2. Relacion con redes sociales
Un treinta y dos por ciento de los adolescentes conectados a la red han experimentado algún
tipo de acoso a través de Internet un problema conocido como “ciberbulling”. Según datos
recientes, un 15% de los adolescentes que utilizan Internet han sufrido el reenvío de su
material sin permiso, un 13% han recibido mensajes amenazantes y un 6% han sufrido que se
publicasen fotografías comprometedoras sin su permiso. Tras los recientes debates sobre
Facebook y las cuestiones relativas a la privacidad, es importante tener en cuenta que la nueva
orientación de Facebook para convertirse en una red más abierta y pública no sólo afecta a una
población adulta preocupada por “hacerse amigos” de sus jefes y compañeros de trabajo o
ajustar las opciones de privacidad de las fotografías de sus hijos: es algo que afectará a los
propios niños, así como a adolescentes y jóvenes adultos, que en conjunto suponen la cuarta
parte de los usuarios de esta red social. El verano pasado, la población de Facebook estaba
compuesta en un 9,8% de usuarios de 17 años o menos, y aquellos de edades comprendidas
entre los 18 y los 24 suponían el 25,1%. Dentro de estos dos grupos están los propios niños,
los adolescentes y preadolescentes que aún están aprendiendo a usar la red correctamente, a
menudo bajo la supervisión de los adultos. Al comenzar a navegar por redes sociales como
Facebook, MySpace y otras, aprenden (a veces por las malas) por qué no es apropiado publicar
cualquier cosa que les pase por la cabeza ni subir todas las fotografías de la tarjeta SIM de una
cámara. Aprenden que compartir demasiado puede tener consecuencias en el mundo real.
Desgraciadamente, también aprenden que, como en el mundo real, no todo el mundo
conectado a la red va a ser agradable.
3. Consecuencias del ciberbullying
La información nociva, fotografías vegatorias, etc, no solo provoca consecuencias psicológicas a largo plazo
sino que pueden afectarles en un futuro a la hora de buscar empleo (por ejemplo). Las personas que han
sufrido este tipo de acoso, a largo plazo tienen:
* Secuelas emocionales ,cambios de personalidad característicos del estrés postraumático
( Como el ciberbullying se produce a una edad muy temprana, los síntomas postraumáticos que perduran a lo
largo del tiempo, pueden confundirse con rasgos de personalidad reales de la víctima)
* Dificultades a la hora de relacionarse
* Mucho tiempo después de la situación de acoso, se sienten abandonados, solos, exiliados de la sociedad y
sin protección. * Si han vistos incapaces de combatir, por ello se sienten perdedores y pierden la autoestima y
confianza en si mismos. Se vuelven hostiles, suspicaces, nerviosos, pierden la sensación de control, se
sienten incapaces de escapar, su sistema de autodefensa se siente sobrepasado y sufren desesperanza
aprendida. *En los casos mas extremos se ha llegado al suicidio.
4. Estrategias para prevenirlo
Cuida la información que envías y compartes por internet a través de los foros, blogs, correos
electrónicos;
redes sociales, mensajes de texto o
en las charlas por sms. Estas
conversaciones podrían ser usadas para perjudicarte. Evita hacer comentarios desagradables
en la red. Si eres ofensivo o burlón, será más fácil que algún cibernauta te observe y te quiera
pagar de la misma forma. Nunca respondas una provocación con la misma actitud, lo mejor es
bloquear a ese contacto y desestimar sus tontos comentarios. Informa al proveedor del
servicio online que uno de sus usuarios muestra una conducta agresiva. Si la conducta del
agresor contradice las normas de uso de este medio, el contenido ofensivo se retirará. Ayuda a
la víctima si has detectado al agresor. Quizás no desees mostrar tu posición en los medios
online donde el niño es atacado, pero puedes comunicárselo a sus padres, maestros y otros
adultos. Lo importante es no permanecer indiferente.