2. Reconocer que cuando la comunidad
de los bautizados se reúnen en torno al
altar, la acción es signo de que nuestra
oración es expresión de lo que creemos,
de tal forma que tenemos la finalidad
de alimentar nuestra fe al unirnos más
al Padre, por medio del Hijo y en el
Espíritu Santo.
OBJETIVO
3.
4. “Todos se reunían asiduamente para escuchar la
enseñanza de los Apóstoles y participar en la vida
común, en la fracción del pan y en las oraciones.
Todos los creyentes se mantenían unidos y ponían lo
suyo en común: vendían sus propiedades y sus
bienes, y distribuían el dinero entre ellos, según las
necesidades de cada uno. Íntimamente unidos,
frecuentaban a diario el Templo, partían el pan en
sus casas, y comían juntos con alegría y sencillez de
corazón; ellos alababan a Dios y eran queridos por
todo el pueblo. Y cada día, el Señor acrecentaba la
comunidad con aquellos que debían salvarse”.
(Hch 2, 42. 44-47)
5. “La obra de nuestra redención se efectúa
cuantas veces se celebra en el altar el sacrificio
de la cruz, por medio del cual «Cristo, que es
nuestra Pascua, ha sido inmolado» (1 Co 5,7).
Y, al mismo tiempo, la unidad de los fieles, que
constituyen un solo cuerpo en Cristo, está
representada y se realiza por el sacramento del
pan eucarístico (cf. 1 Co 10,17). Todos los
hombres están llamados a esta unión con
Cristo, luz del mundo, de quien procedemos,
por quien vivimos y hacia quien
caminamos”.(LG 3)
8. Una realidad que se puede constatar
desde todos los tiempos es que el
hombre es un ser social por naturaleza
y lo experimenta de diversos modos
dentro de su propia existencia y en su
relación con los otros.
9. Desde que nace, cada persona pertenece a un
núcleo familiar, a una sociedad y a una
determinada comunidad; por lo que se da una
identidad, una lengua, un rol de vida, unas
costumbres o tradiciones, y de allí se desprende
una comunicación y una relación con los demás,
de manera que en el transcurso de la vida se va
experimentando el unirse libremente a otros,
compartiendo la amistad, la vida o los
sentimientos, participando de un grupo de
amigos o de una determinada índole.
10. Es evidente que se distingue como este aspecto
social del hombre se ve reflejado en la unión de las
personas, ya sea por la parte de compartir lo cultural, lo
social, lo económico, lo religioso o ciertos intereses en
común. De allí que una finalidad social puede ser el
reunirse con los otros y la puesta en común. Por
ejemplo cuando un grupo de personas se reúnen en un
restaurant, o para realizar una fiesta, o bien en un
estadio,
11. esta expresión de reunirse toma una dimensión
simbólica: es visible pero manifiesta alguna cosa
que no se ve, pero que se expresa a partir del
hecho de reunirse y muestra la finalidad de la
acción. Por lo tanto las personas pueden estar
ligadas entre ellas por algo que permanece en
común, o un fin o un deseo particular, de allí el
hecho de reunirse.
12.
13. La palabra Iglesia
proviene del
griego Ekklhsia
(ekklesia) que
significa
literalmente la
colectividad de
los llamados, las
asambleas
públicas del
pueblo
14. Es en el cristianismo primitivo que
toma valor esta palabra que es
utilizada en la mayoría de los pasajes
del Nuevo Testamento para traducirse
como comunidad, asamblea de la
comunidad o Iglesia, refiriéndose a «la
comunidad local o al conjunto de los
cristianos que habitan en un
determinado lugar, o bien como la
Iglesia que es el conjunto de la
totalidad del pueblo de Dios, es el
conjunto universal de los cristianos».
15. Por lo tanto la palabra Ekklhsia (ekklesia) expresa y
significa al mismo tiempo dos términos: Iglesia y
asamblea litúrgica. Significando:
•la asamblea reunida para escuchar la
Palabra, para celebrar la Eucaristía;
•la comunidad que reside en un determinado
lugar;
•la comunidad universal de todos los que
creen en Cristo Resucitado y lo confiesan
como el Señor, formando el Pueblo de Dios o
la Iglesia universal que celebran su fe.
