la
actividad sexual pueden ser útiles.
13. 1. Dolor crónico. El dolor puede interferir con la intimidad entre las personas mayores. El dolor
crónico no tiene que ser parte del envejecimiento y a menudo puede ser tratado. Sin embargo,
algunos medicamentos para el dolor pueden interferir con la función sexual. Siempre hable con el
médico si tiene efectos secundarios de cualquier medicamento.
14. 1. Demencia. Algunas personas con demencia muestran un mayor interés en la sexualidad y la cercanía
física, pero es posible que no puedan juzgar qué comportamiento sexual es apropiado. Las personas
con demencia severa pueden no reconocer a su cónyuge o pareja, pero aun así desean tener
contacto sexual y pueden buscarlo con otra persona. Puede ser confuso y difícil saber cómo manejar
esta situación. En este caso también puede ser útil hablar con un médico, enfermera o trabajador
social con adiestramiento en el cuidado de personas con demencia.
15. 1. Diabetes. Esta es una de las enfermedades que pueden causar disfunción eréctil en algunos hombres.
En la mayoría de los casos, el tratamiento médico puede ayudar. Se sabe menos sobre cómo la
diabetes afecta la sexualidad en las mujeres mayores. Las mujeres con diabetes son más propensas a
tener infecciones vaginales por hongos, las cuales pueden causar picazón e irritación y hacer que las
relaciones sexuales sean incómodas o indeseables. Las infecciones por hongos pueden ser tratadas.
16. 1. Enfermedad cardiaca. El estrechamiento y endurecimiento de las arterias puede cambiar los vasos
sanguíneos de manera tal que la sangre no fluye libremente. Como resultado, los hombres y las
mujeres pueden tener problemas con los orgasmos. Tanto para los hombres como para las mujeres,
puede tomar más tiempo excitarse, y para algunos hombres, puede ser difícil lograr o mantener una
erección. Las personas que han tenido un ataque al corazón, o sus parejas, pueden temer que tener
relaciones sexuales cause otro ataque. Aunque la actividad sexual generalmente es segura, siempre
siga los consejos del médico.
2. Si sus problemas cardíacos empeoran y tiene dolor en el pecho o dificultad para respirar incluso
mientras descansa, es posible que el médico quiera cambiar su plan de tratamiento.
17. 1. Incontinencia. La pérdida del control de la vejiga o el escape de orina es más común a medida que las
personas, especialmente las mujeres, envejecen. La presión extra en el vientre durante las relaciones
sexuales puede causar un escape de orina. Cambiar las posiciones o vaciar la vejiga antes y después
de las relaciones sexuales puede ayudar con esa situación. La buena noticia es que la incontinencia
generalmente puede ser tratada.
18. 1. Derrame cerebral. La capacidad de tener relaciones sexuales a veces se ve afectada por un derrame
cerebral. Un cambio en las posiciones o algunos dispositivos médicos puede ayudar a las personas
con debilidad continua o parálisis a tener relaciones sexuales. Algunas personas con parálisis de la
cintura para abajo aún pueden alcanzar orgasmos y sentir placer.
19. 1. Depresión. La falta de interés en las actividades que solía disfrutar, como la intimidad y la actividad
sexual, puede ser un síntoma de depresión. A veces es difícil para una persona saber si está
deprimida. Hable con el médico; la depresión puede ser tratada.
20. 1. Medicamentos. Algunos medicamentos pueden causar problemas sexuales. Estos incluyen algunos
medicamentos para la presión arterial, antihistamínicos, antidepresivos, tranquilizantes, medicamentos
para la enfermedad de Parkinson o para el cáncer, supresores del apetito, medicamentos para
problemas mentales y medicamentos para las úlceras.
2. Algunos pueden conducir a la disfunción eréctil o dificultar la eyaculación en los hombres. Algunos
medicamentos pueden reducir el deseo sexual en las mujeres o causar sequedad vaginal o dificultad
en lograr excitación y orgasmos. Consulte con el médico para averiguar si hay un medicamento
diferente que no tenga este efecto secundario.
21. Cambios físicos que modifican la
respuesta sexual
1. }En el adulto mayor, la sexualidad se modifica a causa de cambios físicos que se producen en su
cuerpo: en piel y mucosas; en el sistema vascular y circulatorio; a nivel neurológico y hormonal;
cambios en la percepción del frío y del calor y cambios en los ritmos horarios.
Los cambios en piel y mucosas no son tan graves en el hombre como en la mujer, que ante cualquier
lesión o condición que afecte a su tejido mucoso presenta problemas; la vagina en la mujer joven es
un conducto que se distiende fácilmente, pero a medida que pasan los años se va volviendo liso y
menos extensible. El principal problema que afecta a los hombres está en la línea vascular, en la
circulación de la sangre: ellos sienten que llega menos sangre adonde debería llegar, y esos cambios
se acentúan con el uso de ciertos medicamentos.
22. Cambios en la sexualidad en la tercera
edad
1. El hombre mayor necesita un estímulo directo para preparase para el acto sexual, a diferencia de lo
que ocurría en su juventud, cuando la mayor parte de las veces bastaba con una insinuación para que
estuviera listo. El problema es que el acercamiento a lo genital de los actuales adultos mayores es
distinto al de los jóvenes; antes, por lo general las mujeres no tenían contacto con los genitales de su
pareja excepto en el momento de la penetración, durante la cual el hombre se movía y ella no hacía
nada, o sea, hacía lo justo y necesario para quedar embarazada. La estimulación directa implica que la
mujer toque y acaricie los genitales, frente a lo cual lo más frecuente es que ella experimente un
rechazo debido a ciertos elementos culturales.
23. 1.
La mujer presenta cambios totalmente distintos; en ella se mantiene o aumenta el deseo sexual. Las
mujeres tienen muchos cambios físicos que les pueden provocar problemas, pero en edades más
jóvenes el principal obstáculo de la mujer para disfrutar su sexualidad es el temor a embrazarse,
seguido de la falta de privacidad; con la menopausia el fantasma del embarazo desaparece y
comienza a aumentar el deseo sexual, ya que la capacidad de la mujer para sentir placer y alcanzar el
orgasmo se mantiene indemne.
24. Disfunción sexual de origen psíquico en
el anciano
1. La causa más frecuente de disfunción sexual de origen psicógeno es la depresión, que debe
descartarse siempre, responsable del 10% de los casos de impotencia en el anciano. Como hemos
visto anteriormente, los psicofármacos que se utilizan en el tratamiento de dichos trastornos pueden
también contribuir a empeorar la disfunción sexual, sobre todo los que tienen efectos anticolinérgicos,
como algunos antidepresivos y la mayoría de antipsicóticos. Los Antidepresivos pueden producir,
además de disfunción eréctil en el varón, disminución de la libido y anorgasmia en la mujer.
2. Otras patologías psíquicas que puede cursar con alteraciones en la función sexual es el Trastorno de
Ansiedad en cualquiera de sus formas.
3. Es también frecuente en el varón la aparición de ansiedad anticipatoria respecto a su posible
respuesta sexual que le lleva a presentar problemas de potencia sexual de carácter psicógeno, como
se había comentado anteriormente.