16. Es algo propio del ser
de la Iglesia como pueblo
que Dios reúne en el
mundo entero, existiendo
en las comunidades
locales y realizándose en
la asamblea litúrgica,
sobre todo en la
Eucaristía, ya que vive y
se alimenta de la Palabra
y del Cuerpo de Cristo
(CEC 752).
17. Por lo tanto:
“Así como Cristo fue enviado por el Padre, Él, a su
vez, envió a los Apóstoles llenos del Espíritu Santo.
No sólo los envió a predicar el Evangelio a toda
criatura y a anunciar que el Hijo de Dios, con su
Muerte y Resurrección, nos libró del poder de
Satanás y de la muerte, y nos condujo al reino del
Padre, sino también a realizar la obra de salvación
que proclamaban, mediante el sacrificio y los
sacramentos ……. la Iglesia nunca ha dejado de
reunirse para celebrar el misterio pascual: leyendo
"cuanto a él se refieren en toda la Escritura" (Lc.,
24,27), celebrando la Eucaristía. (SC 6)
18. Dentro de la vida de la Iglesia, el hecho de
reunirse los cristianos católicos ha estado
presente siempre desde las primeras
comunidades hasta hoy en día. El hecho de que
se reúnan para celebrar el Misterio Pascual de
Cristo, de allí que la Iglesia no ha dejado de
reunirse para celebrarlo. Este hecho nos expresa
el factor comunitario de la experiencia de la fe:
lo que se cree se celebra y lo que se celebra
manifiesta lo que creemos y esta acción va
dirigida junto con Cristo a Dios por medio del
Espíritu Santo.
20. La fe cristiana celebra
también su evento que
la constituye y el
misterio que la
alimenta. Este evento,
este misterio es desde
el Hijo amado de Dios,
Jesucristo. Por tanto la
Iglesia celebra el
Misterio Pascual de
Cristo.
21. ¿Qué es el Misterio
Pascual? Se refiere
esencialmente a Cristo y a su
obra de la redención humana
efectuada principalmente por
su pasión, muerte, resurrección
y glorificación. Se celebra
desde la Fe ese mismo
acontecimiento actualizado y
re-presentado a partir de los
signos sacramentales de la
liturgia, en los sacramentos y
de forma especial en la
Eucaristía.
22. El Misterio Pascual indica nuestra recepción
de la vida divina en la humanidad vivificada y
vivificante del Cristo glorioso que nos hace pasar
de la muerte a la vida por medio de los
sacramentos.
23. Desde el Misterio Pascual es donde nace también la
Iglesia, por el que vive y del que se alimenta, al igual
que tiene la tarea de darlo a conocer y celebrarlo para
que sea fructificado en todo el género humano en
cumplimiento al designio divino por medio de la obra
de redención ofrecida por Cristo y continuada por la
acción del Espíritu Santo en la Iglesia.
24. De allí que «cuando la Iglesia celebra la Eucaristía,
memorial de la muerte y resurrección de su Señor, se
hace realmente presente este acontecimiento central de
salvación y se realiza la obra de nuestra redención»
25. El hecho de que la
comunidad cristiana
se reúna, es para
celebrar la obra de
Cristo (su Misterio
Pascual), junto a Él.
El sujeto de la
celebración es
siempre Cristo y Él
asocia a su esposa
amada la Iglesia.
26. •PREGUNTEMONOS
•¿Qué significa la palabra Ekklhsia
(ekklesia) y a qué hace alusión?
•Después de reflexionar en este tema ¿Qué
significa para ti la Iglesia?
•¿Qué es lo que celebra la comunidad de
cristianos católicos al reunirnos como
Iglesia?
•¿Qué es el Misterio Pascual?
27.
28. •Gracias Señor,
porque en la
última cena
partiste tu pan y
vino en infinitos
trozos, para
saciar nuestra
hambre y
nuestra sed...
40. •Gracias, Señor,
porque todos los
días puedo volver
a empezar..., y
continuar mi
camino de
fraternidad con
mis hermanos, y
mi camino de
transformación
en ti...